¡Micaela la había invitado a subir!
No a la enmascarada, si no a ella. A la Barbara de siempre.
Se ducho de prisa y, en menos de cinco minutos, se había puesto unos pantalones negros, una remera blanca y una camisa por encima de esta.
No le gustaba mostrar el cuerpo y odiaba que la miraran. En realidad, el único motivo por el que conseguía salir al escenario del club era porque llevaba la máscara que la convertía en un personaje anónimo. Era la única condición que había impuesto para aceptar el trabajo. Lo que no había imaginado entonces era que aquella máscara la convertiría en la bailarina más popular del club.
Hizo una mueca al pensar en ello.
Comenzó a subir la escalera, pero había avanzado dos escalones cuando se detuvo en seco.
¿Que mierda creía que estaba haciendo? Ahora no tenia ninguna máscara tras la que esconderse.
"Charla con ella un rato. No es tan difícil, puedes hacerlo"
Podía oírla cantar la canción que había hecho que empezara a enamorarse de ella. Closer.
Dios. ¿a quien quería engañar? No era lo bastante valiente ni aventurera para una mujer como ella.
Se dio media vuelta dispuesta a volver a su departamento.
"Cobarde"
Muy bien. Lo haría. Se dio media vuelta de nuevo y trató de no pensar en la debilidad que sentía en las rodillas.
Solo tuvo que llamar una vez antes de que la oji azul abriera la puerta. Barbara se sintió aliviada y decepcionada al mismo tiempo al ver que llevaba puesto un cómodo pijama, se trataba de una divertida remera de Bob esponja y unos cómodos pantalones.
Se veía realmente hermosa.
-¿Te parece bien este? Pregunto mostrandole una botella y sacandola de sus pensamientos.
-Sí. Podría haberle ofrecido agua de las cloacas y se la habría bebido igualmente
-Vamos a la sala, a sentarnos -Sugirió
"Mierda", pensó la oji marrón mientras la veía caminar.No podía apartar la mirada del movimiento seductor de sus caderas, de la curva que formaba su espalda al unirse con su trasero y del modo en que el cabello le caía libremente... Se derrumbó sobre el sofá tratando de respirar con normalidad.
Había estado en su casa otras veces, para ayudarla a subir la compra o para regalarle las plantas cuando ella estaba afuera, pero nunca había estado allí Cómo invitada. Micaela se acurrucó en el sofá junto a ella, enrollando las piernas de una manera increíblemente sexy. Sus ojos seguían todos y cada uno de sus movimientos ¿Tendría siquiera la menor idea de lo sexy que la encontraba?
Sonrió dulcemente y Barbara sintió que se le derretía el corazón.
-Bar -susurro al tiempo que se acercaba un poco mas a ella.
-Sí? -ahí estaba, el momento que había estado esperando.
Se humedeció los labios y la miro con gesto de reprobación, como si hubiera cometido alguna travesura.
-Sé lo que has hecho.
-¿Si?
-Me temo que te he descubierto -añadió ella.
- D-descubierto?Micaela había descubierto que ella era la enmascarada. La adrenalina se disparó dentro del cuerpo de Barbara. ¿Que iba a decirle? ¿Cómo podría justificar su engaño? ¿Porque lo había hecho? Ella jamás hacía cosas como ésa; la desesperación la había llevado a hacerlo y ahora era su perdición.
La observaba atentamente mientras ella intentaba reunir el valor necesario para confesarle todo.
La oji azul levantó una mano para retirarse un mechón de pelo de la cara. Que mano tan delicada, que piel tan perfecta. Las facciones de su rostro parecían casi frágiles. Deseaba con toda su fuerza que esa mano la acariciara, aunque era más probable que lo siguiente que hiciera con ella fuera darle una cachetada por haberle mentido.
-Mica yo puedo explicartelo.
Estaba tomando aire para prepararse cuando ella fue la que continuó hablando..
-Me he dado cuenta de porque decidiste mandarle al club en lugar de llamar a tu amiga y pedirle que viniera a la fiesta
-¿Sí? Barbara frunció el ceñoMicaela sonreía tímidamente.
-Claro que sí.
No parecía enfadada y eso hizo que la oji marrón se sintiera aliviada.
-Tratabas de buscarme pareja -dijo ella.
-¿Cómo?
-Eres un encanto.
-¿Porque soy un encanto? -no comprendía nada. ¿De que estaba hablando?
-Eso es lo que más me gusta de ti, Barbara. Eres una mujer amable e increíblemente considerada. Siempre piensas en los demás.Amable y considerada, de eso nada. Se había comportado de un modo malicioso y taimado y no se enorgullecía de ello.
-Eres muy amable por cuidar de mi vida amorosa.
-¿Tu vida amorosa? -ahora si que estaba completamente perdida.
-Sí -Dijo ella-. Es todo un detalle que me hayas mandado a que conociera a una mujer tan impresionante como tu amiga. ¿Cómo sabias que lo que más necesito en este momento de mi vida es una aventura? Su sonrisa aumentó al decir esto último-. ¿Te lo dijo Belen?"¿Qué?"
Barbara la miró boquiabierta. Observó su rostro y se fijo en lo largas que tenia las pestañas
Tenía la respiración algo acelerada y los ojos brillantes. Estaba preciosa, cautivadora. Y todo por una mujer que no era más que producto de su imaginación.
-No me digas que se te ocurrió a ti sola que podría haber química entre tu amiga y yo -se echó a reír de un modo que la hizo estremecer-. Vamos, belen tuvo que haberte contado algo.
-No entiendo nada.
-Tu amiga y yo... bueno, digamos que la química ha sido increíble -dijo abanicandose con la mano.
-¿Crees que yo pretendía emparejarlas? -¿Realmente no tenia idea de lo que sentía por ella?
-¿No es así? Parpadeó con sorpresa.
-¡Por supuesto que no! -golpeó la mesa con el puño.
Micaela se exaltó ante la reacción de esta.
-¿No?
-Por el amor de dios, Micaela - se quejo Barbara con una frustración que le nublaba la mente y le impedía pararse a pensar en lo que iba a decir. Las palabras salieron de su boca de repente-. ¿Por que iba a presentarte a otra si te quiero para mi?
HOLAAAAAAAAAAAAA TANTO TIEMPO ahre, perdon por no actualizar antes es que estuve ocupadisima y no tenia tiempo. En fin espero que les guste y el videillo que se encuentran al principio Lo hice yo que opinan ¿como quedo?
-nos leemos luego👽
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Enmascarada (Barbica)
FanfictionCuando Micaela entró en el club de lesbianas striptease sólo buscaba una aventura, un poco de diversión pero su actitud atrevida hizo que terminará en el escenario con una hermosa bailarina.. Y así fue como empezó la aventura.