Dos idiotas enamorados.[FF Rubius]

Capítulo 5

Marta P.O.V

¿Que mierda? Me frotó los ojos, ¿me han iluminado la cara con algo o que? y ese ruido, dios que alguien lo pare, cuando porfin puedo ver con claridad me fijo en el salón, ¿eh? este no es mi salón, espera, si estoy en casa de Rubius, vale si, el me invitó a cenar. Me levanto del sofá y me lo encuentro sentado en una silla partiendo a trozos una pizza.

—Dios, que hambre.—me siento enfrente de el y se me queda mirando con una sonrisa de tonto.—¿Acaso tengo algo en la cara?—no para de mirarme, y sigue con esa sonrisa, me incomoda.—Como no pares de mirarme te llevarás una hostia hermoso.—

—Eres tan cariñosa.—eso lo a dicho con ironía, se nota, coge un trozo de pizza y empieza a comer, que hambre, voy a coger uno cuando me aparta la mano, lo intento otra vez y me la vuelve a apartar, me mira con una sonrisa de cabron.

—Oye, más te vale parar o te como ati majo.—empieza a reír y porfin me deja coger un trozo y porfin puedo saborear este delicioso...—¿¡JODER QUE LLEVA ESTO!?—pica, pica demasiado y el cabron de Ruben se ríe, agua necesito agua, asique cogo una garrafa y me la empiezo a beber, asta que queda por la mitad, alivió, se me a quitado el hambre, no vuelvo a comer algo que me preparé él.

—¿No te gusta el tabasco?—¿tabasco? dios mío, éste me quiere joder.

—Vete a la mierda majo.—salgo de la cocina, me voy para mi casa, mala suerte que vive enfrente mío, estoy por salir por la puerta pero me jala del brazo, me giro y lo miro con cara de asesina.

—No te vayas tetitas de azúcar.—pone una cara de cachorro y me abraza, vale ya, no soy orgullosa, y mis enfados se pasan muy rápido, soy una débil en esto.

—Vale, tienes suerte que no sea orgullosa señorito ojos verdes.—sonríe, sonríe como idiota y me lleva asta el salón, otra vez.

—Quiero ver una película, y luego fiesta de pijamas.—a puesto voz de chica y me parto, acepto, aunque la idea de dormir aquí me incomoda.—¿Que película quieres ver tetas de azúcar?—sigue con ese mote.

—Posesion Infernal.—el asiente.

—Eres una muyaya dura.—ahora con voz de cubano, me río más.

—Lo soy.—miento, en verdad esto me asusta mucho, cogo una manta grande, me acomodó en el sofá, el pone la película y se sienta a mi lado muy junto de mi, pasa un brazo por mis hombros y me abraza a el, bueno, menos miedo. Empieza el show, parecerá una estupidez, pero, no me esperaba el ruido ese del principio, un ruido de una puerta cerrarse fuerte, asique pegó un chillido pequeño y me abrazo mas a Ruben.

Rubius P.O.V

Se abraza mas ami, y yo no puedo evitar reírme, que mona.

—Asique la muyaya no es tan dura como parece.—me mira con cara de pocos amigos y vuelve a mirar a la película. Me asusto un par de veces pero lo disimulo, está película da miedo, no me lo esperaba y aparte de miedo asco, ¿enserio se esta cortando la lengua con un cuter? Dios que asco, puedo notar como Marta se retuerce, y yo me rio.—¿Te da asco?—

—No, si te parece, me encanta ver cómo se corta la lengua.—si, esta es la princesa de las ironías, dijo princesa porque ella es una princesa, ¿Eso lo eh dicho yo? Ruben controlarte.

Ya esta acabando la película, y tengo mucho sueño, son las 2:00 de la mañana, y Marta se ah quedado dormida, asique apagó la televisión y llevo a Marta a la cama.

—Mm..—se queja cuando la dejó encima de la cama y la tapó.

—Buenas noches tetitas de azúcar.—le doy un beso en la frente y cogo una manta con una almohada, voy al salón y me acuesto en el sofá, en breve me quedé dormido.