La peste asolaba de nuevo la ciudad de Firenze así que los seis vampiros, tres hombres y tres mujeres, se encerraron en el Castello di Sammezzano, propiedad de uno de ellos, el Duca Cosimo.
Al principio, siguiendo los consejos de Giovanni Bocaccio en El Decamerón, se dedicaron a hacer el amor en todas las variantes y combinaciones posibles.
—¿Y si nos entretenemos jugando a verdad o consecuencia? —propuso Cosimo, cuando el interés amatorio decayó, sintiéndose obligado a entretenerlos.
Todos estuvieron de acuerdo. Le tocó primero a Anetta.
—¿Qué piensas de nuestro anfitrión? —le preguntó Paolo.
—Más que pensar debo quejarme —dijo ella, haciendo una mueca—. Su aliento huele muy mal. Nuestra primera noche le bebió la sangre a un hombre de Cerdeña, justo cuando comía las larvas de mosca de su queso cazu marzu. ¡Tan mal sabía que ni la peste lo atacó! La segunda no encontró humanos y se conformó con decenas de ratas. ¡Horrendo!
Excepto el aludido todos estallaron en carcajadas.
—Es cierto —Coincidió Lucrezia.— También bebió la de cientos de sapos.
Cosimo cogió el hacha, que colgaba de la estufa. Luego, sin darles tiempo a reaccionar, les cercenó la cabeza a los cinco: ¡demasiada sinceridad agotaba!
Buscando un vídeo sobre el queso cazu marzu, para ponerlo aquí y que os hagáis una idea del porqué del rechazo de Anetta, encontré un artículo titulado Ocho platos típicos tan asquerosos que no podrás creer que la gente se coma. Os lo recomiendo, lo dejo en el vínculo externo y en comentarios.
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Obsesión vampírica. CUENTOS DE VAMPIROS.
VampireEl atardecer empieza a dar paso a la noche. Los colmillos se afilan antes de caer sobre las víctimas. Te doy la bienvenida a esta recopilación de cuentos sobre vampiros. La idea de hacer esta obra surgió gracias a los Retos del Verano de Wattvampi...