Había una vez dos hermanas que aunque eran gemelas eran muy distintas.
Lindsay era la típica chica lista de la escuela, aunque demasiado confiada.
Luisa por su lado, era la clase de chica que cualquier persona consideraría rebelde, maleducada y no...
Lindsay Entramos para ver una oficina súper desordenada y caminamos buscando entre los papeles y entonces veo la foto con la letra de papá donde está escrito Sulia y se la enseño a Luisa, ella solo la ve preguntándose si a Sulia es Sonia, entonces Leo se acerca y me dice.
IMAGEN MULTIMEDIA DEL INICIO
—Linda, tranquila...
—No puedo creer que un baboso haya pisado la evidencia—suelta Luisa
—Tranquila Luisa, aun así se ve que quiso escribir Sulia aunque con doble I, creí que papá ya no escribía así (Christopher White, el gran soldado tenía una equivocación a la hora de escribir escribía a veces las vocales dobles, se supone que Sonia lo ayudo con eso)
—Estaba nervioso, quizás fue eso.
—No, Luisa él no escribía así me llego a mandar muchas cartas y en ninguna se equivoco.
— ¿Y si no quiso escribir eso?—soltó Leo
— ¿A qué te refieres amor?—le pregunte
—Bueno como vemos un idiota piso la evidencia tal vez borro algo.
—Presta acá—se la arrebato Ema, saco un marcador y esto quedo.
—Listo—dijo Ema y a mí se me salieron las lágrimas. Porque aunque no quisiera admitirlo tenia la mínima esperanza de que no fuera ella.
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No lo creia, la mujer que quería, la mujer que me cuidaba y fue esta un cierto punto una madre, es una maldita mentirosa que mato a mi padre y mando a Luisa a la cárcel. No pude evitarlo y comencé a llorar.
—Hermosa tranquila, no llores, yo se que todo mundo te engaño, pero la vida es así, y yo aun estoy aquí—me dijo Leo y yo lo abrace, abrazo que él me devolvió, y saben es cierto la vida puede ser mala a veces, pero eso es solo para hacernos más fuertes.
—Tenemos que encontrar a esa mujer—dije
Y en eso se oyen voces
—Agusto, ¿donde estas?—dijo la voz—Hey ¿donde estas?, si te largaste por donas te corro, ya te dije que estabas a prueba.
Se oyen pasos cerca, demasiado cerca
— ¡AGUSTO! ¿Qué demonios...porque la celda está abierta?, ¿Quién te hizo esto? ¡¡HEY SI HAY ALGUIEN AQUÍ SALGA CON LAS MANOS EN ALTO O SINO DISPARO!!
Y en eso se oyen unas llaves del otro extremo de la puerta y la puerta se abre de par en par.
