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Nicolas, Mario y Daniel bebían como cosacos mientras la música resonaba otra noche más en Heart Ibiza.

Las camareras iban de un lado a otro y una de ellas hablaba con nosotros de ve en cuando escondiéndose de sus compañeras para que no la regañasen.

Era alemana también.

La noche iba muy bien, baile, risas y entretenimiento, otro verano por aquí y eso me hacía muy feliz.

Durante toda la noche mientras las chicas, el alcohol iba y venía me fijé en una de las camareras que estaba en  la barra. Parecía muy joven, y llevaba todo el día trabajando, ya que llevábamos desde las seis de la tarde aquí comiendo y estando en la piscina.

Me puse de pie y fuí a la barra ya que nadie nos atendía para pedir una cachimba.

-Perdona.-La llamé.

Se giró y me sonrió.

-Dime, ¿qué te pongo?

-Mira es que estamos en esa mesa de allí.-Señalé.-...y nos preguntábamos si podriaís servirnos una cachimba.

-Claro, yo os la llevo, con las pastillas y todo.

-¿Cuánto es?

-Depende de las horas.

-Creo que dos horas.

-Cuarenta euros.

Asentí y le di la tarjeta. Ella la cogió y rápidamente la pasó por el apararo para que cobrase.

-Eres muy joven, ¿no?

Me miró y se rio.

-¿Por qué lo dices?

-Llevas todo el día aquí, debes estar muy cansada.

-Ven, sigamos hablando detrás que tengo que traer unas cosas.

Fui con ella detrás, que no estaba lejos, y vi como cogió como toda una campeona una caja de cervezas, llenas. Fui un caballero y la ayudé.

-Gracias, no hace falta, es mi trabajo. Y sí, estoy muy cansada, pero es lo que toca.-Sonrió amablemente.

-¿Cuántos años tienes?

-Diecinueve.

Me quedé bastante sorprendido.

Desde luego mi hija o hijo con diecinueve años no va a trabajar.

Bueno, obviamente, yo gano para que mis hijos en un futuro no hagan nada.

-¿Y a qué hora sales?

-Cuando os ponga la cachimba me voy.

-Genial.-Sonreí.

Volví con mis amigos y otra de las camareras nos trajo la cachimba, miré a todos lados para ver donde estaba "Carlota" pero no la vi.

Lo único que vi fue como el cielo estaba empezando a esclarecerse, y la gente seguía aún agitando su cuerpo al ritmo de la música.






N/A: ¡Haré una maratón para que os situéis! Espero que os esté gustando esto. Besos 💙

Ugly love - Roman BürkiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora