El chico del piano S.M.

13.-

— ¿Entonces por eso se conocen? -Pregunto Shawn mientras devoraba un pedazo de pizza, ya que la historia acerca de cómo nos conocimos se le hizo interesante. Pobre, aún no sabe que Ed está perdidamente enamorado de el.

— Sí, pero estoy soltero. -Wow, que coqueto, Ed.

Shawn solo río y volteo a verme por primera vez en la noche. ¿Como no ponerme nerviosa con esa mirada? Seguidamente pareció darse cuenta que no quitaría la vista así que solo sonrió. Le sonreí de vuelta y voltee mis ojos a Ed, quien me miraba con una sonrisa picarona.

— Ed, eh... -Shawn voltea a ver al mencionado con una sonrisa, ¿no se cansa de ser lindo?- Creo que deje algo importante en mi auto, ¿podrías bajar por el? Y descuida, sabrás lo que es cuando lo veas.

Mi amigo se fue casi corriendo, haría lo que fuera por concederle lo que sea a Shawn.
Una ves que el se va dejándonos solos me vuelvo a poner nerviosa, más si estábamos a centímetros del uno del otro ya que hace un rato nos encontrábamos viendo películas en mi sofá y bueno, esta ves Ed me dejo estar a lado de Shawn.

Aún me preguntaba porque realmente Shawn se fue de la nada, digo, solo lo vi una vez y con eso solo me dijo que había hecho no se que tantas cosas y había avanzado en la vida pero realmente ese día del auto se comportó como un idiota, uno de verdad. Me dolió su forma de ser conmigo, ¿que le hice para que me hiciera eso?

— Samantha.

El chico que tenía frente mío me saca de mis pensamientos.

— ¿Sí? -Contesto.

— Aún tenemos una práctica de piano por dar, ¿sabes? -Sonreí, ¿como lo olvidaría?

Asentí como respuesta y fue ahí cuando me quedé paralizada al ver llegar a Ed con un teclado en sus brazos cruzando la puerta.

— Yo pensé que serían condones. -Dice Ed.

Mi corazón dejo de latir, no podía pensar en nada, mi mente, mi respiración y corazón estaban en shock. Shawn pareció notarlo así que me abrazo y me dedico unas lindas palabras, me las decía en mi oído y me las susurro.

— Quiero arreglar mi amistad contigo. Se que fui un idiota y quiero remediarlo, te prometo contar todo de mi vida pero por favor perdóname. -Al decir esa última palabra se separó de mi y me dedico una tierna sonrisa. Ed colocó el teclado en una pequeña mesa que se encontraba delante nuestra, lo conecto y yo aún seguía sin palabras. Voltee a ver otra vez a Shawn y solo río.- Adelante, úsalo.

Sin más me abalancé sobre el y le di un gran abrazo, el se asusto pero no tardó en responderme mi inesperado abrazo de oso.

— Gracias, no tenías que, Shawn, con tan solo tú amistad estoy más que bien.

— No seas tonta, te lo mereces, además, así nos conocimos tú y yo y no quiero que se pierda la promesa que te hice. Aprenderás piano quieras o no.

— Chicos... -Habla Ed y rápido Shawn y yo nos separamos.- Creo que me tengo que ir, mañana tengo que ir a la escuela y bueno, tengo que empezar a ensayar mi heterosexualidad al parecer. Sam, ¡mañana quiero un beso apasionado! -Me pongo roja y pienso. Nunca e dado mi primer beso, ¿mi ahora mejor amigo gay sería mi primer beso?- ¿Que pasa cariño? Te pusiste roja... no me digas, estás enamorada de mi. Lo lamento corazón, yo soy súper gay.

— ¿Que? ¡No! -Grité tirándole una almohada del sillón.- Es solo que... yo, bueno, ya sabes...

— No me digas que... -Yo asiento, al parecer sabía de lo que estaba hablando.

Shawn parecía confundido, bastante confundido.

— ¿Que pasa?

— Pues Sam nunca a dado su primer beso, y yo no quiero ser su primer beso, ¡es muy inocente para la clase de besos que necesito mostrar!, Sam, yo quería una perra total, no una santa.

— ¡Ed! -Le regaño.

— ¡Alto, esperen, esperen, esperen! -Interrumpe Shawn.- ¿nunca has dado tu primer beso?

— ¡Que no! -Gritó por ultima ves.- Shawn, Ed, gracias por la visita pero ya es tarde, tengo sueño, mañana trabajo y tengo tarea por hacer. Shawn, muchas gracias por el teclado, te lo agradezco mucho, luego nos pondremos de acuerdo. Ed, tú solo mándame mensaje a que hora quieres que esté ahí y yo lo estaré, nos besaremos, no hay problema.

— Sam, yo... -Ed trata de acercarse a mi pero yo retrocedo y me voy rumbo a mi habitación solo diciendo un "Buenas noches".

Entro en mi habitación y cierro la puerta tras de mi, no tardó en ponerme mis pijamas y recostarme en mi suave cama la cual me llama para que nunca la deje. Me tapo hasta mi cabeza con las cobijas y solo espero a que el sueño me me venza.
Mi cabeza ganaba con mis pensamientos, trato de dejar de pensar que Ed me besara y que nunca tendré mi primer beso como quisiera, sería muy extraño, bastante.

Tocan suavemente la puerta y pienso que mi hermana a llagado, solo me a avisado, pero luego escucho rechinar la puerta y pienso que probablemente Ed quiere hacerme cambiar de opinión de mi humillante tema.

— Ed, vete, no hay más de que discutir. Mañana te besare, será extraño pero yo te lo prometí y no pienso romper eso. Además -Suspiro.-, es solo un simple beso.

Un peso sobre la cama hace que gire y ves a Shawn con una media sonrisa.

— Yo no creo que sea un simple beso, Sam. -Shawn se recuesta y también se tapa con las cobijas, los domos nos estamos mirando a los ojos, solo recostados con un silencio cómodo.

— ¿Como fue tu primer beso? -Pregunto.

— Pues... -Suspira.- Fue como a los once años, me gustaba una chica pero ella era mayor. No diría que se aprovechó de mi pero ella sabía que me gustaba y quería darle celos a su novio. ¿Te imaginas? Solo tenía once años.-Río.

— ¿Enserio? Dios, eso no me gustaría recordar cómo primer beso.

El chico que estaba a lado mío solo sonríe una vez más y me enamore más.
¿Que sería besar a Shawn Mendes? Quisiera que el fuera mi primer beso, quisiera que fuera mi primer novio y mi primer todo, estaba tan enamorado de el que solo me imaginaba una vida con el. Que triste, sabía que el no sentía lo mismo.

— Samantha... ¿Como quisieras tú primer beso?

— Quiero que sea con la persona que me gusta, solo eso.

Shawn sonrío y me acerco a él, haciendo que nos diéramos un abrazo, el me si tenía de la cintura y yo por sus hombros. Sus latidos eran algo Rápidos así que me aleje de el al escucharlos.

— ¿Te encuentras bien?

— Eso que escuchaste, tú lo provocas.

El aire se había escapado de mis pulmones.
Shawn dejo una de sus manos en mi mejilla mientras acariciaba la misma. Se acercaba cada ves más, el no paraba de ver mis labios y una ves que also su mirada hacia mi solo podía notar sus ojos dilatados.
Quería tanto esto que se lo dije.

— Me gustas, ya tienes lo necesario para ser mi primer beso perfecto. ¿Que esperas?

Esto pareció causarle gracias ya que tenía una grande sonrisa en su rostro.

— Entonces ya somos dos.

Solo sentí sus cálidos labios en los míos. Sentía que mil mariposas explotarían en todo mi cuerpo. Shawn tomo mis dos mejillas e hizo del beso más profundo, era tierno conmigo, novia sus labios lenta pero apasionadamente. Quería que este momento durará toda mi vida pero mis pulmones necesitan aire así que nos separamos.
Shawn solo sonrió aún con sus ojos cerrados, después mordió suavemente mi labio inferior. Yo deje un corto beso en sus labios y los dos seguidamente abrimos los ojos.
Solo, no podía dejo de enamorarme más de el. De su perfecta mandíbula, sus labios, sus mejillas, sus hermosos ojos. Era lo que siempre quise. A el.