Algún Día © [PAUSADA]

12. No te veo

Habían pasado 3 largos y aburridos días desde que no veía a Julieta, los mensajes no le caían, nada. Parecía como si se la hubiera tragado la tierra, debía admitir que extrañaba la locura de su castaña.

POV Julieta

-Mamá, Papá-. dijo situándose frente a los mayores que se encontraban viendo televisión, en el hotel que se hospedaban.- ¿Cuándo vamos a volver para nuestro país?-. Preguntó nerviosa

-¿Tan ansiosa estas,hija?-. Preguntó Daniel, su hermano, mientras hacía aparición en el lugar -. Hola Hermana-. Dijo sonriente mientras estiraba sus brazos en busca de un abrazo.
Juli lo abrazó fuerte, y llorando de la alegría le dio varios besos en las mejillas.

-¡Te extrañe tanto, hermano!-. Le dijo mientras mantenía sus brazos al rededor del cuello de este.

-Y yo a ti, hermana-. Dijo mientras pasaba una mano por el pelo de esta.-y cuéntame-. Siguió acariciándole el pelo.- ¿Quien es ese tal "Tomás" del que tanto escribes en tu diario?-. Al oir eso, se separó de su hermano rápidamente. Se había delatado solo.

-¿¡Cómo que leíste mi diario!?-. Preguntó furiosa

-¿Quién quiere pizza? - ofreció repentinamente el padre

-Est..-. su celular comenzó a sonar interrumpiéndola. Rebuscó en su bolsillo y deslizó aceptando la llamada entrante.- ¿bueno?....-suspiró.-Ajá... ¿A que hora?... Te paso la dirección por mensaje, chao.- cortó la llamada y caminó en dirección a su recámara, ignorando el tema anterior.

Todos los presentes se quedaron petrificados observando como la chica caminaba perdida y sin prestar atención a nada.

Sus padres intercambiaron miradas pícaras un par de veces con su hijo.

Pov Tomás

-Al fin pude invitarla...- dijo para si mismo mientras mantenía su móvil agarrado en su pecho.

Julieta le pasó la dirección del hotel donde estaba, le dió indicaciones de como entrar y la hora exacta.
Tomás la llevaría al restaurante que solía frecuentar con sus padres cuando estaban aún casados. Cuando todo era perfecto.

8:00 pm

Ya era hora, Tomás se vistió cómodo, pero no tan informal, según él.
Llevaba unos pantalones de jean color beige, y una remera lacoste azul oscuro.
Llevaba superstars blancas con negro y calcetines también blancos.

Tenía 14 años apenas, y ya poseía un Mercedes Benz Slk blanco. Lo había recibido por su cumpleaños el año pasado.
Su padre era un gran fan de los autos, así que el aprendió a conducir a los 7 años y como su padre era muy rico y famoso, obtuvo su licencia a los 10. Algo que cualquiera envidiaria.

Los mejores perfumes, los de mejor calidad, los tenía su padre.
Caminó rápido hacia la habitación de este, cuidando que nadie le viera, ya que iba a salir sin autorización, poco le importaba tenerla, a nadie le importaba en realidad.
Estaba poniéndose perfume tranquilamente, canturreando una canción mientras lo hacía. Todo estaba bien, hasta que de casualidad, la mesa de luz que siempre se encontraba bajo llave, estaba abierta.
La curiosidad le ganó, quería saber que escondía ahi.
Rebuscó unos instantes, nada parecía llamarle la atención, hasta que vió una caja de cigarrillos. Lo cual le pareció raro, ya que su padre no fumaba, al menos no parecía.
Tomó una foto, y se metió 2 de estos al bolsillo, como evidencia.
Tomás era muy investigador y siempre hacia lo posible por constatar sus palabras, o posibles ridículos casos.
Salió de su casa, buscó las llaves de su auto,y caminó hacia él , bajo la atenta y curiosa mirada de su padre que le ponía incómodo.
Para su suerte, este solo se limitó a mirar junto a su auto, mientras jugueteaba con las llaves del mismo.
Se subió a este, y condujo hacia el hotel de la castaña que seguro le estaba esperando fuera por su demora.

Cuando al fin llegó, vió a Julieta que permanecía sentada junto a una fuente, distraída, como siempre.
Se veía hermosa, llevaba unos jeans rasgados en ambas rodillas, una remera femenina color rosa bebé y unas AllStars blancas.
El hotel era hermoso, poseía de una sencilla pero bonita entrada.

Tomás hizo sonar la bocina de su coche llamando la atención de la castaña.
Estaba estupefactada, nunca imaginó a Tomás manejando-ella pensó que la vendría a buscar caminando- y menos en semejante vehículo.

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