Capitulo 6 - Cuerda Floja

118 49 35
                                    

Comienzos del instituto, cuarto año

Mis ganas de empezar las clases eran increíbles, les juro que nunca me paso algo asi. Necesitaba de sus ojos marrones, su sonrisa, sus abrazos, sus bromas. Lo extrañe tanto. Pienso ahora en ese momento y se me cierra el pecho.

Entraron nuevos compañeros en mi clase, pero nadie importante para mi, ya que mi cabeza estaba en el. 

Y como les conté anteriormente, estábamos en época de fiestas de dieciseis, pero hubo una en especial que me cambio completamente.

¿Recuerdan a Stephan? Dejamos de hablar cuando terminó el verano, pero a mitad de año comenzamos a hablar de nuevo. Y me gustó ¿saben? Me hacía sentir bien, sentía que le importaba a alguien. 

Necesitaba contarles eso antes de hablar de esa especial fiesta de dieciséis de una amiga. 

Allí estábamos todos en la pista de baile, disfrutando de una de nuestras últimas fiestas que tendríamos en el año, asi que imagínense que yo estaba saltando como una loca... literalmente.
En un momento siento que me toman de la mano. Era Andrew, que venía a molestarme, pero siempre con amor pues así era nuestra relación. 

-Veamos Tiff ¿que tienes por aquí?

-Andrew Johnson te obligo a que me devuelvas mi celular en este mismo instante

-Ohhh, con que el pequeño Stephan esta despierto a estas horas de la noche ¿eh?

Gracias por gritarlo. Muchas gracias. De verdad. Estoy tan agradecida. ¿Que no ves mi gran sonrisa de felicidad? 
(¿Notaron el sarcasmo,no?)

Claro que James escuchó eso. Claro que tomó mí celular. Claro que leyó absolutamente toda mí conversación con Stephan. 
Y de verdad traté de impedirlo, lo juro. Pero no pude por un simple detalle, Andrew me tomó por sorpresa y me llevó a bailar a la pista. Explote de la risa, no se imaginan lo graciosa que fue esa escena.
Solo cinco cortos minutos en los que me olvidé de todo y la pasé increíble con quién en ese momento, era mi mejor amigo.

Alcancé a ver de nuevo a James y fui corriendo a quitarle mi celular.
No puede ser, no puede ser, no puede ser. Esas tres palabras eran lo único que se cruzaban por mí mente. 

-No quiero que hables con MI Tiffany

Una mezcla de emoción y vergüenza se mezclaron en mí.  No sabía como reaccionar, así que me quedé mirando ese mensaje como por diez minutos. Parada en el medio de la pista. Todos bailando. Y yo sola. Sí, lo sé, fue muy extraño.

¿Como pasó? No lo sé, pero de un momento a otro mi celular ya no estaba en mis manos, y estaba bailando con James.

Estaba bailando con James.

Tiffany y James. Bailando. Su brazo en mi cintura. Su cara muy cerca de la mia. Me sonreía. Me miraba con sus ojos marrones. Estaba totalmente hipnotizada. 
Mariposas. Mas que mariposas era una estampida de elefantes dentro de mi, se los aseguro.

Realmente nose cuanto tiempo estuvimos así, pero para mi fue una eternidad.
La mejor eternidad de toda mi vida.

Cuando la musica terminó nos fuimos a sentar todos a una mesa, pero no había lugar, así que me dirigí hacia otra mesa. Sentí que alguien me tomó de la mano, y me hizo volver a donde estaba.

-Ven, siéntate aquí Tiff-Dijo James, y señalo sus piernas.

Y lo hice. Me senté sobre el y comenzamos a hablar animadamente con todo mi grupo de amigos.
Su mano se encontraba acariciando suavemente mi espalda. Era una sensación tan linda, que cada vez que la recuerdo se me eriza la piel. 

Llegó el momento de irnos y salude con un beso en la mejilla a todos mis compañeros. Cuando llego el turno de mi chico de ojos marrones, me tomó de la cintura y fue él quién me dió un beso...en la mejilla.
Lamento haberlos ilusionado,no fue el típico beso de película. Fue un simple beso en la mejilla pero que me descolocó completamente, ya que después se quedo mirándome unos segundos a los ojos. 

Esto mismo pasó en la siguiente fiesta, solo que tuvimos un tiempo a solas para hablar. Seguro que no fue sobre nada importante, aunque no lo recuerdo muy bien ya que estaba totalmente perdida en sus ojos, como siempre.

Creo, y no debo ser la única, en que hay una delgada línea entre el amor y la amistad.
Muchas veces me pregunto si vale la pena tratar de cruzar esta línea, que se parece a una cuerda floja. Ya que por su puesto que sería mucho mas fácil quedarnos de brazos cruzados, y no intentar cruzar. Es inestable, insegura y dar mucho miedo.
Pero, como dice António Santa Ana, "Si la cuerda no fuera delgada, no tendría gracia caminar por ella"

*Nota de Autora*
Estoy súper feliz de volver a escribir. Sus mensajes contándome que se sienten identificados con la historia es hermoso, lo juro!
Díganme qué opinan sobre una maratón en los comentarios.
Besitos de amor y gracias por seguir apoyándome❤️
Por cierto ¿que opinan de esta hermosa portada? ¡A mí me fascinó!
¡Gracias CrazyTeenAwards! Un trabajo súper rápido y bonito.

Solo Soy TiffanyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora