Capítulo 18 : Recuerdos del pasado

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Me quede congelada, como si no existiera otra salida, no podia creer lo que acaba de hacer y mucho menos lo que acaba de escuchar. ¿Jack, enamorado de mi?.

Levanté la vista para ver a Jack, pero sus ojos estaban oscuros y la luz del sol que entraba por el balcón no ayudaba ¿Qué podía hacer?. Huir, eso podía hacer. Apesar de que Jack me tenía acorralada entre su cuerpo y la pared, logré colarme por un costado. Mire a Jack aterrada y tome mi bolso.

—Lauren— me llamó, pero lo ignore y salí huyendo como la cobarde que era.

Me senté en la banca de un viejo parque. Estaba tan asustada y no encontraba una razón. Las palabras de Sonia aún sonaban en mi cabeza como un Tic Tac, pero las palabras de Jack habían puesto a tambalear mi sentido común. No es que no disfrutara aquel beso, es que era tan repentino que me daba miedo enamorarme mas de lo que ya estaba y terminar sufriendo. Sonia me había dicho esas palabras con tanta certeza que me aterraba perder la amistad de Jack. Habíamos construido ese lazo con tanto esfuerzo, después de odiarnos a muerte, que me daba pánico perderlo por un estúpido impulso. Después de 40 minutos de darle vueltas al asunto decidí marcharme a mi trabajo y esperar que el día se hiciera largo para no tener que llegar a casa.

Estaba organizando algunas copas sobre la estantería y cantando una canción de los Caligaris.

-Rompiste mi celular, y nuestro portaretrato- Canté moviendo mis caderas- Ciego quedó el espejo, tus uñas tienen mi sangre, todos estamos enfermo ya no es culpa de nadie- Mi mente estaba en blanco, concentrada en la canción. Ni siquiera me di cuenta cuando Jack se sentó en la barra.

—Hola— miro su reloj— ¿Qué tal?

Me sobresalte al escucharlo y una de las copas aterrizó en el piso, intente bajarme para recogerla, pero ya era tarde; Jack estaba dentro de la barra.

—¿Qué pasa Lau?—preguntó confuso.

—Nada, solo que no esperaba que vinieras. Son las 2 am ¿Qué haces aquí?— pregunté recomponiendome

—Recogerte, es obvio.

Baje de las escaleras y Jack me extendió la mano para ayudarme. Jack siempre se había comportado como un caballero, pero por algún extraño motivo sentir su mano sobre la mía me sobresaltaba.

—Bien, solo queda una hora Lau ¿Te ayudo con algo?

El aire comenzaba a faltarme, tenía el pulso acelerado y quería desaparecer. Maldita sea el momento en el que nos besamos, rompimos nuestra amistad y aunque Jack estuviera actuando como si nada, yo no podía. Necesitaba hacerle frente a este muy grande enredo.

Tome un par de cervezas y las coloque en la barra.

—Vamos hablar de lo que pasó esta mañana

Jack me dedico una sonrisa burlona pero que a la vez resultaba tentadora y las ganas de estamparle un beso estaban regresando.

—Bueno, si de algo sirve, besas de maravilla— dijo dándole un sorbo a su cerveza.

Mis mejillas se encendieron.

—Jack, eso no debio pasar......

—Si debio pasar—me interrumpio—Tú me gustas, yo te gusto ¿Qué problema hay?

<< El problema es que a ti te gusta jugar con las chicas y a mí me gusta que me tomen enserio>> Pensé

Jack me miro por unos segundos, sus ojos miraban los míos y yo no era capaz de apartarlos. Siempre que se quedaba mirándome fijamente era porque de algún modo intentaba descifrar lo que estaba pensando.

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