Lizzy, Missy & Dizzy

Cap.20 "Latiendo."

- ¿Que tienes que contarle?- Preguntó Raymond entrando con bolsas en la mano y Tobby detrás de el, de la misma manera. Me paralicé ante la situación. Missy volteó y los vio.

- No, nada.- Sonreí.- Cosas de chicas.- Me encogí de hombros.

- ¿Donde estaban?- Preguntó mi hermana, cambiando de tema.

- Fuimos a comprar algunas cosas para sobrevivir la primera semana hasta que cobremos el primer sueldo.- Habló Raymond dejando bolsas sobre la mesa al igual que Tobby.

- Creo que nosotras ya deberíamos irnos.- Habíamos estado todo el día con ellos, quizá ya querían estar solos algún momento.

- De ninguna manera.- Tobby se acercó a mi hermana.- Tu, te vas a ir a tu casa a ponerte más bella de lo que ya eres.- Ella sonrió.- Porque vamos a ir a un bonito restaurante que tu elijas.- La besó.

- ¿En serio?- Preguntó asombrada. El asintió y le extendió la mano.

- En serio. Y tiene que ser ya porque el taxi esta esperándonos en la puerta.

- ¿Que? ¿Ya?- Preguntó levantándose de la cama rápidamente.

- Si, ya.- Se rió Tobby y ella corrió hasta la puerta. Me iría en su mismo taxi hasta mi casa pero no tenía ganas de verlos a los besos en todo el camino. Así que me podría ir caminando o pedirme yo misma un taxi.

- Adiós Ray.- El saludó con la mano y una sonrisa pícara.- Adiós Lizzy.- Le lancé un beso al aire mientras me levantaba. La puerta se cerró y ahora habíamos quedado solos.

Recordé que estaba en un edificio y él debía abrirme la puerta principal de abajo.

- ¿Me acompañas abajo? Ya debería irme.- Lo sentí hacer una mueca pero no lo miré. Abrí la puerta de su departamento y el a mi lado la cerró con su palma de un golpe.

Lo miré algo asustada de su arrebato.

- ¿De verdad quieres irte?- Preguntó serio. Después de unos segundos, reaccioné. Negué siendo sincera.- ¿Por que actuaste como si no quisieras estar aquí en todo el día? ¿Es que no me extrañaste?

Ahora estaba sorprendida de que el se haya dado cuenta de eso, y de que lo haya mal interpretado. Y como podía pensar algo así, por Dios.

- He querido dormir cada noche abrazada a ti desde que nos fuimos de Tennessee.- Di un paso hacia el y quedé más cerca de lo que estaba.

- ¿Entonces por qué no quieres quedarte?- Preguntó confundido negando. Y quizá dolido.

- Porque creo qué tal vez quieres estar algún momento solo y no quiero ser una molestia para ti.- Revoleo los ojos y tomó mi cara en sus manos.

- No eres una molestia para mi. Todo lo que quiero es tenerte cerca.- Sonreí frente a el.- Y es mi primera noche en New York, lo último que quiero es estar acostado solo mirando el techo mientras Tobby sale con tu hermana y tú te quedas mirando una película en tu cama. Quiero que te quedes conmigo.- Me acerqué y lo besé. Puse mis manos alrededor de su cuello y el alrededor de mi cintura.

Nos separamos un segundo y me habló.

- Además Tobby no es el único que hizo planes.- Me guiño un ojo y volví besarlo.