Narra Alex:
Mire en el refrigerador... nada. Mire en la despensa... nada. Era increíble pensar que una persona viviera en esta casa y era mi casa. Parecía imposible pero no hubiera nada en la cocina y por primera vez en mi vida quería cocinar algo, no solo para mí sino para la mujer que aún dormía en mi cama. Me crucé de brazos mirando a mi alrededor y haciendo pucheros porque moría de hambre y estaba segura que Piper también querría comer algo al despertar.
-¿siempre tienes que verte tan sexy?- me giré para ver a Piper envuelta en una sabana
-es natural, no puedo evitarlo- una sonrisa escapó de mi rostro cuando vi sus ojos entrecerrarse
-¿que hora es?-
Vi el reloj en la pared -casi las 10-
-¿QUE?- Piper corrió hacia la habitación y yo la seguí -tengo que irme. Carol me matará- empezó a buscar su ropa pero era obvio que no encontraba lo más importante
-Alex-
-¿que?- dije lo más sería posible sabiendo a que nos llevaría todo esto
-¿como que "que"? Tú sabes...-
-saber que Pipes- me senté en la cama y me recosté en la pared
-tú tomaste mis bragas... dijiste que... eran tuyas ahora o que se yo-
-¿yo? No recuerdo haber hecho eso- subí un poco mis lentes mientras tomaba un libro que había en la mesita de al lado y empecé a leer reteniendo una sonrisa. Podía ver a Piper aún de pie en frente de la cama sin saber que hacer hasta que suspiro y empezó a caminar al baño.
Después de unos minutos salió usando su ropa y tratando de arreglar un poco su cabello
-¿no tomaste una ducha Piper?-
-¿debería?- se detuvo en frente mío mirándome como si algo malo hubiera hecho
Reí -bueno... no se. Hueles a sexo ¿sabes?- note el rubor en sus mejillas seguido de una medió sonrisa mientras miraba sus pies
-No te puedes ir- las palabras salieron de mi boca sin pensarlo. No fue una idea, fue una necesidad.
-oh claro que puedo- Piper empezó a caminar buscando sus zapatos y en seguida empezó a ponérselos. Me levante y le quite uno de sus manos.
-no no puedes-
-Alex, tengo que irme...- se levantó de la cama y trato de quitarme el zapato
-no no tienes que irte. Tienes que quedarte- en la medio pelea que hicimos por el zapato Piper se acercó demasiado a mi, recordándome que desde la madrugada no la había sentido, no la había tocado, no la había besado.
Solté el zapato y agarre a Piper por la cintura llevándola contra la pared -tú no te quieres ir Pipes-
-Al... tengo que ver a mis padres-
-Piper tú los odias...- rocé mis labios contra los suyos -odias el día de tu cumpleaños, odias todas las falsas cosas que te dan y no sé que más dijiste ayer así que debes quedarte- tome su labio inferior entre mis labios, no era un beso como tal, era solo el contacto
-Al...-
-quédate-
Me quedé en sus labios, disfrutando de lo que sentía por ella
-está bien- su voz casi como un susurro me robó la más sincera sonrisa que probablemente nunca tuve con nadie... solo con ella, claro.
-bien- en ese momento si empezamos a besarnos, la forma en la cual ella me besaba, me recordaba lo que había pasado hace unas pocas horas. Pero también me hacía ser consciente que algo estaba a punto de pasar y todo lo que yo quería... era caer profundo.
Piper se alejó de la pared y me empezó a guiar hacia el baño
-¿que haces?-
-vamos a tomar un baño porque hueles a sexo- su voz casi una imitación de la mía obviamente no estando ni cerca de parecerse lo cual nos hizo reír
-tú sabes que el sexo en la ducha es para los adolescentes y que realmente nadie lo disfruta-
-yo lo hago... además ¿quién dijo que tendríamos sexo? Yo solo quiero tomar una ducha... contigo- sonrió y enseguida se empezó a quitar la ropa. Me quedé mirándola mientras lo hacía, obvio tomaría una ducha con ella.
-¿que pasa Vause? ¿Le tienes miedo al agua?- escuche un poco de reto en su voz mientras abría la ducha y su cuerpo empezaba a humedecerse. Diablos no lo resistí más.
Me metí a la ducha con ella -¿y ahora que?- la verdad no había notado lo íntimo que era tomar una ducha con alguien, además que nunca lo había hecho. No es lo mismo estar sin ropa para tener sexo, que estar sin ropa solo porque tienes la suficiente confianza con alguien como para solo estar ahí, haciendo nada y solo sabiendo que esa persona te acepta tal y como eres.
Piper se giro y me sonrió antes de darme un beso -ahora solo te bañas mientras veo lo sexy que eres-
Y esa fue la primera vez en la vida que me corrió un escalofrío de incomodidad por todo el cuerpo
-Piper esto no es sexy- reí juntándola más a mi cuerpo y metiéndonos debajo del agua. Abrí más el agua fría y en seguida sentí a Piper intentado alejarse
-¡ALEX!-
-no te voy a soltar tú querías tomar una ducha conmigo y eso vamos a hacer... yo me baño con agua fría-
-estás...loca. Apaga eso- su voz se entrecortaba a medida que su cuerpo temblaba junto al mío
Reí y volví a abrir el agua caliente -ya está bien...¿mejor así?-
Piper puso sus manos al rededor de mi cuello -si- y recuperó su aliento tal vez robándome el mío porque el beso que me dio después de ese 'si' fue caliente, fue sexy, fue todo lo que necesitábamos para ponernos más en confianza.
Apenas podía respirar con todo el vapor que nos rodeaba pero estaba tan concentrada en Piper que lo demás no importaba.
-¿entonces tú si disfrutas el sexo en la ducha?- dije contra sus labios mientras deslizaba mi mano por su abdomen hasta llegar a su entrepierna
-claro- sonrió y la verdad no me pude resistir el tocarla. El ambiente en si ya estaba súper caliente pero yo quería ver a Piper más caliente. No probé nada ni di más larga al asunto. Metí dos dedos en ella y en seguida sentí su cuerpo perdiendo fuerza, moviendo mis dedos mientras Piper gemía, yo la observaba. Sus ojos estabas cerrados, sus mejillas totalmente rojas y ella mordía sus labios cuando intentaba calmarse y no gemir.
Con la otra mano empecé a abrir de a pocos el agua fría, cuando Piper lo empezó a notar yo me lancé a sus labios y la besé. Y fue un beso salvaje, yo mordía sus labios y su lengua con desesperación mientras ella se dejaba llevar más cerca al borde del orgasmo. En un momento nos quedamos mirándonos y no fue un intento por demostrar amor o lo que fuera. Era solo deseo, Piper literalmente me estaba retando, sus ojos estaban dilatados y casi me hablaban 'a este ritmo no me vendré nunca' así que la tome por la cintura y la empuje contra la pared. Hice que sus piernas rodearan mi cintura y cuando Piper ya estaba en esa posición empecé a meter y mover mis dedos mucho más rápido, en el ritmo en que todo tu cuerpo duele por el movimiento.
-Vause...- ni siquiera pudo formar más palabras y en todo el baño y en toda la casa se escuchó el eco de sus gemidos.
Cuando al fin su cuerpo se recuperó lo suficiente como para estar de pie una vez más, volví a hablar
-muero de hambre Piper-
-si, hay que salir y comer algo-
Terminamos de ducharnos, evitando tocarnos mucho porque sabíamos en que íbamos a terminar de nuevo y de verdad necesitábamos comer o por lo menos yo.
Salimos a un lugar cualquiera por algo de comida y de repente todo parecía normal. De verdad la vida podía ser así de fácil o por lo menos aparentar serlo. Cuando vi a Piper mientras me contaba algo que le había pasado alguna vez en un sitio como este, me di cuenta... ella no era un escape de la realidad. Ella era real, como eran reales mis problemas. Pero solo dependía de mi que tanta realidad le iba a dar a una u otra parte de mi vida. La respuesta estaba frente a mi sonriendo mientras no quitaba sus ojos azules de encima mío.