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Estaba empeorando por alguna razón, últimamente estaba solo todo el tiempo, su familia no le había vuelto a llamar para nada, ni siquiera para saber si había muerto o algo, y era lo que más odiaba, estar solo lo hacia pensar, lo hacia recordar, lo hacia querer dejar de sentir ese vacío dentro que antes llenaba con su apreciado veneno.

Pero tenía que controlarse, sabía que podía, aunque ahora el problema no era ese, el problema era que no quería, no quería contenerse más.

—Tyler...

El castaño escuchó una voz lejana, pero siguió torturándose mentalmente.

—¡Tyler!

Rápidamente miró hacia la voz, su mente saliendo del transe que lo torturaba día a día, frente a el estaba Ryan, ni siquiera recordaba que estaba en la terapia de grupo.

—Perdón—Tyler negó con la cabeza, incorporandose ante la mirada de todos—Tengo que irme.

—Tyler, ¿te encuentras bien?—dijo Brendon impidiendo que saliera.

—Yo...—Tyler apretó los labios—Si, recordé que tengo algo que hacer.

Josh miró a Tyler, bajando un momento su vista a sus manos, estaban cerradas en puño y no dejaban de moverse.

—No creo que sea buena idea dejar que te vayas—dijo Brendon, notando la actitud ansiosa de Tyler.

—Brendon, estoy bien—dijo Tyler forzando una sonrisa.

—Tyler, sólo faltan unos minutos para que la terapia termine, por favor, quédate—Brendon puso sus manos sobre los hombros de Tyler queriendo calmarlo—Tu puedes resistir.

El castaño casi jadeo con dolor y asintió rápido, regresando a su lugar.
Tyler comenzó a morder sus uñas, no estaba escuchando a Brendon, todos a su alrededor eran irrelevantes, sólo podía escuchar en su cabeza el fuerte latido de su corazón, miró hacia todos lados, sus ojos deteniéndose en Josh.

El pelirrojo le sonrió de lado, y Tyler rápidamente apartó la vista.

—Creo que es mejor que terminemos esta sesión por ahora—dijo Brendon, después de algunos minutos, sintiendo el pesado ambiente—Nos vemos en tres días.

Todos salieron y al bajar por las escaleras, Tyler sabía que Josh iba detrás de él. Al llegar a la banqueta, comenzó a caminar rápidamente, pero los pasos detrás suyo eran cada vez más cercanos.

—Deja de seguirme—dijo Tyler apretando los dientes y deteniéndose.

Josh rió a las espaldas de Tyler y llegó a su lado, pasando sus dedos por el hombro de Tyler, bajando por su brazo pero el castaño golpeó su mano para que no lo tocara.

—Estas tensó, eh—Josh murmuró al oído de Tyler.

—Teniéndote frente a mi es imposible no estarlo—dijo fastidiado comenzando a ir a casa.

—Puedo ayudarte—Josh volvió a murmurar.

—¿Por qué crees que necesito tu ayuda?—se detuvo de nuevo.

Josh soltó una risita y suspiro.

—Sólo necesitas escucharme, Tyler —Josh bajó su mirada volviendo a subir a su rostro—O si quieres puedo escucharte yo a ti.

—Y yo...

Josh chisto provocando que Tyler callara.

STRUNK    {JOSHLER}  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora