Capítulo 13

498 13 2
                                    

Capítulo 13:
Eran cerca de las 3:30 pm cuando el grupo de 24 jóvenes apestosos y hambrientos entró al hotel (yo incluida).
Después de nuestros partidos de práctica Josh y Fatima nos habían hecho correr y practicar nuestros tiros TODA la tarde.
A las 2:30 nos estábamos muriendo de hambre y nos revelamos.
Apenas tocamos el lobby, fuimos corriendo al restaurante a comer.
Agarré mi primera tanda de comida y me senté con Miles.
- Buen entrenamiento el de hoy ¿verdad?- me preguntó.
- Si. No recuerdo haberme cansado tanto desde que inicié la universidad.
- Lo mismo digo- dijo sonriendo-. Lo único que quiero es dormir toda la tarde para luego salir a cenar.
Empecé a asentir con la cabeza.
- Suena bien- dije-. ¿A dónde quieres ir? Puedo preguntarle a las chicas si saben de alguno bueno.
Miles no me respondió.
Se limitó a quedarse viéndome con una expresión de "¿enserio?" Y con una sonrisa maliciosa.
Al final, habló.
- Oh cariño, perdóname pero no tengo ninguna intención en salir contigo.
Me quedé sorprendida.
-¿Qué se supone qué significa eso?- pregunté indignada.
- Significa qué aunque soy gay no quiere decir que deseo que me arranquen las pelotas por cierto nadador rubio súper caliente.
Se me cayeron mis cubiertos encima del plato haciendo un sonido estruendoso haciéndome ganar todas las miradas en el restaurante.
¡MIERDA!
Me había olvidado por completo de esa estúpida competencia.
Nos quedamos en silencio durante un buen rato.
Decidí romper el silencio.
- Si... Acerca de eso, no voy a ir.
- Oh preciosa, por supuesto que lo harás.
- No.
- Sí.
- ¿Por qué estás tan seguro de que iré?.
- Por que personalmente te llevaré.
Lo fulminé con la mirada por un largo tiempo.
- No- dije finalmente-. De ninguna jodida manera. Iré lo prometo, pero no me llevarás.
- Lo siento cariño, pero no dejaré que hagas eso.
-¿Por qué? ¿Por qué quieres llevarme? ¿Por qué estás tan entercado en qué vaya a ver esa estúpida cosa?- pregunté ya exasperada.
- Porque puedo, porque sé qué eres capaz de ir con un pantalón de pijama y una camiseta ancha y porque, ¡Por Dios mujer! ES KENDALL SCHMIDT! Uno de los solteros más codiciados del país, quién te dio pase y ¡se ve a millas que está interesado en ti! Además de que nena, ¡está buenísimo!- dijo respondiendo a mis preguntas en orden.
- Bien ahora a mí me toca responder: 1- muérete. 2- ¿!Cómo rayos sabías lo de el pantalón de pijama!?. 3- ¡NO ME INTERESA QUIÉN SEA KENDALL SCHMIDT! Sólo le atraigo porque le parezco bonita y quiere un polvo, y Miles, ambos sabemos qué soy... Ya sabes, qué nunca e tenido novio serio y qué no quiero tenerlo por mi pasado.
-¿Eso es lo que te preocupa?- preguntó-. ¿Ser virgen?.
- ¡SHHHH!- dije-. ¡CÁLLATE! Ya bastante vergonzoso es tener qué vivir con eso. No me lo eches a la cara.
- Mira, ¿Qué te parece si terminamos de comer y seguimos con esto en tu habitación?- propuso.
Asentí.
Terminamos de comer en silencio y luego subimos a mi habitación.
Entramos y me tiré encima de mi cama.
- ¿Eso es lo que te preocupa?- volvió a preguntarme-. ¿Ser virgen?
Asentí lentamente.
-¿Por qué? Sí eres genial.
- Porque soy un asco Miles. Soy fea y lo sabes. Siempre me ha costado mantener mi cuerpo, tengo carácter, y para "aumentar mi autoestima" jamás he tiendo novio, por lo que sé de sobra qué no tengo lo que un chico busca, eso, sumándole que soy virgen, hace que me sienta insegura acerca de todo, y tengo miedo a enamorarme por lo de mis padres. No tiene nada que ver con Schmidt esto, es sólo que odio el tema. Por eso me paso horas en el gimnasio y en mis libros- expliqué tratando de no llorar.
Miles corrió hacia mi y me abrazó. Era mi hermano. Lo necesitaba.
Me secó las lagrimas y me miró a los ojos.
- Tn___ no importa si soy gay, sé identificar a alguien hermosa por dentro y por fuera, y tú eres una de las pocas personas así, así que por favor cree me cuando te digo esto. Si no has tenido novio y sigues virgen es porque no te lo permites. No permites creerte que eres hermosa, qué vales la pena, cuando claro que es así, solamente el mundo te está reservando para algo mucho mejor que la basura que está afuera- dijo-. Así que es mi misión hacerte sentir bien cuando e visto cuan fuerte eres. ¿Me dejarás?.
Lentamente asentí.
- ¿Qué planeas? Confío en ti.
El sonrió.
- Me alegro oír lo, por que no me importa sí vas a ir hoy a ver a Kendall, te pondré hermosa para demostrarle a él, a ti y a todo el mundo cuán hermosa eres.
Le sonreí y me sonrió de vuelta.
- Okay- accedí.
- Bien- dijo-. A trabajar.

Mas que unos juegos Kendall Schmidt y tuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora