Silver Moon

Capítulo 11 "Divinidad Divina"

Hola a todos espero qué les guste este capítulo qué debí subirlo hace muchos días, pero lo había extraviado... pero ya está aquí, espero qué no me echen los tomates y qué me dejen comentarios.
Gracias a The Mystery Girl por sus ideas y por sus OCS de Camila y Peter, gracias por las ideas,
Bueno a todos los qué me leen y dejan sus comentarios y a los que me leen y no dejan también, los quiero
Un abrazo y disfruten.
Dam Frost.

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Serena, nunca había sentido algo así con Darién, siempre pensó que sus besos eran lo mejor del mundo y que moriría sin ellos, y ahora ese beso que Jack le había dado la hacía pensar de manera diferente, se sentía plena y feliz, era un beso tan dulce y delicado, cálido y frío a la vez, que sentía cómo sí sus pies no tocaran él suelo.
Esa hermosa sensación fue bruscamente interrumpida porqué Jack fue arrancado de sus brazos y lanzado al lado contrario de ella. Perdió el equilibrio, y cayó sentada sin saber que había pasado.
***
Jack no pudo resistirse a besarla, tenerla tan cerca fue él disparador que lo impulso a demostrarle sus sentimientos y al ver que ella no lo rechazaba, siguió él beso, sentía una sensación de calidez en su frío y solitario corazón, que se perdió en esa hermosa sensación, que le hacía perder la noción del tiempo, el ya pertenecía a Serena para siempre, y un sentimiento dulce surgió dentro de él... De pronto sintió que era sujetado con dureza del hombro, y fue lanzado al suelo lejos de Serena.
Se levantó furioso para ver quién lo había tocado, y miro a un Darién, cegado por los celos y la irá, apretaba los puños, dispuesto a hacerlo pedazos, ahí mismo, pero eso no lo había hecho intimidar y se plantó frente a él.
- ¿Qué demonios te pasa? ¿Por qué me tocas? Nunca me vuelvas a poner tus manos encima o te pesará. - Le gritó a Darién, que lo miro sorprendido al ver que no se había intimidado.
- ¡No vuelvas a tocarla, en tú vida, niño! - Gritó saliendo de su sorpresa.
- Darién ¿A que venimos aquí? ¿Estas siguiendo a estos chicos? ¿Acaso me has utilizado? Porqué sí es así no creo que sea buena idea.- Dijo Bunny lanzando una marcada amenaza en su tono de voz.
- Acaso ¿Nos está siguiendo?- Preguntó Jack burlonamente.
- Te vuelvo a repetir, ¡TE PROHIBO! que la toques, ¡Serena es mía!, ¿Lo entiendes? Estamos unidos por él destino, para siempre - Dijo sujetando a Jack por él suéter, sacudiéndolo con fuerza y dándole un puñetazo en la quijada, haciendo que cayera al suelo.
Jack se tocó el labio y en sus dedos apareció una mancha de sangre, eso lo llenó de rabia y se lanzó sobre Darién dándole un puñetazo en la quijada, lanzándolo al suelo.
- No me vuelvas a tocar, jamás en tu vida. - Dijo Jack y Darién iba a propinarle otro golpe cuando una voz lo detuvo.
- ¡Suéltalo, Darién! No lo lastimes, mas. - Gritó Serena, que apenas se reponía, de la impresión y la caída y corrió junto al chico, mirando su labio partido con preocupación.
- ¡Suéltalo Darién! No te atrevas a volver a lastimarlo. - Dijo también Bunny, sujetándolo de los hombros con fuerza, en actitud amenazante.
- Áster ¿Qué te pasa? ¿Porqué lo defiendes? Ella es mi novia, y este mocoso está burlándose de ella. - Dijo mirando a Bunny sorprendido.
- No, creo que sea verdad, Darién, vámonos, solo estás haciendo el ridículo, no eres bienvenido con ellos. - dijo Bunny.
- Darién déjalos tranquilos, vete, por favor, escucha al profesor, ya lo lastimaste bastante. - Dijo Amy, que en ese momento se acercó junto con las chicas.
- Sí, es mejor que se vaya, ¿No cree, Profesor? O quiere que diga algo inconveniente. - Dijo Camila con un tono amenazante.
- ¿De qué hablas? - Preguntaron Serena, Bunny y las chicas.
- No... No es nada... no le hagas caso ¿Verdad, que no es nada, Camila? - Dijo con la voz temblorosa. - Serena, tenemos que hablar, por favor - Suplicó.
- No tenemos nada que hablar, tú me terminaste por qué no estabas seguro de lo que sentías y te avergonzabas de mí, ahora ¿Quiero saber de qué habla Camila? - Insistió.
- No es nada, hablemos por favor, te lo suplico, quiero volver contigo, te amo, y te necesito a mi lado. - Dijo en un tono suave segura de que eso la ablandaría, ella aún lo amaba, estaba seguro.
- Yo te suplique, que volvieras conmigo, te prometí cambiar y no te importaron mis suplicas y romperme él corazón, me tratabas mal, me lastimabas con tú indiferencia, si lo hubieras dicho antes, hubiera brincado de felicidad, pero ahora ya no siento nada por tí, amo a Jack. - Dijo haciendo una pausa y mirándolo, este abrió los ojos sorprendido. - Pero quiero saber de qué habla Camila. - Dijo con voz firme.
- No... No es nada. - Respondió Camila, pero su tono de voz no convenció a Serena, que la miro esperando encontrar en sus ojos la verdad.
- Serena ya te dijo que no es nada. - Intervino Jack, porqué sabía que sí hablaba, eso la lastimaría, y no quería verla sufrir nuevamente. Aún seguía sorprendido por escuchar que lo amaba, y aunque quiso gritar de felicidad, sabía que no era el momento adecuado.
- Yo te lo diré Cabeza de Bombón. - Dijo la voz de Haruka a sus espaldas, ante la sorpresa de todos.
Darién palideció al verlas ahí, sintió que él piso se hundía a sus pies, algo que Serena que lo conocía perfecto, notó.
- ¡Haruka! ¿Tú sabes lo que pasa? - Preguntó.
- Serena déjalo así, por favor. - Jack, hablo con voz suplicante.
- ¿Es que tú también lo sabes?- Preguntó y Jack sólo apretó los labios, guardando silencio.
- Darién te término, porqué nosotros se lo pedimos. - Dijo Michiru.
- ¿Ustedes se lo pidieron? ¿Quienes? - Preguntó confundida.
- Haruka, Jack y yo - Respondió.
- Eso no puede ser... Jack jamás haría algo que me lastimara, ¿no es así, Jack? - Ella lo miro y este desvío la mirada, hasta toparse con la mirada burlona de Darién. - ¿Sí lo hiciste? ¿Por qué Jack? sí sabías que lo amaba, actuaste de forma egoísta, para lograr tus propósitos, ¡me engañaste! No quiero verte, ni que me hables jamás en tú vida, eres peor que Darién. - Gritó e hizo él intento de correr, pero fue detenida.
- Serena espera, no malentiendas, por favor. - Suplicó, sujetándola del brazo.
- Jack, dame una explicación que valga la pena y te creeré.- Respondió, deteniéndose a verlo a los ojos, suplicándole con la mirada que la convenciera.
- Serena, yo... es que... - Y no respondió, lo había prometido a Camila, y no podía romper su promesa, dejó caer las manos soltándola.
- Lo sabía, eres peor que él. - Dijo decepcionada, mientras salía corriendo alejándose de todos, tropezándose con las personas que patinaban ahí, sin importarle, pues sus lágrimas no le permitían ver por donde caminaba.
- Jack, Haruka, ¿Queremos saber qué es lo que pasa? Nosotras queremos oír lo que hizo que alejaran a Darién de Serena, debe de ser una razón muy poderosa, o de lo contrario no lo habrían hecho, y no nos moveremos de aquí, sin oír respuestas. - Dijo Amy con voz firme.
- No tiene caso chicas. - Dijo Darién, tratando de que no dijeran nada.
- Sorprendimos a Darién besando a Camila, nunca creímos que Darién fuera capaz de traicionarla, pero lo vimos, y por eso le pedimos que la dejará, sabíamos que ella, no resistiría él engaño, y era mejor alejarse, pero su actitud, tan inmadura, sólo le hizo más daño, pues no la deja tranquila. - Dijo Haruka.
- Camila, ¿Porqué lo hiciste? ¡Eres una traidora! ¿Cómo pudiste hacerle eso a Serena? es tú amiga, ¿Qué clase de chica eres? - Gritó Lita, miro los ojos llorosos, de ella que no sabía cómo reaccionar, trato de darle una bofetada, pero una mano la detuvo.
- Ella no tuvo la culpa. - La defendió Jack, sujetando su mano, evitando que le pegara y miro a Darién, esperaba que él hablara en defensa de ella, pero sólo permaneció en silencio cobardemente.
- Darién, ¿Cómo pudiste?- Dijo Reí furiosa, dándole una bofetada, mientras, él permanecía callado, avergonzado.
- Yo estaba... Estoy aún, tan confundido, no sé qué me pasa, amo a Serena, pero al mismo tiempo amo a Camila. ¿Ustedes creen que es fácil para mí? No saben lo que sufro, mi vida es un infierno, no puedo estar sin Serena, ¡La amó! - Gritó con rabia, desesperación y dolor. - Es que Serena, es tan bondadosa y noble, y amo eso, pero al mismo tiempo me enferma, su excesiva bondad y su torpeza, a veces no lo puedo tolerar, y eso me duele, y Camila es tan parecida, tan noble y tierna, e inteligente y gentil que no pude evitar enamorarme de ella cómo un loco, y eso me hace sufrir, no sabes lo que es amar a 2 personas y saber que solo les has causado daño. - Dijo con desesperación.
- ¡Basta ya! Eso no son más que excusas, que decepción Darién, no puedo creer que digas tanta estupidez, es mejor que no molestes a Serena. - Dijo Reí, con ganas de darle otra bofetada.
- Jack ¿Por qué no se lo dijiste a Serena? Ella está muy enfadada contigo, sin razón. - Preguntó Mina.
- No es a mí, a quién le correspondía decirlo, no puedo romper una promesa. ¡Lo tenía que haber dicho él! - Respondía señalando a Darién.
- ¡Nunca lo oyes! Jamás podría confesarlo, ella me odiaría, para siempre y quiero recuperarla. - Dijo con fiereza.
- Jack ve con ella y explícale, no puedes perderla por este sujeto. - Dijo Bunny, y miro a Darién con desprecio.
- Pero...ella está muy molesta, no me escuchara, es mejor que se calme. - Dijo con voz caída, y salió de ahí, no sin antes decir. - Darién, no permitiré que la vuelvas a herir de la forma, que lo hiciste, sí la amas, déjala ser feliz conmigo. - Y se fue.
Las chicas lo vieron sorprendidas, y después fulminando a Darién con la mirada, se marcharon en busca de Serena.
- Yo también me voy, y por favor no me cuentes ni siquiera cómo tú conocido Darién, tú proceder me avergüenza. Debes dejar de hacer tantas tonterías. - Dijo Bunny, y salió a buscar a Jack, tenía que estar con él, y decirle que no estaba solo, que él era ahora parte de una familia, iría a buscar a los demás guardianes, Norte, Sandman y Thoot pensaban igual, y tenían que apoyar al "hermano" pequeño.
- Es mejor que ordenes tu vida, y cómo acabas de oír Serena ya no te ama, resígnate, y sigue adelante, y déjala ser feliz con ese niño. - Dijo Haruka, y se marchó seguido por Michiru, dejando a un Darién sólo y deprimido, hecho un mar de confusión.
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- ¡Agh! No puedo perderla, ahora que sé que siente algo por mí. ¡La amo! Moriría sin ella. Pero tiene que entender mis razones. - Exclamó Jack al entrar a su departamento, golpeando el sillón con los puños con rabia y dolor, ni siquiera le importaba el dolor de su herida del labio, no sabía que reacción tendría Serena cuando supiera lo que Darién había hecho, ¡Sí! Él había sido testigo, pero ella debía entender que es algo que no le podía decir, y menos después de saber que Camila, no había tenido culpa alguna, se lo había prometido, y aunque no fuera promesa, su ética le prohibía decirlo, pues las consecuencias serían peores, que él hecho de haber terminado con Darién, pues se sentiría burlada, por él y por la chica, la traición de él, la lastimaría más, antes que en este momento, sólo esperaba que no fuera tan dura con él y con Camila, porqué sabía que no soportaría su rechazó, eso era algo que le destrozaría su congelado corazón.
Un corazón, cargado de amargura acumulada en 300 años de soledad, de desear ser visto por alguien, tener un amigo, y sentir que no era un problema, recordaba la forma tan dura de Áster, al tratarlo, y decirle que era invisible y que nadie creía en el, eso lo había lastimado mucho, y lo oculto con su rudeza, aunque toda esa soledad había cambiado cuando se volvió Guardián, pero aun dolía cuando lo recordaba, era algo que no se olvida tan fácil, por eso al ver la forma tan dulce de esa niña de rubios cabellos y al tenerla cerca y disfrutar su compañía, sentía la seguridad de que jamás volvería a estar sólo. Pues Serena lo amaría y le cuidaría, se sintió protegido y seguro de que ahora tendría alguien a su lado, que era hermosa, noble y cálida. Porqué ella era deliciosamente cálida, su forma de ser con sus amigas, su gentileza y vehemencia con que las cuidaba y protegía, le hacían saber que era la chica más confiable, y bondadosa, que jamás había conocido, ni aun en su vida humana, ahora estaba seguro que por ella valía la pena dejar de ser él gran Espíritu del Invierno y Guardián de la diversión, en cuanto tuviera oportunidad le pediría a Manny que lo volviera humano otra vez para poder estar con ella.
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- ¡Entonces Jack no me dijo nada por protegerme! No puedo creer que Darién haya hecho eso, es un cínico, y pensar que aún me pedía volver, ¡Por Dios! No lo conocía, es tan vergonzoso su comportamiento. -Dijo rabiosa, después su expresión cambio cómo sí recordará algo importante - ¡Cielos! Debo ir con Jack, él debe perdonarme por ser tan dura y torpe. - Dijo y se levantó rápidamente para ir en busca de su amado Jack.
_ Serena tenemos que explicarte lo que pasó y... ¿A dónde vas? - Preguntó Reí mirándola sorprendida.
- A buscar a Jack tiene que perdonarme. - Dijo mientras salía presurosa.
- Ya le expliqué todo - Dijo Bunny saliendo de la habitación de Serena.
- ¡Vaya! Y ¿Por qué lo hizo? - Preguntó Amy curiosa.
- Era un favor que le debía, me tengo que ir, nos vemos mañana en la escuela - Dijo Bunny tranquilamente y se fue.
- ¿Qué raro? ¿Por qué lo habrá hecho? él apenas lo conoce. - Les dijo Amy.
- No tengo idea pero se lo agradezco. Aún no puedo creer qué Darién fuera capaz de eso. - Contestó Lita.
- Bueno vámonos, ya no tenemos nada qué hacer aquí. - Dijo Reí.
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Sí era algo qué le debía a Jack, aún recordaba qué Jeimy siguió creyendo en él por Jack, aún quería saber cómo lo había hecho, pero le daba pena preguntar, además, se sentía culpable, él siempre lo había tratado rudamente, haciéndolo sentir como un estorbo, y como alguien indeseado, y por eso Jack se volvió desconfiado, frío y solitario, siempre buscando ser visto por los niños sin lograrlo, pero ahora, ya eran una familia, y aunque siempre estaban peleando, lo hacía, cómo una forma de demostrarle su camaradería y apoyó.
No podía imaginar lo que él hubiera hecho sí nadie lo hubiera visto en 300 años, tal vez se sentiría peor, qué cuando Pitch atacó sus huevos y los niños dejaron de verlo, porqué fue hasta entonces qué lo había comprendido y aún lo corrió diciéndole qué no debían confiar en él, ignorando su mirada de dolor e impotencia al tratar de explicarse sin qué ellos lo permitieran, en verdad estaba arrepentido, y era su deber repararlo.
- "¡Por Manny! Debo ir al Polo a decirles qué él niño está enamorado, aunque Norte ya lo ha de saber, es un viejo lobo, pero eso complica todo, él se volverá vulnerable ahora qué Pitch ha vuelto". - Pensó mientras se transformaba en Bunny, y se deslizaba por uno de sus túneles.
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- ¡Jack! perdón por no escucharte, ¿Cómo pude dudar de tí? ¿Me perdonas? - Le decía Serena mientras se lanzaba a sus brazos tan pronto este abrió la puerta.
- Serena ¿Qué haces aquí? - Preguntó sorprendido.
- Perdón, ¿Cómo pude ser tan ciega? No sabía, y Camila, qué ruin fue al decirle qué le gustaba, su actuar es tan miserable, ¿Cómo pude amarlo algún día? - Dijo ella, entre abrazos y mimos, qué sorprendieron al joven del invierno.
- Creo que debemos ir a verla, tal vez piense qué estas enojada con ella. - Dijo Jack.
- Sí tienes razón vayamos - Dijo ella y salieron de su departamento.
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Camila estaba en su casa mirando la Luna por la ventana, suspirando con tristeza, salió al balcón mientras aspiraba él fresco aire de la noche.
- "Qué tonta he sido, Jack la ama, y ella ha empezado a amarlo". - Pensó con tristeza sumida en su dolor.
- Necesitó miedo... necesitó miedo, para volverme fuerte, y... - Decía una voz entre las sombras, de pronto sintió un aire cargado de melancolía y sonrió macabramente, mientras saltaba hacia ese balcón.
- ¡Hay! ¿Qué cosa eres? ¡Noo puede ser! ¿Tuú? - Dijo mirando sorprendida a su ex-profesor de gimnasia.
- Tú hermosa tristeza me trajo aquí, necesito tú miedo. - Dijo alzándola en él aire y sujetándola a la pared con sus arenas negras. Después le lanzó humo y arenas negras y Camila empezó a gritar de dolor.
- Sii, siente miedo y temor, es tan hermoso, me hace fuerte y... - No término porqué un ataque de espada lo lanzó lejos de Camila, está miro extrañada hacia dónde provenía él qué había atacado al hombre-sombra.
- ¡No sabes con quién te has metido niño! - Gritó y se lanzó a atacarlo y este respondió con sus espadas.
- Hablas demasiado, sombra. - Contestó él joven rubio lanzando espadazos a diestra y siniestra, atacando a la sombra sin compasión.
- ¡Agh! ¿Cómo te has atrevido a tocarme? - Dijo la sombra tocándose él hombro y viendo cómo le salía un líquido oscuro, entre negro y rojo. - ¡Esto no se quedará así! ¡Volveré! - Dijo y se marchó entre humo negro.
- Jack qué feliz soy contigo, ¡Te amo! - Le decía Serena a Jack.
- Yo más a tí, mí "Divinidad divina" mí hermosa niña. - Le respondió Jack con amor y ternura, mientras un chico rubio los observaba con diversión, desde el balcón de Camila, olvidando qué ella seguía arriba sujetada a la pared.
- ¡Hey! ¡Yuju! Sigo aquí arriba... me podrías bajar. - Dijo la chica mirándolo con reproche.
- ¡Oh sí! Disculpa- Dijo él rubio y con su espada rompió sus ataduras, para después sostenerla en sus brazos para que no cayera.
- Gra...gracias.- Dijo la chica peli-naranja mirando al chico ruborizada.
- Soy Peter Sunshine, y... Tengo que irme, ¡Cuídate! ¡Hasta la próxima! - Dijo nervioso y marchándose entre saltos por los árboles.
- ¿Qué? ¡No abra próxima! ¿O pretendes qué me vuelvan a atacar? Bueno yo espero, qué no, ¡Hey! ¿A dónde vas? ¡Vaya! ¡Qué chico! me dejo hablando sola. - Dijo metiéndose a su casa y dejando a los enamorados solos, qué ni siquiera advirtieron lo qué había pasado, tan sumergidos como estaban en su "burbuja de amor".
En lo alto de un árbol Sailor Uranus y Sailor Neptune miraban a los chicos.
- Creo que debemos despertar a nuestra Princesa, no podemos seguir manteniéndola al margen de la situación - Dijo Uranus.
- Sí, estos ataques están siendo más constantes, pero míralos por ahora no podemos, está tan feliz cómo hace mucho no lo estaba. - Dijo Neptune mirándolos tan felices y plenos.
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Ok, espero qué les haya gustado! Y espero sus comentarios.
Un abrazo
Dam Frost.