Caminaba por las calles del bello Sydney admirando todo lo que había a mi alrededor, sientiendome como una niña pequeña al quedar sorprendida por todo lo que veía.
Hace poco me había mudado a esta ciudad y quería disfrutarla al máximo, quería sentirme bien al estar aquí y no haberme equivocado al venir. Llegué a la heladería la cuál he estado viniendo últimamente, así un maldito calor así que de alguna forma tenía que reponerme.
— ¡Hola Jenn! ¿Qué tal, ya vas acostumbrandote? — Preguntó amablemente Clara que estaba detrás del mostrador, era con la única que he hablado desde que llegué aquí, al venir por primera vez ella entablo una cómoda conversación conmigo.
— Hola Clara —sonreí e hice un ademán con mi mano — Creo que me voy sintiendo como en casa, extraño Londres y su clima frío, pero Australia es mucho mejor, así no tengo que salir con muchos abrigos — Reí un poco y me dió el helado que siempre pedía.
— Verás que te agradara Sydney, es una muy bonita ciudad y tiene gente muy amable.
— Lo sé, te encontré a ti, eres una persona muy gentil.
— Bueno, ahí está la prueba. - Rió un poco.
— Aquí está la prueba. ¿Y cómo va tu día?
Decidí preguntar pero al ver qué no ponía atención y tenía su mirada fija en algún punto del establecimiento, me quedé callada y seguí su mirada. Cayó en un chico jodidamente guapo que estaba parado en la puerta buscando a alguien, se notaba de algunos 19 años, si, mi edad.
Sacudi un poco a Clara para que saliera de su trance y reí.
— Parece que te llama la atención, eh. — Dije divertida y los colores encendieron su rostro.
— Bueno, el prácticamente ha sido mi crush de hace años. — Agachó su cabeza y contesto algo avergonzada. — Su nombre es Luke Hemmings, iba conmigo en la preparatoria, era un nerd, pero era uno muy atractivo, aunque lo sigue siendo.
— ¿Por qué no le hablas? Digo... Así podrían empezar algo.
— No estoy segura de que pueda algo con él, es muy complicado.
Asentí, terminé mi helado y me despedí de ella para después salí de la heladería viendo de reojo a ese tal Luke, demonios, si que era atractivo.
Caminé sin rumbo alguno y divise la playa, bueno... Podría pasar tiempo allí. Quité mis vans y pisaba sobre la suave arena, el sonido de las olas golpear y la brisa que llegaba era más relajante. Algo de agua llegaba a mis pies sintiendo como se hundian, era un paisaje hermoso.
Estuve así al menos unos 10 minutos en completa paz, sí, sabía que no había cometido un error al venir a Australia.
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Primer capítulo, espero lo disfruten y eso ❤
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Paper Hearts » FIRST BOOK
Fiksi Penggemar"¿Sabes por qué me gustaría que mi corazón fuera un avión de papel? Sí estuvieras lejos de mi, lo lanzaría hasta dónde estás tú. Lo firmaría con mucho amor, y te lo daría porque sé que está en un lugar seguro y que tú nunca lo destrozarías. Así que...
