Hace unas tres horas que se había entregado a los mortífagos, con la apariencia de Harry Potter fue tan divertido la cara que había puesto Lucius Malfoy cuando el menor apareció en las puertas de su mansión, en cuanto llegó lo mandaron a un tipo de celda, 'La espera es aburrida' pensaba con un puchero en su boca, para distraerse comenzó a pensar en las formas en que torturaria a la cabra senil de Dumbledore cuando llegará el momento, agujas tal vez, sabía una manera de torturar con unas simples agujas, aceite hirviendo tal vez, desollamiento le gustaba la idea, vio una pequeña rata pasar junto a él, ratas hambrientas, en algún momento había escuchado de ratas hambrientas metidas en ciertas partes del cuerpo, nada más de imaginar a la cabra sufriendo hacia que la felicidad llegara a él, escucho como las cerraduras de su celda eran abiertas, para después ser jalado de forma brusca, luego de caminar por los largas pasillos de la mansión por fin llego a una enorme habitación, la cual se encontraba llena de mortífagos, en el centro de ellos lo que parecía ser un trono y sobre el Voldemort
- ¡Vean amigos míos! - se levantó de sus asiento - ¡El Salvador del mundo mágico, mi vencedor!, - se burló - aquí temeroso de mi, tiene miedo de que lo mate - 'Dramático' pensaba el menor manteniendo su actuación de chico asustado - ¡Crucio! - apuntó con su varita, el peli negro gritó claro que no era un grito de verdadero dolor al menos para el, mucho más doloroso habían sido la creación de los horrocrux, y por supuesto los más de 50 siendo un tipo de ente, sin poderlo evitar dio una pequeña sonrisa, que pasó inadvertida para todos menos para Voldemort - ¿Te ríes Potter? - siseo molesto
- N-no - respondió con "trabajo" encogido en sí mismo, cinco cruciatus más y el mayor seguía riendo junto a sus mortífagos, '¿Porqué tienes tanta inclinación por el drama Tom? Ya me estoy aburriendo' pensaba haciendo un puchero que de nueva cuenta fue imperceptible para todos menos para Tom
- ¿Quién eres? - preguntó Voldemort observando detenidamente al peli negro 'Bien Tom, ya notaste algo'
- H-harry P-pot-ter - contestó el menor
- Te lo advierto no me mientas - dijo molestó, apuntando con su varita
- Y-yo... - se encogió más en sí mismo
- ¡Crucio! - lanzó la maldición y otro grito de hizo presente - ¿Y bien seguirás mintiendo? - interrogó con una sonrisa
- Bueno...- suspiro - ya no tiene caso- se levantó del suelo - que siga fingiendo - sonrío - te has vuelto lento Tom, tal vez sea la edad -
- ¿Acaso te has vuelto loco Potter? - preguntó enojado Malfoy, por la falta de respeto del niño a su señor
- ¡Parece que a bebé Potty le hizo daño un pequeño cruciatus! - exclamó con burla Bellatrix
- Silencio - ordenó el Lord - ¿Quién eres? -
-Tom, Tommo, Tommy - negó con la cabeza
- Deja de llamarme con ese estúpido nombre muggle - hablo furioso
- Pero si antes me dejabas llamarte así - dijo con aparente inocencia, al mismo tiempo que su apariencia cambiaba ante la atónita mirada de los presentes, su cabello crecía hasta por debajo de sus caderas atado en una cola de caballo dejando dos mechones a cada lado de su rostro, sus facciones se hicieron más delicadas, creció unos cuantos centímetros, su piel se volvió más pálida, la horrible ropa holgada desapareció para dar paso a unos pantalones pegados al cuerpo de color negro, una camisa verde pálido de mangas largas y una gabardina negra. Dónde antes había estado un chico flacucho de casi 15 años ahora se hallaba un hermoso joven de unos aparentes 18 de complexión delgada, escucho un jadeo a su derecha, a donde dirigió su mirada para encontrarse con un hombre mayor, de ojos café oscuro y cabello negro cubierto de canas.
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Herencia
FanfictionEn las vacaciones antes de su cuarto año Harry recibe un paquete junto a una carta, de alguien verdaderamente inesperado... Desconcertado y adolorido por la mas reciente golpiza se dirigio a la ventana para abrirla y dejar entrar a la pequeña lechuz...