Traviesa Atracción

Capítulo 35

Scott

Voy directo a la barra. ¿Por qué? maldición, necesito un trago urgente. Le pido a la chica que atiende que me sirva lo mas fuerte, mientras ignoro como me coquetea descaradamente, me sirve mi vaso, pero la mano de Travis me lo arrebata y se lo bebe de un trago... y a este que...

-Otro igual por favor – dice dejando el vaso en la barra.

- ¿Y a ti qué te pasa? El que tiene una mierda de lío soy yo – murmuro.

- ¿Yo? Solo tratando de controlarme, lo normal... para que mi chica no me dé una patada en el culo como te la dieron a ti.

Ignoro su comentario. Nos quedamos así un buen rato, bebiendo en silencio. Sin creer aun lo que me dijo, pero aun así me asusta que pueda ser verdad demonios... nunca me había sentido así antes y no me gusta... instintivamente la busco alrededor. Y la encuentro con July en un sofá cerca de la pista, por suerte el marica no está con ellas eso confirma mis sospechas... me miente... pero... y ¿¿si solo les fue a buscar un trago?? Y si... ¿quedaron en verse después? No, no, soy capaz de seguirla a su casa para asegurarme. Y por qué demonios no se cubre el pecho ya mostró demasiado por esta noche; por lo menos trata de bajar esa cosa que trae por falda disimuladamente.

Trav suelta un largo suspiro a mi lado.

- ¿Sabes? Jamás me imagine que una mujer me tendría como un loco acosador sin siquiera habérmela llevado a la cama primero- su mirada puesta en July- Ni siquiera tengo prisa por que suceda, solo quiero pasar pegado a ella todo el día... estoy hecho un maldito baboso y realmente no me importa – No le digo nada porque me siento igual que él, ahora que lo pienso.

Una morena se acerca a Trav intenta tocarlo, pero él la aparta sin siquiera mirarla.

July mira hacia nosotros, le guiña el ojo a Travis y juro que este suspira otra vez. Tira de Emma hacia la pista y ambas comienzan un lento movimiento.

-Aquí vamos, otro suplicio...- murmura... ¿eh?

Ambas están un poco tensas al comienzo, pero de apoco encuentran su ritmo y se relajan del todo moviendo sus caderas y levantando los brazos... y maldición se ven tan malditamente sexys que quiero ir a cubrirlas a ambas, por extraño que parezca. Sobre todo, porque no soy el único que lo nota. Todos los hombres giran sus cabezas a ellas; la pista está llena de chicas, pero no puedo apartar mis ojos de Emma. Jamás espere verla así y no sé si me gusta... un tipo disfrazado de drácula se acerca a ellas pero July lo aleja rápidamente, chica lista, aunque Travis no piensa lo mismo.

-Bien. Se acabo ese es todo el espacio que pienso darle a esa mujer.

No entiendo a qué se refiere hasta que lo veo irse decidido hacia la pista, cuando llega hasta July, la toma por atrás de las caderas y la pega a su cuerpo mientras le habla al oído, lo que provoca una risa en ella y un movimiento de cabeza por parte de Emma, quien hace gestos con las manos y señala hacia el jardín de la casa. July asiente, se vuelve hacia Trav pasando sus brazos por su cuello y así nada más se pierden el uno en el otro.

Veo salir a Emma y sé que esta es mi oportunidad.

Emma

Estoy tan enojada, dolida y sorprendida... soy un mar de emociones con Scott. ¿Qué, me ama tanto? Me gustaría tanto creerle, pero no puedo sé que miente... pero sentí mi corazón saltar de mi pecho cuando dijo eso.

-Oye espera - alguien me llama desde atrás, ah, es el vaquero lo había olvidado.

- ¿Qué fue lo que paso?... y porque ese tipo me...

-Si, si disculpa... larga historia – suspiro – pero ahora déjame sola por favor ya me ayudaste- lo corto.

-Como quieras son muy raras y no estamos dispuestos a otra paliza de esos dos- el pobre se va con su amigo pirata que muestra signos de dolor. Uff.

-Busco un lugar donde sentarme y esperar a July, mientras cuido de no mostrar mucho con mi dulce falda, por suerte llega enseguida.

-Ugh voy a tener que hacerme de mucha paciencia con ese troglodita que me conseguí de novio – dice mientras se sienta a mi lado.

-No te quejes, te gusta tal cual es con su actitud de cavernícola celoso – solos me mira sonriendo.

Mm ambas miramos a los chicos, que como sospechamos están bebiendo en la barra. Una morena está muy cerca de Travis y July lo nota también porque enseguida frunce el ceño, pero este ni la nota solo tiene ojos para July... quien se relaja visiblemente y le guiña un ojo.

-Vale vamos a seguir con el plan. Vamos a bailar y mostrar tu lindo y dulce disfraz a Scoty- dice tirándome de la mano sin darme tiempo a protestar. Al principio no logro relajarme al notar todas las miradas que recibimos, a mi amiga le pasa lo mismo así es que cerramos los ojos y nos dejamos llevar por la música, lo cual funciona. Noto que alguien se acerca y escucho a July gruñir.

-No, no estamos interesadas gracias- y le da la espalda.

-Qué bueno que el tipo hizo caso y se fue porque veo a Travis acercarse a July por detrás y tomarla de las caderas en un gesto posesivo.

-Deja estas quietas bebé y prometo que nadie más saldrá lastimado esta noche.

July solo se ríe, pero está encantada que haya llegado su troglodita. Lo sé porque se vuelve y le susurra algo que no logro escuchar. Sep es momento de escapar.

-Bien, bien, voy a tomar un poco de aire al jardín antes de que vomite encima de ustedes chicos por tanto romanticismo – Sin más los dejo solos en su momento.

Salgo por la puerta que da hacia el patio que es un bello jardín con una pileta en el centro. La noche esta estrellada y por suerte no hay casi nadie solo un par de parejas.

Me siento en una banca bajo un árbol a pensar en todo lo que paso hace un rato.

- ¿Me puedo sentar? – pego un gritito porque no había notado a alguien más.

-Scott...- susurro, aunque siento un gran alivio. Solo ahora me doy cuenta que no lleva ningún disfraz, ni Travis tampoco, ahora que recuerdo. Solo va vestido con sus jeans y una camisa que hace juego con sus ojos verdes. Su cabello despeinado le da un aire de relajado. Ugh por qué tiene que ser tan guapo cada vez que lo veo. No encuentro mi voz.

-No quiero pelear, de verdad Scott.

-Yo tampoco... solo quiero que me escuches cinco minutos sin salir corriendo, y prometo que si después de eso aun no me crees te dejare de una vez por todas en paz – Suspiré.

-Está bien... adelante.