Lindsay
No sé qué demonios me pasa pero al ver a Leo con las flores y vestido así, casi parece lindo.
—Bueno y que vamos a hacer—le pregunte a Leo
—Lo que tú quieras, Lindsay—me dijo con ternura
—Bueno, aquí está bien—le dije señalando a una banca
—Okey, Lindsay—me contesto
Y nos sentamos.
—Bueno, cuéntame de ti Leo ¿además de ser el amigo de mi hermana que más eres?—le dije tratando de hacer conversación.
—Bueno este pues no lo se...soy de Coldwater Maine, solo tengo padre ya que mi mamá me abandono de pequeño, me vine a Houston a los 8 años y aquí he vivido.
—Okey... lo siento te entiendo un poco pero yo me refería que cosas te gustan y esas cosas...—le digo tratando de no pensar en mamá, y lo escucho llamarse idiota en voz baja.
—Ah... claro, lo siento estoy un poco nervioso, no mucho, me gusta el helado y el yogurt de frambuesa, toda la comida rápida, Los lunes y martes voy a clases de defensa propia, y a veces leer—me dijo y yo me quede en shock.
—Guau, genial—no creía que le gustara leer ni que supiera defensa eso es nuevo y aunque sé que no lee los mismos libros que yo, si me interesa saber que lee— ¿y que lees si se puede saber?—digo muy interesada
—Pues no a diario por lo regular historietas y a veces libros literarios—me dijo algo incomodo
— ¿Como cuáles?—le dije siguiendo mi interrogatorio con una sonrisa y obvio le me sonrió de regreso.
—Bueno no muchos, preciosa digo Lindsay—dijo poniéndose Rojo—la mayoría ficción como, Hermosas Criaturas, Cazadores de sombras, Cirque du freak, Hush Hush, etc. novelas de vampiros, hombres lobos y así—dijo
Yo me quede sin habla no podía creer que el chico que sentaba con mi hermana todos los días y el cual era su compañero de fiestas leyera libros de ese tipo, y él me contesto como sabiendo lo que pensaba
—Si sé que es sorprendente ¿no? ya que tú debías pensar que soy un idiota que solo bebe y no hace tarea y es el segundón de tu hermana pero no es así tengo mente, y si efectivamente me voy a fiestas a beber y falto a clases pues papá nunca está en casa y soy yo solo ya que aunque tu hermana es mi amiga no es muy comprensiva que digamos y sé que también soy un idiota porque no puedo hablar como una persona inteligente cuando estoy contigo de hecho ensaye mil veces para no salir con una estupidez en la cita y estas flores se las pedí a la vecina y este era el traje de memo bueno de un amigo de su boda y Edward ya estaba harto de mí—me dijo con una voz más seria.
—Lo siento, fui muy prejuiciosa contigo—le dije ya que tenía razón porque siempre nos imaginamos al lector como un chico listo que usa lentes y pensamos que una persona fiestera es mala en la escuela.
—No te preocupes hermosa, digo Lindsay—me dijo y se volvió a sonrojar
Y le sujete la mano la cual lleve a mi mejilla y le sonreí
—No te preocupes hermosa está bien y si fui prejuiciosa porque no eres un idiota de hecho eres bastante lindo aunque muy exagerado con tus reacciones como desmayarte cuando te bese—le dije riendo.
Él estaba sonriendo aunque no como un estúpido sino de una forma linda.
—Gracias hermosa no puedo creer que sea verdad que por fin este contigo parece un sueño ¿te puedo pedir un favor?—me dijo
—Claro, bueno depende—le dije
— ¿Te puedo dar un beso?—me pregunto poniéndose como tomate de nuevo
Me sonroje al oírlo y le sonreí
—Sí, pero prométeme no desmayarte después—le dije riendo.
—Lo prometo—me dijo emocionado y luego me sujeto con cuidado con ambas manos y me beso.
Si ya se muchas de ustedes deben de pensar que como de la nada le gusto Leo, pero piénselo, a Lindsay ya le gustaba pero obvio no lo admitía, y al oírlo por primera vez se dio cuenta de que no todo es lo que parece.
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The Twins White
Teen FictionHabía una vez dos hermanas que aunque eran gemelas eran muy distintas. Lindsay era la típica chica lista de la escuela, aunque demasiado confiada. Luisa por su lado, era la clase de chica que cualquier persona consideraría rebelde, maleducada y no...