Antes de la Tragedía

El Encuentro...

Al abrirse la puerta del ascensor también se abrió la del apartamento de Carlos que quedaba enfrente de éste. Me despedí de don Manuel quien siguió para su apartamento, el 605. Al ver salir a Carlos, sonreí, unos minutos más y no lo hubiera encontrado.

—¡Hola Carlitos! Soy tu vecina del 203. ¿Me recuerdas?

—Sí.

—Disculpa la confianza, pero... Mejor seré breve, veo que vas de salida. Necesito que me hagas el favor de prestarme un mouse. —Observé las manos de Carlos y tenía uno en su mano derecha. Me lo alcanzó.

—No, no me refería... ─respondí, sin saber qué decir.

Carlos me dió unos golpecitos en la espalda, oprimió el botón para abrir las puertas del ascensor y subió a él conmigo; sólo cuando llegamos al segundo piso y se abrieron las puertas del ascensor, atiné a darle las gracias, pero él se bajó conmigo.

—¿Ah, tam... también bienes para este piso? —pregunté, tartamudeando un poco.

—El favor se hace completo. —contestó Carlos.

—No, no te preocupes.... Sólo... —Sentí un fugaz escalofrío en mi cuerpo.