Nuestro Camino

Capitulo 32 ¡Te dije que llegaras a Tiempo!

Capitulo 32   ¡Te dije que llegaras a Tiempo!

Sakuno había ido primero a casa para ducharse y arreglarse para su regreso a casa, el director le ofreció quedarse en Alemania pero esta al último no acepto ya que quería regresar a su amada nación y seguir con el sueño de la cocina oriental, después de todo tenía tiempo de sobra.

Ryoma en cambio corría desesperado al hotel ya que se suponía que ella estaba hospedada pero lo único que encontró fue a su hermano y a su padre.

— Enano — hablaron los dos hombres

— ¿Dónde está? — pregunto intentado mantener la calma

— Ella no está aquí, el director le dio una casa a las afueras de la ciudad — declaro Ryoga pero su hermano se fue en medio de la explicación

— ¿Por qué no dijiste lo más importante? — regaño Nanjiro

Ryoga se excuso moviendo los hombros, lo importante es que ellos irían a recogerla en el auto y después irían al aeropuerto, Ryoma salió del hotel y lo primero fue marcarle a Tezuka para que le diera la dirección de la cobriza, este accedió mientras Ryoma subía a un taxi pero era demasiado tarde Sakuno ya había salido de esa casa junto a Tommy

Sakuno se había puesto un vestido blanco hasta la rodilla, sandalias del mismo color y su cabello era atado en una coleta alta con su típico flequillo, Ryoga y Nanjiro habían llegado primero que Ryoma y se fueron al aeropuerto sin decirle nada a la pequeña.

Durante el camino al aeropuerto recibió un mensaje de Tezuka explicándole que Ryoma había ido tras ella y después de minutos este le había marcado pidiéndole la dirección de la casa, Sakuno leyó con suma atención el mensaje de su superior desando que le haya explicado que su avión saldría en menos de 20 minutos.

El reloj no se detuvo y tampoco ella, llegó al aeropuerto en cuanto en las bocinas se podía escuchar el llamado a los pasajeros, entrego su equipaje y espero el segundo llamado para abordar...

Ryoma odiaba no saberse explicar bien en Alemania, el idioma no lo había aprendido por ninguna circunstancia provocando que el taxista divagara por media ciudad hasta que el mismo le pregunto en ingles que si era el aeropuerto, este último le grito que se apurara, cambio de velocidad y el pedal al fondo... por fin había llegado al aeropuerto pero el vuelo había salido hace más de media hora.

— Te dije que llegaras a tiempo! — se escucho la voz fémina

Ryoma no creía lo que escuchaba, definitivamente se estaba deshidratando pues ya escuchaba la voz de la chica

— ¿Ryoma? — se volvió a escuchar

— ... — no hubo respuesta y esta se poso al frente del ambarino

— ¿te encuentras bien? — pregunto la chica

— Ryu... ¿Ryusaki? — pregunto aun con dudas

— Mou, habíamos dicho que nos llamaríamos por nuestros nombres

Tras escuchar la queja de la chica Ryoma la tomo por la cintura elevándola a centímetros del suelo y haciéndola girar mientras esta suplicaba que la bajara completamente avergonzada, su vestido era levantado por las vueltas y esta intentaba bajarlo desesperadamente con sus manos

— ¡RYOMA! — grito la chica en un intento que reaccionara

Tras escuchar la suplica de que la bajar este decidió hacerlo, con cuidado la deposito en suelo mientras que los pasajeros que esperaban su avión los observaban incrédulos ante la escena. Ella volvía a preguntar qué es lo que sucedía y este simplemente ocultaba su rostro en el pecho de ella.

— Creí que no podría alcanzarte — susurro Ryoma

— El vuelo directo se atraso — confeso la chica, el ambarino levanto su rostro con sorpresa

— ¿eh? —

— El vuelo que salió tenía varias paradas en Rusia... — termino de explicar la chica

Nanjiro y Ryoga comenzaron con el mar de carcajadas mientras que Rinko llegaba con un par de maletas y un pasaporte para el ambarino. Este agradeció a su amada madre y acepto viajar con ellos, Sakuno rio internamente, esto lo habían vivido hace tiempo pero con los papeles cambiados y en vez de Nanjiro y Ryoga eran los titulares quienes hacían las bromas.

— ¿y bien? — pregunto Sakuno llamando la atención del ambarino, este ultimo regreso la mirada y la beso mientras entrelazaban sus manos, Sakuno correspondió el beso pero segundos después Ryoma se separo muy asombrado — ¿Qué ocurre? — pregunto ella ante la expresión del ambarino

— ¿el anillo... — quiso preguntar pero ella simplemente lo volvió a besar

— ¡Acepto, después de todo te quiero en mi vida! — respondió ella con su tipo sonrojo

Ryoma la abrazaba mientras ella simplemente se aferraba como niña pequeña al pecho del ambarino.

Definitivamente agradeció a todos por ese momento, todo lo que había pasado e incluso a Hitachi, NO HAY MAL QUE NO VENGA POR BIEN.

Fin.

Hola, es el final de esta historia, les agradezco haber esperado por mucho tiempo el final de esta historia, le agradezco sus comentarios hayan sido buenos o malos pero al mismo tiempo aprovecho para dar publicidad a un novela que estaré subiendo la siguiente semana, si también es un RyuSaku, espero y no sea tan larga (también hare sufrir a Sakuno y también se trata del tenis) pero espero y les guste.

Por otro lado subiré una de mis novelas ya publicadas en FanFic.es, "Son 5" un Ryusaku de pocos capítulos pero en donde Ryoma se enfrenta a más de cinco obstáculos de la familia Ryusaki.

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Hilos Rojos

Prologo

Sakuno Ryusaki, huérfana de ambos padres tras un accidente automovilístico cuando tenía tan solo 4 años de edad, sus padres Taro Ryusaki y Sakura Ryusaki ambos fallecieron en el acto con solo 28 años de edad, durante el accidente Sakuno recibió heridas en la columna vertebral quedando paralitica, su abuela paterna Sumiré Ryusaki devastada por perder a su único hijo y a su nuera pero en cuanto le dijeron que su nieta había sobrevivido al accidente una gota de esperanza apareció pero se esfumo enseguida al enterarse la desgracia de su nieta: "no volvería a caminar".

Echizen Ryoma, prodigo en el tenis, hijo de la leyenda del Samurái; Echizen Nanjiro y Rinko, ambos amigos íntimos de Sumiré Ryusaki, tras enterarse de la noticia del accidente intentaron consolar a la abuela y a la nieta, durante el velorio ambos niños con 4 años convivían alegremente pues él creía que aquella niña en esa silla de ruedas parecía una muñeca de porcelana y por eso no debía caminar pues se podría romper, en cambio ella le alegraba que fuera el único que se atrevió a hablarle pues en cambio todos los adultos la miraban aterrados y con lastima, el no.

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Son 5

Una carta de Londres, una más de EE.UU, una de Rusia, una de México y la ultima de Argentina, cinco cartas habían llegado a manos de Ryuzaki Sumiré, todas destinadas a Sakuno Ryuzaki (la nieta de la entrenadora ahora con sus 18 años cursando el último año de preparatoria).

Habían pasado 5 años desde que Echizen Ryoma se fue a EE.UU para cumplir su sueño y ella había dejado el tenis para dedicarse en cuerpo y alma a la música clásica (el piano y el violín).

—Sakuno, te dejo estas cartas son de ellos, y diles que la próxima vez también manden para mi, chicos malagradecidos—

— ¿Eh?, es enserio abuela, hace mucho no contestaban mis cartas—

Susurraba una cobriza algo temerosa, las cartas de "ellos" siempre traían problemas o solo tonterías que aburrían a la cobriza.

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