El cielo tenía un color celeste tan intenso que sentía que me podía dormir. Allí, acostada sobre las piernas de Ray, podría quedarme un par de horas más.
Acabábamos de comer. Planeamos un picnic improvisado lejos de la cabaña. Llevamos todo para comer y la guitarra para cantar un buen rato.
Dizzy estaba leyendo mientras Max estaba acostado a su lado escuchando música con los ojos cerrados. Sophie le hacía una trenza en el cabello a Missy. Georgia, Tobby, Kelan y Peter jugaban cartas. Glenn rasgueaba la guitarra suavemente. Ray estaba simplemente mirando hacia la nada mientras acariciaba mi cabello.
- Tengo sueño.- Admití abriendo los ojos y mirándolo. Acaricio el dorso de mi rostro y asintió.
- Nos dormimos tarde y te levantaste temprano a preparar la comida para traer.- Bostecé mientras asentía.- ¿Quieres volver a la cabaña?- Preguntó. Y volví a asentir.
Después de una larga explicación de porque estaba tan cansada, que en realidad era pura actuación porque tampoco tenía tanto sueño, los chicos nos despidieron y dijeron que en la noche volverían.
Cabalgamos en el mismo caballo hasta llegar. La verdad el montar me había quitado todo el sueño, porque me encantaba la energía que transmitía. Ray se bajó y me ayudó a bajarme.
- Ve a acostarte si quieres, voy a guardar el caballo.- Asenti y troté hasta la cabaña.
Entré y ni siquiera pensé en ir a mi cama, sabía que Ray amaba su cama y siempre nos quedábamos allí. Antes de subir, pensé que podría estar más cómoda con otra ropa.
Fui hacia mi maleta y me quité mis jeans después de mis zapatillas. Busque alguna de esas blusas largas que tenía para dormir en vez de la corta remera que tenía puesta.
¿Mi primer error? Desvestirme antes de saber lo que me iba a poner.
Comencé a buscar rápidamente porque sabía lo que iba a pasar.
¿Mi segundo error? Haber dejado la puerta abierta, de espaldas nunca me daría cuenta cuando Ray llegara.
¿Por qué no encontraba mi blusa?
- ¿Buscas esto?- Preguntó Ray. Mierda.
Voltee y lo vi parado al lado de su cama con mi blusa rosa en la mano. Me estaba mirando, y no precisamente el rostro.
- Si.. yo... - No sabía porque estaba tan nerviosa. Ya me había visto en ropa interior.
Lizzy, estabas ebria cuando eso sucedió.
Me ha visto en bikini también. Pero no sabía distinguir porque ahora era diferente.
Quizá porque están solos.
Oh cierto, maldición.
- Siempre lo dejas bajo mi almohada para no olvidar donde está.- Se acercó a mí.- Pero te olvidaste.- Se río tan perfecto que creí que me temblaba el pulso.
Extendí la mano para quitársela y rápidamente movió su mano.
- Ray...- Lo miré preguntando con mis ojos que era lo que estaba insinuando.
- ¿Lo quieres?- Preguntó y me reí.
- Pues si.- Puse mis manos en mi cintura.
- Pues atrápame.- Salió corriendo y salí detrás de él. Corrió al rededor de toda la mesa de la cocina y volvimos a las camas.
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Lizzy, Missy & Dizzy
Teen FictionLizzeth, Missouri y Dizzane Channel son trillizas nacidas en la gran y prestigiosa ciudad de New York. Frente a sus padres, aparentan ser jóvenes de altas calificaciones, buenos modales y una reputación que cuidar. Pero entre ellas, saben que no es...