No sé cómo pudo pasar, pero... ¡Gracias!

43 11 19
                                    

Mi padre contrató a dos detectives privados para que fueran con nosotros a la estación de policía a revisar la evidencia de la que me habló el Subteniente. Luego de revisar minuciosamente no quedó la menor duda que el verdadero asesino era don Manuel Rodríguez, y que Carlos estaba muerto desde hacía un año.

Tati y yo no tuvimos que hacer mucho para convencer a Alfonso, y a mi Padre, para que compraramos claveles, y fuéramos a visitar al hombre que nos salvó la vida. 

 

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Antes de la TragedíaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora