Alessandro André.
Mi tierno hermano cuando leas esta parte, de este libro quiero que sepas que fuiste mas que mi hermano, eras en ese momento la calma de todo y la promesa de un lugar que antes visitamos.
Me enseñaste a ser madura, y cerrar el dolor, me curaste completamente, admiro en la manera que tu luz pudo iluminar nuestras vidas.
Misión,
2013, Llego una carta de Estados Unidos, una carta que estuve esperando por 2 semanas, tenia una maleta lista para dejar mi país y servir como misionera, fue la cosa mas dura que pude pasar, aun recuerdo poder sujetar la manita de mi hermano, y decir, esta bien debo de dejarte.
Entonces me aventure por Sudamérica, un lugar en donde pude aprender mucho de la divinidad mía y de las demás mujeres de la tierra.
Ya para ese momento había recogido recuerdos, datos y la admiración de muchas personas.
