Una semana con TD

Parte 6 (1/2)

—¡No puede ser, no puede ser, NO PUEDE SER!

Jenny aventaba sus cosas por toda la habitación, iba de un lado al otro buscando algo que aparentemente era importante. Andy se había dado cuenta de ello, pero no le había querido preguntar dado que se había metido al baño para cambiarse de ropa. Cuando salió, encontró la habitación hecha un desastre, igual que como lo habían dejado anteriormente en la guerra de almohadas.

—Jenny, ¿estás bien? ¿Por qué tú ropa esta tirada? —la rizada levanto algo de la ropa de su amiga, dejándola sobre la cama de esta.

—¡Ay! Es que, no sé porque siempre me tienen que pasar cosas malas a mí —Jenny se dejó caer sobre su cama escondiendo su rostro en una almohada —. La vida me odia.

—No digas eso, Jenny. ¿Qué fue lo que paso?

Jenny se incorporó un poco sentándose sobre la cama con las piernas cruzadas, tomo la almohada y abrazo esta sin dejar de ocultar su rostro en ella. Le daba pena decirle a Andy lo que había pasado, pero de igual forma decidió decírselo.

—Bu-bueno es que yo... Yo... Olvide traer mi traje de baño, ¡no lo encuentro por ningún lado! —Jenny escondió más su rostro casi a punto de llorar.

—Tranquila, Jenn —Andy le dio unas palmaditas en la espalda para que se tranquilizara —, yo traje dos, si quieres te puedo prestar el otro para que lo uses hoy.

—¿De verdad? —Jenny levanto la cabeza para ver a su amiga con ojitos esperanzados —. ¡Sí, sí! Prestamelo por favor.

—Ok, espera —Andy se dirigió a su maleta que estaba a un lado de la que por ahora era su cama. Acostó la maleta sobre el piso y la abrió. Sacó el traje de baño que le prestaría a Jenny y cerró de nuevo la maleta —. Aquí está.

Extendió el traje de baño enfrente de la más chica para que esta lo tomara, sin embargo, Jenny ya no parecía tan segura de querer aceptar el traje de la mayor al verte este.

—¿Por qué son dos piezas? ¿Y si mejor me das el que traes puesto? —Jenny señalo el traje que la mayor traía. Era un traje completo de color lila con pequeñas flores amarillas. El otro en cambio, era un top ajustable del cuello y la espalda y un pequeño short, ambos de color verde.

—No te pondrás el que traigo puesto. ¿Este que tiene de malo? Es lindo.

—¡¿Lindo?! ¡No me pondré eso! —Jenny tomo el traje inspeccionando este con detenimiento —. Está muy pequeño para mí... Mejor me pongo otra cosa y no entro a la alberca hoy.

Andy abrió la boca para convencer a su amiga a usar el dichoso traje de baño, pero justo en ese momento, tocaron la puerta.

—¡Adelante! —gritaron ambas chicas.

La puerta se abrió dejando ver a Priscila, que al igual que Andrea, se había cambiado de ropa por algo más de acuerdo al clima caluroso de Jeju.

—¿Ya están listas? Brenda dice que la comida ya está, y yo muero de hambre —entro a la habitación cerrando la puerta detrás de ella.

—En eso estamos —dijo Andy —, pero Jenny no se quiere poner el traje de baño que le prestare, solo porque es de dos piezas.

—¡Es que velo, Priscila! ¡Yo no usare eso, ya dije! —Jenny se cruzó de brazos como niña chiquita haciendo su berrinche.

Priscila tomo el traje de baño que Jenny había dejado sobre la coma, lo vio por unos largos segundos para después dárselo a Jenny, levantarla de la cama y empujarla al baño.

—Solo póntelo, estoy segura que si lo usas, conquistaras a Xerito con tremendo cuerpazo —dijo Priscila en son de burla.

—¡¿Cuál cuerpazo?! No te burles de mí, ¿quieres? —Jenny casi se cae en el baño cuando Priscila la empujo con más fuerza. Momento que aprovecho para cerrar la puerta y ponerle seguro por fuera. Jenny obviamente se dio cuenta de ellos al escuchar el débil clic de la puerta —¡¡OYE!! ¡¡ABREME LA PUERTA!!