‹ Capítulo 50. ›

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En la habitación solo se escuchaban los jadeos de la pareja, el resto de la casa era silencio.

Eran las 9 de la mañana de un domingo y TaeYong tenía ganas de Lisa.

"Ding dong" sonó el timbre de la casa.

— TaeYong, tocan la puerta. — Dijo Lisa al alejarse de los labios de su pareja.

El timbre volvió a insistir.

— Deja al timbre sonar. — Dijo TaeYong con su voz gruesa que había despertado hace unos minutos.

— Creo que si ignoramos la puerta te molestaría. Sabes que la gente insiste si es algo importante. —

— ¿Prefieres atender la maldita puerta que estar conmigo? — demandó TaeYong haciendo reír a la menor.

— El timbre no ha dejado de sonar, quitate de ensima para que vaya a atender. —

— No, iré yo. No quiero que te vean en ropa interior. — TaeYong se levantó de la cama y volvió a ponerse sus pantalones.

Quejándose se dirigió a la entrada. No le gustaba que interrumpieran sus cosas, y si a la puerta hablaba alguien que no valiera la pena lo golpearía.

Lisa de inmediato se había levantado y se puso la camiseta de TaeYong que estaba tirada en el suelo, luego corrió a la sala.

— ¿Por qué no haz abierto?, ¿el sonar del timbre no te harta? — le preguntó al pelinegro.

— Ya, ya voy. — TaeYong abrió la puerta. Suspiró pesado al ver que se trataba de la china que mas odiaba.

— ¡H-hola, TaeYong! — Saludó Kyul con nervios.

— ¿Qué quieres? — preguntó TaeYong.

— Vine a verte. — Dijo Kyul una dulce sonrisa en su rostro.

— ¿Cómo diablos viniste a verme si ni te di mi dirección? —

— ¿No puedo venir a verte? —

— No, porque es descortez que vengas sin mi consentimiento, puedes interrumpir cosas importantes. —

Kyul cruzó los brazos y miró a TaeYong y a Lisa detenidamente. Ya había notado que TaeYong quería pasar un buen rato y que ella "lo rescató".

— Sí, se nota que la ibas a pasar muy bien. — Dijo Kyul con disgusto.

— ¿Solo viniste para molestar? —

Lisa tomó el brazo de TaeYong y le dijo. — TaeYong, ¿quieres que te traiga una playera? —

— No, gracias. Quiero que vea todo lo que es tuyo y que no te lo puede arrebatar. — Lisa cubrió su misma boca, se sorprendió.

Era ese momento incómodo en el que ella debería sentirse celosa y cerrar la puerta para luego tirarse a TaeYong como se debe, pero ella no era así, ella no sabe como comportarse en ese caso, tanto que buscaría en el internet "¿cómo debo reaccionar cuando llega la ex de mi pareja a rogarle a mi hombre?".

Kyul se sentía indignada. — ¡Al menos yo no embaracé a tu ex novia! —

— Como fuiste a la última que terminé no me atrevería a embarazarte. — Se defendió.

— ¿Admites que embarazaste a JiYeon? — Kyul sonrió pícara.

— ¿¡Tienes un hijo!? — Le preguntó Lisa a TaeYong.

— ¡No tengo un hijo!, Kyul, ¿cómo sabes de JiYeon? —

— ¡Porque nunca terminamos!, ¡te investigué todo este tiempo hasta que me aburrí y vine y te encontré con esta tabla pelos de zanahoria! — Apuntó a Lisa.

— ¡Suficiente! — Gruñó antes de golpear a la castaña, pero Lisa lo detuvo. Suspiró. — KyulKyung, no entiendo tu maldito comportamiento, tú te fuiste a China dejándome aquí sin decirme absolutamente nada, ¿como no te odiaría?, ¿quién no odiaría a alguien lo abandonó? —

— Por eso vine para hacerte feliz y vivir como tú lo querías, siempre juntos. — ella abrió su bolsa y sacó dos flores. — Te traje flores, las pinté de negro, como te gustan. —

Lisa aguantó carcajearse.

— No, Kyul. Gracias pero no, yo ya te dije que no te quiero, vivo feliz con mi pareja; entiende que lo nuestro fue algo de adolescentes, teníamos 15 años, no quiero nada contigo y menos después de que llegaste a intentar destruir mi vida. — Tomó la perilla de la puerta. — Lo siento, pero te guste o no deberías conseguirte a alguien que en serio no dejes ir, ¿por qué no intentas conquistar a Kun?, siempre están juntos, igual si no lo quieres a él tiene varios amigos chinos que te podrían gustar. Buenos días. — y lentamente cerró la puerta.

Una lágrima recorrió la mejilla de la castaña, con el pasar de los segundos fueron varias las que salieron. Puso su mano en la puerta porque iba a tocar, pero se había dado cuenta de que no servía para nada hacerlo.

Kun se acercó y tomó el hombro de Kyul.

— Tonta, debiste dejar a Jimin trabajar, lo sabes bien. Nos van a cagotear bien bonito. — Le dijo con una leve sonrisa en su rostro.

— Creía que si llegaba a su vida de nuevo vendría a mí, siempre supe que jamás me superó como yo a él, pero me equivoqué... — secó sus lágrimas.

Kun antes de decir algo sintió el vibrar de su teléfono en la bolsa de su pantalón, lo sacó, lo desbloqueó y vio que le había llegado un mensaje de DoYoung.

KimDo.
Jimin los necesita ya, quiere noticias, se ha vuelto loco. Dijo que si no avanzaron nada tendrá que usar altas consecuencias.

Kyul alcanzó a ver y leyó el mensaje. — Vamos a morir. —

— No creo que Manoban nos mate por la misión de JaeJoong, a los que mataría es a los que están con YoonGi. Anda, vamonos ya. — tomó su mano y cruzaron la calle para subir al auto e irse al edificio de su trabajo.

¿Eres real? « TaeYong & Lisa. » [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora