Y de esa forma continuó el año, sin James a mi lado.
Quizás me regalaba una sonrisa, a veces un pequeño abrazo, pero me dolía que lo que más tenía era su indiferencia. Tampoco lo lograba comprender, era un chico muy difícil de descifrar. ¿Porque lo digo?
Un día como cualquier otro, me encontraba en el colegio, sentada en mi banco mientras veíamos una película para nada interesante.
-Oye Tiff, déjame pasar - Me pidió James, señalando la silla desocupada que se encontraba a mí lado.
-Eh... sí, claro - Respondí, un poco confundida.
Nos encontrábamos en el ante último banco del lado de la pared, así que no teníamos a muchos compañeros cerca. James se quedó hablando con dos amigos que estaban detrás nuestro. Como no tenía mucho que hacer apoyé mis brazos en el banco y cerré los ojos, dándole la espalda a él.
Estaba a punto de quedarme dormida cuando siento una mano en mi cintura, y luego su cabeza sobre mi espalda. No dijo nada, yo tampoco. Entonces supuse que el pensó que estaba dormida.
Su mano comenzó a moverse suavemente, en forma de círculos. Sus caricias se hacían mas constantes a medida que paso el tiempo, y allí estaba yo, sin poder moverme ni reaccionar. Estuvimos así durante toda la película, y en cuanto terminó y las luces se prendieron, pude sentir como se separaba de mi rápidamente.
Fingí despertarme y lo miré. Extendió sus brazos y me atrajo hacia él para darme un abrazo. No entendía nada, no sabía como reaccionar. Luego se levanto y salió del aula junto a sus compañeros.
Y allí seguía yo, inmóvil, desconcertada por lo que acababa de pasar.Ese momento lo atesoro en mi corazón, ya que fue uno de los momentos mas especiales que viví con él. Después de ese día las cosas volvieron a estar un poco mejor, pero necesitaba sentir sus caricias otra vez. Y por suerte eso se cumplio.
Una piyamada junto a mis amigos, y el queriendo que duerma a su lado. Este chico me estaba volviendo loca. Mi cabeza no sabía que pensar, mi corazón no sabía que sentir.
Terminé durmiendo frente a él, con mi cabeza frente a la suya, y nuestras manos que se chocaban en las almohadas. Y fue en un momento, antes de caer en mis sueños, que sentí su mano sobre la mía, haciéndome caricias de una forma muy delicada. Mi corazón se acelero y tarde en normalizar la respiración.
Fue de esa forma tan linda que caí en un profundo sueño.Aprendan a valorar pequeños momentos que la vida les regala. Aveces pueden parecer insignificantes, pero con el tiempo pueden reconocer. Yo creo que la vida me regaló estos momentos con James, que fueron los últimos ya que el año se estaba terminando. Aprendí a valorarlos, los guardé en mi corazón. No se cuando volverán a suceder, pero estoy dispuesta a esperar con tal de volverme a sentir así. Mientras tanto, lo considero como una despedida.
ESTÁS LEYENDO
Solo Soy Tiffany
Teen FictionHola, soy Tiffany. Desde ya aclaremos que esta no es una típica historia de amor. Una relación. Amor correspondido. Frases clichés. Citas románticos. ¿Que es eso? La respuesta es simple. No lo se. Pero si quiero descubrirlo. Después de t...