El Nerd?

capítulo 8

~Alexander willer~

Abrí la puerta lentamente, supuse que mi mamá y mi hermanito estaban dormidos.
Pero no fue así, se encontraban en la sala viendo una película, supe que era mi muerte, nunca había llegado tarde.

Mis pasos se adentraron poco a poco, las puntillas de mis zapatos afortunadamente no hacían nada de ruido.
Al pasar por enfrente alcancé a divisar  que estaban profundamente dormidos.
Seguí a paso forzado sin hacer ningún ruido, al Pisar el primer escalón para ir a mí habitación.

- Alexander? - escucho a mi madre preguntarse e repetir varias veces.
- si! Hola mamá - regrese la abrace y le di un beso en la mejilla.
- Tú cena está en la estufa cariño; ve a cenar para que tomes una ducha - me acaricia la mejilla como siempre y me mira fijamente.
- Debes de estar cansado.
- Mañana hablamos sobre esto. Alexander!dijo en un tono más serio.
- Gracias mamá, eres grandiosa, buenas noches - digo dirigiéndose a la cosina.

No quería desperdiciar lo que había preparado mi madre. Al probarla, a mi mente llegó que el día fue un día muy lluvioso, y recordé aque no había pasado ni dejado nada al pobre hombre indigente. Me empeze a preocupar siempre le dejo algunas monedas o algún aperitivo para que tenga algo en el estómago.

se me ocurrido una muy buena idea que podría hacer aún más genial lo que quedaba de día.

- Hoy no será la excepción- susurré.

Prepare algunos sandwich, tome algunos paquetes de galletas y un jugo que estaba en el refrigerador, subí a mi habitación y tome una vieja cobija que tenía en mi armario y salí corriendo por jaio.

Salí a toda marcha!

Prosegui con mi misión de esa noche y pare hasta llegar al viejo callejón cerca de mi casa.

Al pasar por dónde siempre se encontraba el viejo, divisé que no había absolutamente nadie, seguí en jaio un poco más despacio, buscando al pobre viejo, pero en absoluto, no había nadie.
Seguí hasta que me encontré con varios chicos, me fui acercando, con un poco de miedo, Pregunte..

-¿No vieron a un señor que siempre está sentado en aquella parte?- señale

No pasó ni un minuto cuando me encontraba rodeado, de más chicos.

No dijeron nada, sentí leves empujones, y arrebatos sobre jaio.
Intenté defenderme pero fue inútil, eran demaciados.
Un puñetazo en la cara hizo que me quedara inconsciente.
...........

- diablos! - digo resoplando y llevándome las manos hacia la cara, No supe lo que había sucedido después y talvez me encontraba tirado aun en media calle..

Abrí un ojo y por sorpresa ahí estaba el viejo, sentado sobre la banqueta.

- No deberías andar solo por estos rumbos y aún menos a estas horas, es muy peligroso- dijo en tono de burla.
- ¿estás bien hijo?- pregunto en voz dulce, y regalando una sonrisa.
-toma algo de jugo, lo encontré entre tus cosas- dice señalando.

Reaccioné de inmediato, abro por completo mis ojos y doy un ligero sentón, volteando a ver si estaban completas mis cosas.

-gracias a Dios están bien- sonreí de oreja a oreja, me pare, fui por la comida, la cobija y me acomode a su lado.
- Es para ti- dije sonriendo aún.
- No debiste...-dice entre dientes, estrechandome el brazo en forma de saludo.
-muchas gracias- sonrió.

Inicio a comer y de la manera más humilde. - ¿Quieres? - me pregunto
- gracias, provecho - respondí

-¿Qué día es hoy?- pregunto.
- jueves 17
- de marzo - añadió, agachando la mirada hacia el suelo y su cara parecía entristecerse.