Capítulo 17.

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-Tengo el culo mojado.-Dije intentando no apoyarme demasiado en el asiento.

-Habértelo secado.-Dijo él girando el volante.

-¡Me has dado cinco minutos para vestirme!-Dije indignada.

-Habérlos usado mejor.-Dijo riendo. Estiró la mano para encender la radio y subió el volumen.

"What doesn't kill you makes you stronger"  sonaba cuando lo puso.

-Bonita frase.-Dijo sonriente.

-¿Cuál?

-Lo que no te mata te hace más fuerte.-Dijo y me miró.-Te la cantaría, pero no quiero que me llueva.

-A mi no me gusta.-Dije después de que se me pasara la risa por la última parte de la frase.-No todo lo que no te mata te hace fuerte. Hay veces que te mata sólo por dentro. Estás viva, pero interiormente tu alma ha desaparecido.

-Tu manera de ver las cosas es muy triste, Ana.-Dijo serio.

-Pasa tres meses en el hospital y...

-Tírate un año en la cárcel.-Dijo serio.

-Lo...lo siento.-Dije. Sabía que le había hecho daño.

-Da igual. ¿Te gustan las tortitas?-Dijo cambiándome de tema. Es algo que amaba de Luke. Los cambios de tema repentinos.

-Soy anorexica.-Dije riendo.

-Y a este paso vas a hacerme creer que también eres tonta. ¿Cómo no le pueden gustar las tortitas Ana Beccet?¡Eso es una aberración!-La risa pudo conmigo, haciéndo que me fuera hasta imposible respirar.-Lo digo enserio. Mañana desayunamos tortitas.-Dijo y volvió a centrar la vista en la carretera.

                            *

                            *

Poco después aparcamos enfrente de un edificio negro, con ventanales de espejo y una gran puerta a un lado.

-¿Qué hacemos aquí?

-Clases de teatro.-Dijo sonriendo y bajó del coche.

-¿¡Qué!?-Dije abriendo los ojos.-Estás de coña, si.

-No. Van a darte una clase de teatro.-Dijo seguro de sus palabras.

-Estás chalado.-Dije pegando un portazo al cerrar la puerta del copiloto.

-Las mejores personas lo están.-Dijo encogiéndose de hombros.

-Y también eres un creído.-Dije riendo.-¿De verdad me vas a hacer entrar?

-Sí. Te va a ayudar mucho, Ana.

-Pero..

-Te da vergüenza, lo sé. Solo vamos a estar tu, yo, Isaac Grant y 4 alumnos más.

-¿Isaac Grant?

-El profesor bajito, delgado y gay que te dará clase. Está ahí escrito.-Dijo señalándo el cartel que había en la puerta con el título de "Escuela de arte dramático de Isaac Grant".

-Tiene lógica.-Dije riendo.

-¿Entramos?-Dijo yendo hacia la puerta.

-No.-Dije.-Sé que tengo que aprender a divertirme y todo eso, pero me da vergüenza y no me parece que..

-Pasamos al plan B.-Dijo interrumpiéndome y, sin esperarmelo, me cogió en brazos y me llevó dentro de aquel edificio. Me limité a rebullirme y a suspirar.

Frágil.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora