¿Eres real? « TaeYong & Lisa. » [EDITANDO]

‹ Capítulo 2.›

Las dos chicas llegaron a una de las mesas al aire libre y tomaron asiento.

- Creo que pasaste algo mal tus primeras horas. - dijo Rosé.

- Bueno, no lo sé. - Miró a su costado y rió de forma ligera.

- TaeYong a veces es así, dicen que tiene problemas. - señaló su frente. - No lo conozco mucho porque es muy frío y apartado. Sus recesos los pasa... Uhm... Creo que en un lugar secreto. Y su único amigo es JaeHyun, pero es mi novio. -

- Oh... Vaya, ¿qué tendrá? - cuestionó. - No lo sé, pero siempre habla de su amiga imaginaria, hasta la dibuja. -

- Seguramente tuvo una infancia difícil. -

- A lo mejor. - JaeHyun se acercó abrazó a Rosé por detrás y besó su mejilla. - Hola, linda, no tuve la oportunidad de saludarte en clase. -

- Hola, Jae, creo que ya conoces a Lalisa. - respondió Rosé.

- Ah, hola. - saludó con una sonrisa en su rostro. - Pueden llamarme Lisa. - dijo ella.

- Entonces Lisa. - volvió a hablar JaeHyun.

El timbre para entrar a clases estaba sonando y varios alumnos se iban yendo a sus aulas.

- En el próximo receso, ¿cómemos juntos? - cuestionó Rosé, Lisa y JaeHyun aceptaron y se levantaron para ir a clase.

Toda la clase TaeYong se encontraba picado en su cuaderno, a cada rato miraba a Lisa con concentración y a veces ella lo cachaba.

/.../

El día lo había pasado y ahora Lisa ya estaba en casa, como era costumbre su hermana y su madre no estaban.

Su teléfono comenzó a vibrar y era Kunpimook, el mejor amigo de Lisa; ella no dudó en responder.

- Hola, ¿cómo te va en Corea? -

- Raro. Hay un chico que me odia, lo peor es que se sienta junto a mí. - dijo ella entre risas.

- Está pasado, pero adivina, yo igual tengo un amigo super genial, se llama Jackson y es un chino, ¡un chino!, ¿no es emocionante? - comentó emocionado.

- Es genial pero TaeYong no es mi amigo. -

- Ah... ¿Con que TaeYong?... Ese nombre es de chico fuerte que te golpea si lo haces enojar. -

- Casi me golpea, Mook. -

- ¿¡Qué!?, como me dan ganas de golpearlo. -

- Tranquilo, todo va a estar bien, no me hizo nada hoy. Aunque dijo que soy rara. -

- No hagas caso, Lisa, ya verás que te dejará de molestar. -

Lisa suspiró. - Cierto, espero que te cuides, ah, y que te vaya bonito con tu taiwanesa. - Kunpimook se sonrojó.

- Debo de colgar, ha llegado. Nos vemos, Lisa. - él colgó y ella se tumbó en su cama y suspiró de nuevo.

Una pregunta no dejaba de pasar en su cabeza, ¿por qué TaeYong le odia?, apenas lo conoció y con solo verla conpletamente ya la odia.

¿Tiene mal estilo?, ¿acaso a los chicos en Corea no les gusta las chicas de cabello corto y con flequillo?, ¿no le gustaba el suéter rosa que llevó?, ¿o acaso a TaeYong le parecía fea?

Pensándolo bien ahora, apenas está comenzando, tal vez era cuestión de que pase tiempo.

Después de un largo rato de ver al techo, ella se levantó de la cama y fue a la cocina para almorzar, en ese momento se llevó un susto.

- ¡Hola, Lalisa! - dijo su hermana mayor casi gritando, haciendo que la menor derramara un poco de jugo en la mesa.

- Ay, Elisa, no me asustes así... - su hermana se encontraba ríendo por la reacción de la rubia, luego suspiró. - Estabas tan concentrada que quería asustarte, no sé que te distrae. - Lisa no respondió, comenzó a limpiar la mesa y dejó su vaso frente a su asiento, luego comenzó a servirse un delicioso plato de fideos.

Elisa rompió el silencio. - Oye, ¿cómo te fue en la escuela? - cuestionó su hermana mientras se servía su plato de comida.

- Raro, hay un chico que me odia, pero tengo una amiga nueva, su nombre es Rosé. - respondió ya sentada mientras comía.

- Rosé, que nombre mas raro... - Lisa sonrió y miró a su hermana. - Tu nombre Tailandés es Siriporn. -

- ¡Oye!, por una razón nos quitamos los nombres Tailandeses, Pranpriya. - respondió su hermana enfadada, a la menor le causó gracia y siguió. - Seguro, Siriporn. -

- Bueno, sigue hablando sobre el chico. - la castaña tomó su jugo y comenzó a beber de él.

- Ah, sí, se viste de negro, no sé si es así normalmente o solo por hoy, su nombre es TaeYong... - Elisa escupió el jugo en la mesa, a lo que a Lisa le pareció muy raro.

- ¿TaeYong, dices? - Lisa subió y bajó la cabeza de forma lenta. - Vaya, que lindo nombre, ¿y qué mas? - esbozó una dulce sonrisa.

- Bueno, es un poco agresivo, casi me golpea, dice que yo soy mala y en las clases me ve raro, no dejaba de observarme, como si me conociera. -

- ¿Con qué se la pasaba mirándote? - Elisa sonrió de forma coqueta. - Apenas llegamos a Corea y ya alguien se atrajo de ti, ya era hora, Lalisa. - Lisa se sonrojó e hizo rostro de puchero. - Seguro estaba pensando la forma en la que me asesinará. - cubrió su rostro y se quejó. - Ojalá que deje de ser así. -

- Exageras, es el primer chico que se atrae de ti, a menos de que haya otro que no me hayas contado. -

Lisa se molestó y al tomar un trago de su jugo miró fulminante a su hermana. - No hay otro y no le gusto, Elisa, entiende. -

Se escuchó el sonido de la puerta abrirse y después cerrarse, era su madre regresando del trabajo. - Ya llegué, mis niñas. - Dijo la mujer desde la sala, luego se dirigió a la cocina.

- ¡Mamá!... - Llamó Elisa y miró por un momento a la menor. - ¡A un chico le gusta Lisa! - Lisa rodó los ojos y masajeó su frente.

- ¿En verdad?, ¿como se llama? - cuestionó la madre de las jóvenes.

- En primera, no le gusto y me odia, y en segunda, es un chico que se viste de negro, tiene el pelo negro y piel de fantasma el cual se llama TaeYong. -

La madre de las chicas abrió los ojos como platos al oírla, ¿acaso era el amigo imaginario de Lisa en versión de 17 años?, no podía ser, sería imposible.

- ¿Mamá? -

- Él no es para ti, no quiero que te juntes con él. -