2.

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Joana:

En cuanto desperté en la mañana en el departamento de Angie me dirigí directamente a la cocina a buscar algo para desayunar. Siempre que veníamos aquí nos quedábamos todas juntas en el cuarto de ella, se que ocho chicas en un cuarto es mucho, pero era lo mas divertido del mundo y siempre terminábamos durmiendo de formas extrañas.

En cuanto entre en la cocina me encontré con Brenda terminando el helado que sobró de la noche anterior.

—¿En serio ese va a ser tu desayuno?– Reí.

—Dejame en paz.– Respondió dejando el pote vacío a un lado.

Me serví algo de leche en un vaso y lo metí en el microondas para que se calentara un poco, me senté en la barra frente a Brenda y me tumbé sobre esta.

—Tengo mucho sueño.– Me quejé.

—Puedes seguir durmiendo sin problemas, todavía no se despertó nadie mas.– Habló Brenda.

—Es que ya en cualquier momento se despiertan y tenemos que ir a comprar todas las cosas que necesitamos para llevar a las cabañas mañana, y seguro vamos a estar horas porque Camila y Ximena van a querer elegir un montón de ropa y va a ser una tortura.– Dije mientras me dirigí a sacar mi vaso del microondas ya que se había escuchado el pitido que indicaba que ya estaba listo.

—En eso tienes razón, pero piensa en que vamos a pasar un verano lejos de LA, y que por fin haremos algo entretenido.

—Pero me da mucha flojera organizar.– Respondí dando un sorbo a mi vaso.

—Ya se, pero será divertido, ahora vamos a despertar a las chicas.– Dijo y me miro de forma en que ya sabia lo que significaba.

Abrimos las alacenas y sacamos unas ollas y tomamos unas cucharas de madera. Nos dirigimos corriendo al cuarto de Angie y cuando entramos comenzamos a golpear las ollas con las cucharas.

—¡Ya levántense flojas!— Grité.

—¡Tenemos mucho que hacer!– Gritó Brenda golpeando mas fuerte su olla.

Comencé a golpear la olla más fuerte hasta que vi una almohada volar hacia mi.

—¡Ya entendimos!– Gritó Isa.

—Siempre hacen lo mismo, las odio.– Habló algo adormilada Kati.

—Saben que nos aman.– Respondió Brenda.

—Bueno, ya levántense, tenemos que conseguir las cosas para mañana.– Dije y salí corriendo del cuarto–¡Pido el baño!– Grité y me metí corriendo en el.

Llegue a escuchar como todas gritaron un no al unisono y reí; la cosa es que Angie tenía un sólo baño y cuando todas nos quedábamos aquí, era algo caótico.

Tome una ducha rápida, ya que no me lave el cabello, y salí del baño. En cuanto abrí la puerta Regi y Cami se abalanzaron sobre mi tratando de entrar al baño, me corrí de allí lo mas rápido que pude intentando de que mi toalla no cayera al piso. Me dirigí hacia el cuarto de Angie a buscar en mi bolso algo de ropa que había traído para cambiarme y allí estaba ella.

—Por esas cosas es que me duche ayer antes de dormirme.– Dijo mientras terminaba de subir sus pantalones.

—Por algo eres de las mas inteligentes de nosotras.– Reí mientras comenzaba a vestirme–. ¿El resto esta desayunando verdad?

—Si, están todas en la cocina.– Respondió.

Terminé de colocar rápido mi remera y mientras sujetaba mi pelo en una coleta salí de allí.

Hey! Idiotas | CNCODonde viven las historias. Descúbrelo ahora