La brisa era fuerte llena de polvo una zona sin portón, en donde el patio era de tierra, donde no había rejas, una casa de madera, color verde menta, con una entrada abierta y una ventana grande que se coloca un tronco para que la sostuviera, esa casa fue mi primer recuerdo de lo que comenzaría la vida entre mujeres que me formarían para poder entender mi fuerza especial.
Amanda!!!!! Amanda!!!! Eran las palabras con las que mi abuela Raquel me llamaba para comer, dejando mis manos llenas de lodo, corría rápidamente porque abuela Raquel se molestaría si llegaba tarde para cuando ella servia la comida en la mesa, recuerdo correr tan rápido como podía, que la velocidad hizo que me cayera entre las maderas que usaba mi abuela para calentar el horno que hizo con cemento barato, me levantaba llorando y llegue a la cocina de mi abuela con la cara sucia y las lagrimas corrían entre la suciedad de mi rostro, tenia un vestido azul como el cielo y un bordado blanco que resaltaba el final de la falda.
Cuando por fin mi abuela me sentaba a comer me enseño a levatarme y terminar mi comida, mientras bajo la mesa mi prima Kristina comía lo que no me gustaba, verduras que aun me pregunto que nombres tenían. Se sentó cansada y me enseño a cruzar mis manos para orar por los alimentos, su mal carácter se disipaba en ese momento, por las tardes después de lograr "comer" buscaba su silla y se sentaba todos los días a ver su programas de cine latino. aun recuerdo escuchar en la radio Mambo de Resortes, y reír con ella. Entonces mientras la miraba bailando me di cuenta de la mujer que era para mi, que por las mañanas me levantaba al mercado con ella para elegir las mejores hojas de plátano para sus tamales frescos, cocinar juntas por la tarde, y leer juntas por la tarde las escrituras.
Desde ese momento supe que era una niña, pero era una mujer. Para la edad de 5 años, que significa todo eso?
Navidad 1997, visitamos una familia de la Iglesia, aun tengo esa foto, en donde mi madre se sentía desbastada, consumida por el dolor y tratando de buscar una salida, encontró en ese hogar, aquella cada de madera color rosa, a la par de un árbol navideño plasmar tres de sus niños con un rostro fingido, para que pudiéramos tener la mejor navidad del mundo.
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