Capítulo 3: "Contra los seximente arrogantes"

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Emma

Acababa de salir de mi primera clase, me dirigía hacia el patio porque necesitaba algo de aire.

Cuando bajaba las escaleras, note por el rabillo del ojo que  uno de los chicos nuevos. Justamente el que se sentó a mi lado en sicología, estaba  en una esquina  muy concentrado mirando a alguien, cuando note que era la misma chica que declaro su amor por los libros defendiéndome, Julieta, no pude evitar mi sonrisa.  Y recordé que  desde que llego no le había quitado los ojos de encima.- “tendría que contárselo a July,  más adelante“, pensé  para mis adentros... justo cuando iba perdida en ese pensamiento, choque con algo muy duro que salió de la nada. Una barrera para ser exacta. No solo caí de  espaldas para mi mala suerte, sino que también tire mi carpeta y mis libros. “tenía que ser yo”, pensé

Avergonzada para  variar, levante la vista y me encontré con unos músculos bien marcados y una mirada de desconcierto, además de ser más alto que yo, pude notar… Era uno de los de la  “Dupla sexi” como los llame yo. “trágame tierra” pensé.

Se me quedo mirando de una manera muy extraña y yo solo pude mirarlo como una tonta. No sabía que decir. Hasta que el rompió el silencio y dijo:

-Bueno, vas a  pedirme disculpas o solo me vas a mirar todo el día.- ¿Qué? ¿Qué fue lo que dijo?

-¿Disculpa?- pregunte, no entendiendo que quería decir, ósea, la culpa fue de él.

-Aceptada – dijo con una sonrisa, que quise tirarle mi libro a la cara.

-Por cierto, ¿por qué no te levantas? Creo que te ves muy sexi ahí tirada pero todo el mundo te está mirando.

Solo ahí note que seguía en el suelo. Hay no… Me levante rápido y el cruzo a mi lado  y  recogió mis cosas, a mí solo se me ocurrió mirarlo y pensar “que sexi con esa ropa”. Llevaba unos jeans oscuros con bolsillos  y un poleron azul que dejaba todo a la imaginación.

-¿Cómo te llamas? – me pregunto de repente sacándome de mis sueños.

-Em.a…En- ¿por qué rayos del infierno tartamudeaba justo ahora?

-¿Ema… en? ¿Qué es eso? suena como M&M- dijo riéndose muy fuerte- como esos dulces de colores rojo, justamente del color que estas ahora.

Ahí vine a racionar.

- Me llamo  Emma, eso quise decir-  no sé si estaba más roja a cada segundo

-¿Quien en su sano juicio pondría ese nombre a sus hijos?- ahora  se me fue toda la vergüenza.

-¿Qué te pasa, que tiene mi nombre? ¿Cuál es el tuyo?- no supe que más decir. Genial

-Scott, ese si es un  buen nombre - dijo orgulloso y levantando una de sus cejas que empecé a odiar desde ahí.

-Para mí perrito- dije. ¿Esa fui yo? Guau.

-Solo si es uno de raza muy fina, te perdono- dijo burlón.

Intuí que no sería uno de mis compañeros favoritos

-Bueno , aunque me encantaría seguir con esta conversación tan productiva, enserio- sonrió de nuevo- me tengo que ir, tengo una cosa importante que hacer.- y luego siguió- tal vez podrías caminar de la manera normal , ya sabes , como lo hace la gente normal , mirando al frente y no con la cabeza torcida.-hizo una mueca. Yo abrí la boca. ¿Que se creía este demente?

-¿Oye que te pasa?- pregunte enojándome de verdad-  Primero tú  me empujaste, y después me insultaste.

-De lo primero, solo sé que tú te cruzaste y lo segundo  no es cierto M&M, no me mientas.

Lo quería tirar por la escalera y  borrarle esa sonrisita, aunque era linda debía reconocer,… pero igual quería  borrársela.

-No me digas M&M, que no me llamo así.- proteste, que se creía .

-No te enojes. Pudo ser peor mmm...como Emince o algo así.

Se dio la vuelta y se fue, y yo me quede mirándolo. Pero antes que subiera las escaleras se giró y me grito, demasiado fuerte para mi gusto.

-Ah  y no te preocupes, cuando quieras hablar conmigo,  solo dímelo. No es necesario que  me choques  para que te ponga atención.- y luego remato diciendo- Chao M&M nos vemos por ahí.

Definitivamente, no sería uno de mis mejores amigos.

 Una vez afuera, ni por un momento pude sacar a ese tarado  de mi cabeza, uhmm que rabia. Pero bueno no me iba a echar a perder mi día...

Cuando se me acabo mi hora libre fui a mi siguiente clase. Cuando entre a la sala, como un chiste ahí estaba el sentado con su primo. Como podía tener tan mala suerte.

-Heyyy Emma- me giré y sorprendida me di cuenta que era Julieta, bien, un poco de apoyo moral J

-Hey Chica, que bueno verte de nuevo- dije aliviada

-Mmmm ¿¿alguna noticia??-  me pregunta Julieta, la miré sin entender.

-¿Por qué?

-Por nada...mm... Solo notaba que uno de los esos chicos, te está mirando justo ahora y de una manera dudosa- dijo riéndose

En ese momento hice justo lo que no se debía hacer…si señores, lo mire.

Ahí estaba, con esa misma cara. Me miro con esa sonrisa del demonio, y me levanta una ceja. Y cuando  pensé que no sería peor, me escupió el muy maldito:

-Hey...M&M, nos vemos de nuevo... ¿me estas siguiendo?

Justo cuando quería tirarle  una silla, July dijo:

-¿Por qué te dice M&M?? Ya son íntimos amigos o… ¡algo más!

Genial pensé. Irónicamente

-Mmm… yo… no –y  me detuve  cuando uno de los dos interrumpe

-Hola chicas… que hacen aquí reunidas cuchichiando… están admirando lo sexys que somos- dijo Travis si mal no recuerdo

-¿Que te hace pensar eso?- dijo Julieta levantando una ceja…

-Que te ves malditamente sexy asiendo eso

Julieta se sonrojo y la miré sorprendida.

Familia tenían que ser, Pensé

-Que sucede preciosa… ¿te puse nerviosa?-le dijo a Julieta, suerte que no soy la única que se sonroja con estos tipos.

-¿Que tú me pusiste nerviosa a mí? … ja… por favor no seas tan malditamente arrogante, aah! Y por cierto mi nombre no es preciosa… es Julieta ya te lo había dicho antes. Idiota

Vaya ella sí que tenía palabras… sip me agrada esta chica.

-Aaa July me gusta más… mmm suena maaaas…- mordiéndose el labio inferior-… Caliente- dijo marcando esta última palabra

Justo cuando pensé que mi amiga  saltaría sobre el  ahí mismo. (Y quería verlo)... llega el resto de la manada.

-Hola chicas- dijo Scott… Pero hay cosas más importantes e interesantes que ver

-¿Podrías llevarte a este grandísimo idiota de aquí?... tenemos algo más importante…-toma un respiro-… que escuchar a este baboso…-dijo July casi perdiendo la paciencia

Scott solo sonrió y se llevó a su “primito”. Pero note que Travis se reía de oreja a oreja. No sé si july lo noto.

En ese momento llego el profesor evitando cualquier guerra... Qué pena pensé.

Traviesa AtracciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora