Las palabras de Sarah giran como un trompo en mi cabeza cuando Erwin llama, estoy a punto de contestar, pero en el mismo momento me arrepiento.¿Quién diablos es Ally? ¿Por que no me lo ha dicho? Siento esa punzada en el pecho, esa que te desgarra desde adentro y quiere salir en forma de lágrimas, sé qué por un momento me he puesto celosa, pero lo que más me duele, es que sabiendo todas las mentiras por las que mi mundo estuvo envuelto, el me oculté cosas.
Sarah se ha quedado dormida, pero no luego de haberse tomado una pastilla para hacerlo, me duele saber que no pueda dormirse por sus propios medios, pero al verla tan relajada en su gran cama vuelvo a suspirar.
Grace se ha ido temprano, sus ojos eran dos enormes bolas rojas al marcharse, tenía bolsas negras debajo de estos y su pelo estaba todo enmarañado. Me dijo que vigilará a Sarah de que no haga alguna estupidez y se fue.
Me serví una taza de café luego de su despedida, y puse algo de música. Pensé en Erwin el resto de la mañana, me sorprendió que no haya vuelto luego de que lo llamara, y realmente me dolió que no lo hiciera, para como la situación se había puesto necesitaba que estuviera conmigo, necesitaba de su compañía, pero no iba a decirlo, no podía hacerlo, no después de que otra persona me haya contestado desde su celular.
Volví a la cama, y dormí por solo unos pocos minutos, me desperté cuando las gotas de lluvia comenzaban a caer y por más que lo intentara no lograba volver a conciliar el sueño.
Pase todo el domingo junto a mi hermana, intentando que coma y animándola, pero nada funciona se la pasa todo el día en la cama, mirando fotos y llorando.
Todo pierde el sentido, luego de la muerte de Bill decidimos no hacer ningún tipo de funeral, buscamos sus familiares pero parece que nadie existe, no tiene hermanos, no tiene padres ni tíos, según su identidad era huérfano y lo habían echado del trabajo una semana antes de morir. Comienzo a intentar encajar algunas piezas, pienso en que él buscaba dinero y por eso se ha unido a Tobin, pero aún todo sigue sin tener sentido, ya que si fuera que necesitase dinero podría haber pedido.
Intento hacer memoria a algún llamado extraño de su parte, pero aunque rebusque no encuentro nada.
Sarah no ha dejado de llorar por la noche y ha tenido que volver a tomar sus pastillas para dormir, comienzo a temer de que algo malo le pase.
La mañana del lunes me levanto temprano, decido ir a la clínica a ver el estado de Laila, mientras Sarah duerme, he estado tan pendiente de Bill que olvide todo lo demás.
Cuando entró en su sala ella sonríe de manera cansada, su cabellera color chocolate ya no existe, ni sus cejas ni sus pestañas, todo a desaparecido gracias a la quimio. Se encuentra postrada en una de esas camas de hospital, las sábanas blancas hacen juego con las paredes y su camisón verde hace juego con las cortinas, las cuales ahora se encuentran abiertas de tal forma que dejan que la habitación se ilumine.
— buenos días— le sonrio a la muchacha
—tú eres la culpable de todo esto— murmura con la voz seca haciéndome entender que su sentido del humor sigue ahí
—era eso o que murieras en los bancos de la sala de espera— digo encogiéndome de hombros de manera burlona, ella sonríe y ladea la cabeza mientras me siento junto a su cama en la silla vacía de color negro.
La limpieza en el lugar resulta ser abrumadora, el piso brilla y hay un intenso olor a coco que no deja de parecerme extraño
—¿has pedido ambientación?— le pregunto cuando intenta levantarse fallando al instante —no te fuerces — Laila frunce el ceño y suspira.
—le he dicho que detestaba el olor a hospital— susurra lentamente— y un enfermero que está bien bueno se dedicó a poner distintas fragancias todos los días para mi— ella sonríe de lado y me mira por el rabillo del ojo — he comenzado a pensar que le gustan las calvas— dice y suelto una carcajada
—pues te sienta muy bien, cuando salgas de aquí deberías optar por usar ese look siempre— sus ojos se cierran por completo cuando sonríe y los deja así por un momento mientras suspira para volver a hablar
—si, lo bueno de todo esto es que no tengo que depilarme— sus ojos continúan cerrados y tarda en pronunciar las palabras— pero me cansa demasiado — sus fracciones se relajan por un instante y luego vuelve a fruncir el ceño — todo me está doliendo, quiero caminar pero solo logró hacer dos pasos, luego las ganas de dormir me atacan, es como si nada tuviese un punto medio, me siento desecha, inservible. — explica con la voz entre cortada, haciendo parecer que va a llorar, pero no lo hace y no sé cómo reaccionar ante la situación
—tranquila, ahora debes descansar, nada de moverte o tu sexi enfermero se enojara— ella sonríe de lado, sus labios están mucho más secos de lo que en algún momento estuvieron, su piel está pálida, no tiene ninguna pizca de rubor en sus mejillas. No habla y notó su respiración relajada, sé que se ha quedado dormida y no pienso molestarla.
Me levanto acariciando su mano
—descansa Lai, volveré a verte— y con esa promesa me alejo de la habitación donde mi amiga y enfermera descansa.
Cerré la puerta de su cuarto lentamente y cuando salí choque contra algo, contra alguien que me miraba desde lo alto con el ceño fruncido, su cuerpo era firme, y lo reconocí de inmediato.
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Quería que fuera más largo pero no me da el tiempo. No quiero que se aburran esperando. Les dejo muchos besos 💕
¿Volverá a hablar Lis con Erwin?
¿Quién será la persona con la que Lis chocó?Besos yan

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Life And Concern
Fiksi RemajaLa continuación de 'Life Under Lies' Ya pasados los meses de la desaparición de Marshall y Tobin todo parece estar en paz Aunque... las visitas de Erwin cada vez son menores y el orgullo comienza a jugar en contra de la relación. las discusiones e...