Capítulo XII

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¡Hola! Espero disfruten los capítulos de hoy :) Muchas gracias por leer, y no olviden votar y comentar.

Au revoir!

Love,

Nikky Grey.

P.S.: El título del capítulo está basado en una frase de "Buscando a Alaska" por John Green: "Imaginar el futuro es una especie de nostalgia."

Capítulo XII:

Donde el futuro es un tipo de nostalgia:

Sábado, 2 de marzo de 1996. Día dos, 7pm (145 horas para el Juicio Final)

-La alarma ha sido activada nuevamente tras la desaparición de Rosa Anglesola, famosa autora de "Regrésame la vida", y que se encontraba en la ciudad por motivo de su gira.

Nicolas se dio la vuelta en la cama, cubriéndose la cara con la almohada en un intento de amortiguar el sonido. Vagamente, reconoció la voz de la reportera del noticiero de la noche.

-...La joven escritora de veinticinco años preocupó a sus representantes, al no presentarse anoche a una entrevista programada para este mismo canal. Su agente, Diana Morton, afirma que Rosa no regresó al hotel después de su firma de libros en Whitechapel, hace dos días, y que cualquier intento de contactarla ha sido inútil...

Luego, más despierto, recordó que esa habitación no tenía televisor. Abrió los ojos, confundido, y se levantó de la cama, percatándose del detalle que ya se imaginaba: Sara se había ido.

De hecho, dudaba que se hubiera quedado mucho tiempo.

-La policía se ha mostrado reticente a creer que se trate del Conde (que la nueva información abre la sospecha de que se trate en realidad de la Condesa), cuyas víctimas habían sido hombres hasta ahora ¿Se tratará de un cambio en la victimología?

Siguió el sonido hasta la habitación de al lado, un depósito repleto hasta arriba de cajas (al menos, ya sabía a dónde habían ido a parar). Había un televisor a blanco y negro sobre una de ellas, doblándola bajo su peso. Sara estaba sentada en el suelo frente a él, con las piernas cruzadas una sobre la otra, vestida completamente de negro. No se movió, pero sabía que había notado su presencia.

En la pantalla, la reportera entrevistaba a una mujer de edad, que según la barra bajo su rostro, era el agente de Rosa. La mujer decía haber hecho varias llamadas a su teléfono sin obtener respuesta, pero no haber llamado antes a la policía porque no era algo inusual que desapareciera la noche entera y volviera al día siguiente.

-No sabía que Susan también daba el noticiero de la tarde -comentó, fijándose en la hora.

-Da todas las emisiones -replicó ella, sin apartar la vista de la pantalla. Se sentó a su lado, sin prestar mucha atención a lo que decía la reportera.

-¿De dónde sacaste el televisor?

-Estaba en una de las cajas, le pedí a Trevor que lo conectara. Dijo que podíamos ponerlo en nuestra habitación si queríamos, pero no quería despertarte.

-Así que te encerraste en el depósito a acumular polvo hasta que lo hiciera -bromeó-. Brillante.

Sara sonrió, aunque no le llegó a los ojos.

-¿Ves lo que hago para preservar tu sueño, y es así como me pagas? -se encogió de hombros- Aunque no sirvió de mucho, porque igual te desperté.

-La intención es lo que cuenta -dijo, observando su rostro en busca de alguna señal de cansancio- ¿Llevas mucho tiempo despierta?

-Unas horas.

Leyendas Inmortales II: Mil años másDonde viven las historias. Descúbrelo ahora