Mi Destino Eras Tu

CAPÍTULO 28

Los ruidos despertadores me despertaron como cada día que he tenido desde la estancia de los Ouji en mi casa ya ni siquiera era necesario activar la alarma de mi cuarto ya que era imposible que todos esos ruidos pasaran desapercibidos por algún miembro en esta casa, estire mi mano en las cobijas de mi cama para encontrarla vacía, extrañada abrí mis ojos y nada, estaba sola, estaba completamente sola en mi cama y en mi cuarto acaso fue solo un sueño todo lo de anoche. Al bajar mi mirada comprobé mi desnudes asique era imposible que haya sido un sueño me incorpore un poco para sentarme y recargar mi cuerpo en la cabecera de mi cama, me dolía un poco cada parte de mi ser, sobre todo las piernas y bueno eso. Pero a donde había ido vegeta acaso en cuanto me dormí se fue a su cuarto, porque no se quedó conmigo no fue satisfactorio para el como lo fue para mí. porque si nunca había sentido algo como lo que sentí ayer con vegeta, toda esa energía, esa pasión y ese deseo despertado por unirme con él por estar con él fue algo que jamás había experimentado por nadie y por dios cuando estuvimos juntos la sensación fue maravillosa, esa delicia que era tenerlo dentro de mí, mientras que el aplicaba toda su fuerza para satisfacerme como esa descarga de electricidad recorrió todo mi cuerpo cuando los dos acabamos juntos, definitivamente estar con vegeta era increíble pero al parecer el no sintió lo mismo que yo ya que él no estaba aquí junto a mi como debería. Apreté mi puño en coraje y empecé a maldecirlo mentalmente con todos los insultos que se me pudieron ocurrir en ese momento hasta que mi puerta se abrió dejando entrar a vegeta recién bañado

Pensé que nunca te ibas a despertar.- entro cerrando la puerta consigo, ya estaba completamente vestido y solo tría una toalla en su cuello para evitar que su cabello mojara su ropa

Donde estabas.- le pregunte jalando más las cobijas para tapar mi desnudez

No es obvio.- pregunto sonriente acercándose a la cama.- fui a bañarme

Y tenías que hacerlo tan temprano.- le reproche no me gustó nada a ver despertado sin él eso me traía malos recuerdos

Bueno tu no tenías para cuando despertar.- se subió a mi cama y gateo hacia mi mientras que yo inconscientemente me pegue mas al respaldo de mi cama, el sonrió ante mi actitud mientras colocaba sus dos piernas alado de mi cuerpo y empezaba a besar mi cuello, para luego sonreír contra mi piel y subir hasta llegar a mi boca al principio quise rechazarlo por haberse ido pero una vez que sus labios tocaron mi piel mi cerebro pareció no responder y me deje llevar por mis deseos, lo tome de la cara mientras lo pegaba más a mí para profundizar el beso, suspiro contra mis labios y aproveche para intensificarlo, mi lengua busco la suya y jugo con ella disfrutando de su sabor, lambiendo, mordiendo y jalando, escuche su ronco gruñido que provoco que quisiera escuchar otro escuchar gruñir a vegeta era inexplicable ya que lo hacía de una manera tan irresistible que me provocaba querer sacarle más de sus ahogados gemidos. Unos toques a mi puerta nos alarmaron mientras nos quedábamos completamente quietos

Bulma hija.- pero tenía que ser la inoportuna de mi madre

Si.- a penas y pude hablar porque el aprovechado de vegeta empezó a devorar mi cuello

Ah querida solo quería saber si estabas despierta ya sabes que al joven y apuesto vegeta no le gusta llegar tarde.- vegeta dejo de besar mi cuello para verme de forma divertida mientras yo le sonreía

No creo que le importe mucho si me demoro.- le conteste a mi mama mientras empezaba acariciar su pecho

Bueno como tú digas bulmita….. oh ya se le prepare unos pastelillos para que este de buen humor y no se enoje contigo.- le escuche balbucear otras palabras pero ya no le preste atención a lo que decía, mire mi reloj y si no me apuraba no llegaría a la escuela con una apariencia detestable, aparte a vegeta como pude mientras que enrollaba una cobija a mi alrededor y trataba de pararme, pero cuando lo hice me dolieron mucho las piernas y me doble un poco, sentí el agarre de vegeta en mi cintura lo más seguro es que pensó que me caería