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Su mirada estaba perdida en el techo,su mente divagaba en cualquier cosa que se le ocurriera. Eran cosas muy triviales y aburridas: Aquel perro que vio fuera de la casa, esa planta que nunca regó...

Así estuvo unos minutos, hasta que sus pensamientos comenzaros a tornarse más oscuros; tristeza y arrepentimientos.

Tantos errores que cometió, cosas que pudo haber hecho, palabras que nunca dijo.

Frunció el ceño.

Ya no podía, ni hacía el esfuerzo de ahuyentar las deprimentes cosas que lo carcomían por dentro.

Su respiración se hacía más inestable y las lágrimas ya caían por su rostro.

Paro en seco al escuchar su celular. Era un número desconocido, pero por lo que decía el mensaje estaba más que seguro de quien era.

"Hey, Azuquita. ¿Te encuentras bien?No llegaste a trabajar" 9:02 a.m.

Suspiró, limpiando sus lágrimas con la manga de su camisa. Negó con la cabeza y siguió mirando al techo.

{...}

Jimin se preocupó al ver que el rubio no le había contestado. Aunque tal vez sólo se había quedado dormido, lo cuál le alegró, pues Yoongi habitualmente tenía unas grandes ojeras que el castaño atribuía a la falta de sueño.

Sonrió, porque el rubio merecía descansar.

— ¡Jimin! ¡Deja ese teléfono y ponte a trabajar – Gritó Joon – ¿Dónde está Yoongi?

El castaño dudo en que decirle a su jefe.

— E-el no vino... ¡Pero yo haré sus tareas! – Respondió antes de que Joon dijera otra cosa.

Este lo miró despectivamente.

— Pues apresúrate, porque no saldrás de aquí hasta que hayas terminado.

{...}

Jimin salió unas horas más tarde quede costumbre. Después de terminar con el trabajo de Yoongi y el propio, se dispuso a ayudar a sus otros compañeros.

Estaba cansado, pero feliz.

Prefería pasar la tarde entera en ese almacén que estar en su departamento; un lugar solitario -además de pequeño- que sólo lo deprimía.

No podía permitirse eso, porque si el estaba deprimido... ¿Quién trataría de animar a Yoongi?

Shatter MeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora