enfrentamiento

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- ¿Que mierda haces aquí, Terapon? - soltó con enojo.

- kyouya - dijo este en un susurro, estaba sorprendido, nunca creyó que el rubio aparecería pues no había llegado en los tres días que tenía Erika allí.

- contéstame bastardo - lentamente se acercaba a él importandole muy poco que se encontraban en un hospital.

- kyouya cálmate - su amigo pelinegro intervino colocándose delante de él y pasando un brazo por su abdomen.

- contéstame - ignoró a su amigo y se enfocó en el pelinegro quien se encontraba en la sala de espera.

- me enteré de que ella tuvo un accidente mientras tú estabas ausente así que decidí venir a verla - dijo con tono desafiante, ya había salido de la impresión al verlo.

- sí tuvo o no un accidente o si yo no estaba presente a ti no te tiene que importar - intentó safarse del agarre de Takeru pero este lo apresó con más fuerza.

- ¿Porqué no? - sonrió de forma ladina - ¿Porqué soy un amigo de la infancia que fue rechazado? ¿Porqué volví varios años después y fui rechazado por segunda vez? ¿Porqué volví para intentarlo una última vez? - dijo con osadía deleitándose con la mirada de odio que el rubio le dedicaba - pues yo creo que sí me importa.

- eres un maldito arrastrado - escupió con odio - ¿Tan desesperado estás para volver a intentarlo por tercera vez? Eres patético.

- sea o no patético no es tu problema, volveré las veces que quiera - se levantó de su asiento e intentó acercarse un poco haciendo que Takeru se pusiera en guardia.

- adelante, hazlo no cambiarás nada - dijo seguro de sus palabras.

- yo creo que tengo una oportunidad - en su rostro tenía una expresión difícil de descifrar, es como si disfrutara lo que está apunto de decirle.

- ¿Que? - kyouya se extraño por sus palabras y frunció el ceño con confusión al igual que Takeru.

- ayer a mediodía yo era el único en la sala de espera por Erika, sus padres habían ido a descansar y me dejaron a cargo de su hija - hizo una pausa para examinar las expresiones de Kyouya, quien se veía confuso - el doctor se me acercó para decirme que podía verla por unos instantes ya que la habían despertado para examinar las funciones de su cerebro a la hora de interactuar con alguien más - contuvo una risa al ver como la expresión del rubio cambiaba conforme hablaba - intenté contactar a sus padres pero el doctor dijo que no era necesario porque luego la volverían a dormir, en fin, me preguntó si tenía algún tipo de parentesco con la paciente... - volvió a hacer una pausa para generar suspenso - le dije que soy su novio, me dejó entrar y ella no lo negó - soltó una risa escandalosa al ver como el rubio forcejeaba con su amigo para liberarse e ir a golpearlo - hablamos por un rato y nunca me preguntó por ti, parecía enojada. Sí me lo permites te diré una cosa; creo que ella se está cansando de ti.

Eso fue todo, con solo decir la última frase logró que kyouya perdiera toda pizca de cordura que tenía y de un tirón logró safarse del pelinegro, el cual intentaba detenerle. Nunca antes se había visto al rubio tan furioso y sus ojos color rojo no eran de mucha ayuda. Kyouya se acercó con mucha rapidez hacia Terapon, quien no tuvo oportunidad de reaccionar cuando el rubio lo sujetó del cuello.

- escucha bastardo - soltó con total furia - nadie va a quitarme a Erika, ¿Entiendes? - en ningún momento notó que su agarre sobre el cuello del contrario era tan fuerte que no le permitía respirar.

- y-yo no... Te la habré... Q-quitado si ella... Renuncia a ti... - hablaba mientras intentaba tomar aire, cosa que no lograba mucho.

- ¿Que te hace pensar que renunciará a mi? - preguntó apretando con más fuerza.

- primero sueltalo - intervino Takeru - lo estás asfixiando, así no puede responderte - el rubio chasqueo la lengua y lo soltó, pero solo un poco, lo suficiente para que pudiera hablar.

- vaya... Gracias Takeru - dijo con una sonrisa hipócrita.

- cállate, no lo hice por ti imbécil - el pelinegro arrugó su nariz y se alejó unos cuantos pasos.

- habla - le ordenó Kyouya mirándolo fijamente a los ojos.

- ella se veía muy molesta, aunque nunca dijo tu nombre puedo asegurarte que hablaba de ti - respondió sin titubear.

- ¿Cómo sabes que era yo?.

- ¿A quien más puede llamar "bastardo rubio oxigenado"? - respondió con una sonrisa divertida en su rostro.

Esa frase hizo que kyouya quedará estupefacto por unos momentos pero la risa de Takeru lo despertó del trance. Volteó a mirarlo y él pelinegro notó la mirada asesina de su amigo por lo que apretó los labios para evitar seguir riendo.

- ¿Que te dijo? - intentó ignorar lo que antes había escuchado.

- que no quería verte - al rubio le sorprendió notar que Terapon respondía sus preguntas sin negarse.

- escúchame bien, imbécil - acercó su rostro al contrario quedando a solo centímetros. El pelinegro ni se inmutó por la repentina cercanía del rubio - no permitiré que un bastardo como tú me la quite, ¿Oíste?.

- parece que eres tú el que debe oír bien - dijo - yo no te la habré quitado si ella renuncia a ti.

- Erika nunca se alejara de mi.

- todos tenemos nuestro límite amigo, y créeme ella ya llegó al suyo - su semblante se tornó serio de repente - la forma en que la tratas le hace daño y a ella aún le queda un poco de dignidad - siguió hablando sin percatarse de una persona que se acercaba a ellos lo escuchaba con atención - Erika está por rendirse Kyouya, es mejor que lo aceptes.

- nunca lo voy a aceptar - lo desafío - aunque eso significa que entre en guerra contigo.

- ¿Acaso quieres pelear? - este le miró divertido y con una sonrisa ladina.

- por ella haría lo que fuera - respondió el rubio sin dudar.

- muy bien, te pondré a prueba kyouya - Terapon comenzó a avanzar hasta pasar al lado de Takeru - veamos quien se queda con ella - giró levemente su dorso y lo miró sobre su hombro.

- no perderé ante ti, bastardo - kyouya no lo miraba pero estaba consiente de que él seguía ahí.

- eso lo veremos - sin decir nada más el pelinegro abandonó el hospital.

- kyouya... - Takeru se acercó a él y colocó una mano en su hombro.

- no pasa nada, Takeru - de repente la expresión seria del rubio fue cambiando hasta formar una mueca terrorífica que le causó escalofríos al pelinegro. Kyouya volteó a mirarlo mientras sonreía - no permitiré que me la quite.

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Se prendió!!!!!

Bienvenidos a este nuevo arco!!!! :3

Terapon no se cansa de que lo rechacen XD

Bueno bueno eso no era lo que quería decirles... Tengo malas noticias (o bueno para mí lo son) posiblemente este sea el último arco, POSIBLEMENTE!!!! no estoy confirmando nada y aún sigo pensando en si debería acabar este fic con este arco o si debería ponerle fin con otro... Aún lo tengo en consideración así que no se preocupen v:

Nos leemos luego (^^)

Drama innecesario (kyouya Y Erika) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora