La vida de Josh Miller , hijo único del Exitoso Empresario Millonario de la ciudad Alfred Miller, cambiaría en el momento que conoce a Ally Johnson, una chica cristiana, con los sentimientos más puros y sinceros, hija de la secretaria de su padre...
Han pasado mas de 24 horas y aun no hemos recibido noticias de Josh, nos encontramos todos reunidos en su casa brindándole apoyo a mi suegro el Sr. Alfred, para mi sorpresa el parece estar muy calmado, confía plenamente en que su hijo se encuentra en perfectas condiciones, la fe que muestra me ha dejado sin palabras, yo baje la guardia, tuve un momento de debilidad y mi suegro se ha mantenido sereno, confiado y calmando los nervios de los demás presentes.
Observo en silencio con admiración al Sr. Alfred, como Dios ha cambiado tantas cosas en el, como siempre mostrándome que su poder sobre pasa cualquier cosa que yo haya podido imaginar, la bondad de Dios y su infinito amor no tienen comparación con absolutamente nada, el sabe como actuar y en que tiempo hacerlo.
Es fácil bajar la guardia cuando vienen las malas circunstancias o las pruebas, es fácil enojarse con Dios cuando no entendemos sus propósitos y es fácil culpar lo cuando algo no ha salido como deseamos, pero no es fácil reconocer que aun cuando le fallamos a el, esta allí para nosotros, el es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, para darnos y mostrarnos amor aun cuando no lo merecemos, ser agradecidos en todo momento, siempre es mas fácil el quejarse, que reconocer que Dios nunca falla.
Vuelvo a la realidad cuando visualizo a Josh entrando por la puerta de su casa, su aspecto era terrible, su ropa esta sucia y arrugada, su rostro mostraban rastros de no haber dormido bien, pero salvo todo aquello estaba vivo, estaba sano y salvo, y estaba volviendo a nosotros, mis ojos se volvieron borrosos a causas de las lagrimas de felicidad que comencé a derramar y en un susurro dije..- Gracias señor, por hacer que vuelva a casa.
-JOSH!!! ..-El sr. Alfred grito con emoción acercándose a su hijo y abrazarlo con cariño..- Hijo, gracias a Dios estas en casa..- Se separo de el y coloco ambas manos en sus mejillas..- Gracias señor por proteger a mi hijo..-Lo envolvió en otro tierno abrazo.
Mi madre llevo una de sus manos a su pecho y la otra a sus labios, sollozaba de felicidad, los chicos se fueron acercando poco a poco a Josh para darle un abrazo, palabras de aliento y felicidad ante su llegada, sus ojos se toparon con los mios pero yo aun no podia moverme estaba tan feliz y agradecida con Dios por protegerle de todo mal.
Josh camino hacia mi y se coloco de rodillas para estar a mi nivel y sin mas me abrazo, cerré los ojos y le correspondí el abrazo dejando que las lagrimas siguieran su curso, estaba feliz de poder ver nuevamente su rostro..- Oh Josh! Gracias a Dios estas aquí con nosotros.
-Shhh, no llores mi amor..-Pidió con cariño.- Aquí estoy!.-Se separo de mi y tomo mis mejillas con sus manos.
-¿Pero que paso? ¿Como es que...? ¿Estas bien? Quiero decir tienes hambre?..-Comencé a preguntar con desesperación.
-SShh, ya Ally aquí estoy..-susurro Josh.- Es una historia muy larga, que obviamente les contare..-Aviso con una sonrisa ladeada.- Solo diré que Dios nunca falla.
Y tras decir esas palabras Josh nos relatos cada uno de los hechos de la experiencia que vivió, sin borrar la sonrisa de su rostro, ya que para el seria otro medio para hablarle a los jóvenes de Cristo.
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Holissssssss!! Que nervios pero ven a josh no le paso nada, en el próximo cap sera desde el punto de vista de Josh y su experiencia en el avión.
