Capítulo 46.

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- Creo que es el mejor momento para venir a ver juntos a mi hermana, ¿no crees, cariño? - dijo Lisa mientras ambos caminaban tomados de la mano.

- Y creo que es el mejor día para caminar juntos. - Dijo TaeYong con una leve sonrisa dibujada en su rostro.

Era domingo, las cosas entre Lisa y TaeYong habían mejorado, el día anterior la habían pasado de maravilla, ambos sentían su amor fluir por esa casa, y por más que a TaeYong le empalagara ser así, amaba darle todas las muestras de afecto que podía a su pareja.

Elisa aún no respondía las llamadas, por eso decidieron ir a verla hasta su casa.

- Amor, una pregunta. - Dijo TaeYong. - ¿Qué hace tu hermana metiendo maletas a su auto como loca? -

— ¿De qué hablas? — Lisa al verla aceleró más el paso, cuando estaban frente a ella se detuvieron. - ¿Qué haces? - preguntó Lisa bastante preocupada.

Elisa cuando los vio detuvo su actividad y sonrió molesta.

- ¿Qué hago?, ¡me alejo de ese imbécil! - Apuntó a TaeYong.

TaeYong ascendió las cejas, aparte de que lo habían hecho enojar estaba sorprendido. — ¿imbécil?, ¿qué diablos he hecho para que me digas así? —

— ¡No finjas más! — tomó los hombros de Lisa. — Alejate de él si no quieres sufrir, ha hecho las peores cosas y yo no quiero que sufras con él. — Antes de que Lisa dijera algo Elisa la soltó y metió las últimas maletas por el maletero del auto y entró al vehículo, para después irse a toda velocidad.

No sabían que decir, y más Lisa, que no sabía que le había pasado.

Lisa volteó y observó a TaeYong, como si jamás lo hubiese visto.

— ¿Crees que hice algo?, he estado contigo desde el viernes que llegué de trabajar, tú haz dicho que sientes mis brazos abrazarte al dormir, ¿crees que pasó algo entre tu hermana y yo? — preguntó TaeYong.

— Te creo, pero es que... Me da curiosidad saber que le pasó, me gustaría saber a donde va. — Dijo Lisa mientras veía la calle.

TaeYong no pudo evitar sentirse mal, un dolor en su pecho se había manifestado, sabía que Elisa era la única que le quedaba a Lisa y ahora es solo él, por nada en el mundo la dejaría sola en ese momento.

— Ven, ven. — La llamó haciendo ademanes. Lisa se acercó y lo abrazó, TaeYong correspondió era lo que los dos necesitaban. — Aquí estoy, aquí estuve y aquí estaré. — Besó su cabeza.

— No voy a llorar. — Mintió Lisa, en ese momento se encontraba llorando.

Era el momento en el que se pondría a pensar todo. Su madre seguramente si se enterara de todo no diría nada, pero una madre cualquiera no dejaría ir a sus hijas fácilmente; ¿nunca le importó a su madre o simplemente la dejó ir para que Lisa no se sintiera mal?

Apretó más el abrazo. — A mi madre no le va a importar esto. — Dijo entre sus sollozos.

— Pero a mí si me importa, yo soy tu pareja y todo lo tuyo es mío. — Tomó sus manos y las acercó a sus labios para besarlas. — Yo sé que algún día nos vamos a enterar de todo lo que está pasando. ¿No te gustaría ver a mi familia o ir a comer donde Johnny? —

— Creo que sería mejor ir a donde Johnny. — Dijo Lisa cuando comenzó a secar sus lágrimas con una mano.

Luego de un momento de silencio se fueron caminando a la cafetería donde trabaja Johnny.

Cuando llegaron todo estaba vacío, algo que le pareció raro a TaeYong a esas horas de la mañana.

Johnny se encontraba sentado en una de las mesas, bostesando mientras esperaba a que llegara gente para atender.

— Buenos días. — Habló TaeYong. Johnny de inmediato se levantó y ese aburrimiento de la cara se volvió alegría.

— ¡Buenos días!, tomen asiento, todas las mesas están libres. — Dijo Johnny.

— Oye... Tranquilo. — tomó su hombro. — ¿por qué está todo vacío? —

Johnny suspiró pesado. — Nadie quiere trabajar aquí como mesero, yo soy el único que atiende desde que DoYoung y su otro amigo se desaparecieron. —

— ¿DoYoung? — preguntó TaeYong. — ¿Conoces a Kim DoYoung? —

— ¡Claro!, el trabajaba aquí con uno de sus dos amigos chinos, pero ya casi ha pasado un año desde que se fueron y nadie ha querido tener su puesto desde ese entonces. — Dijo Johnny.

—Un momento... — TaeYong se dirigió a Lisa. — ¿Te acuerdas de cuando JaeHyun nos contó lo de DoYoung? —

Lisa asintió. — Sí, desde el día que nació el sobrino de SiCheng no se supo nada de él, luego días después se salieron de la escuela y JaeHyun encontró que en su casa no había nada. —

— Sea lo que sea, me hacen falta esos chicos, eran buenos trabajadores y buenos amigos. — Dijo Johnny ahora entristecido.

— Tranquilo, mira, te invitaré el desayuno, comemos los tres ya que no hay nadie, ¿qué dices? — Dijo TaeYong mostrándole una cálida sonrisa a Johnny.

Johnny sonrió iluminado. — ¡Oh, gracias! —

— Para nosotros lo de la última vez y tú escoje lo que quieras. — Continuó TaeYong, Johnny asintió y se fue a la cocina para dar la orden.

Lisa y TaeYong se dirigieron a una mesa y tomaron asiento.

— ¿Conoces a los que trabajan aquí? — Preguntó Lisa.

— Sí, solo son cuatro empleados, tres en la cocina y Johnny mesereando. En la cocina son puras chicas: EunBin, JeongHwa y YeEun. YeEun no estudiaba en nuestra escuela pero decían que ella estaba perdida en DoYoung, de tanto que conozco este lugar lo recuerdo, ¿sabes? — Johnny regresó con las ordenes.

— Ya he regresado. — Johnny se sentó al otro lado de la mesa.

— Oye, Johnny, ¿y EunBin?, a veces se asomaba por aquí y ya no la he visto. — Dijo TaeYong.

— Ella igual desapareció, pero en su lugar llegó tu bebé. — Dijo Johnny con una sonrisa al final.

TaeYong rodó los ojos y cubrió su rostro mientras se quejaba. — ¡Dime que me mientes! —

— No, no, es real. — Dijo Johnny mientras reía. — Aunque creo que ya te superó, ya no escribe tu nombre en los pasteles cuando nadie la ve. —

— ¡No puede ser! — Se quejó TaeYong mientras Johnny seguía riendo.

— ¿De quién hablan? — Preguntó Lisa.

— Ah, es que antes de llegaras había una chica llamada Yerim, es una cosita esa señorita; ella estaba enamorada de TaeYong, a tal punto que siempre lo esperaba en la salida de la escuela. Pero TaeYong casi la golpea y ella se fue llorando. — siguió riendo. — No sé como rayos pero está perdida en él, hasta con sus amgas decía que TaeYong era su novio... Es muy linda esa niña. — Tanto se había reído que comenzó a llorar.

— ¿Y Yerim sabe que tengo novia? — preguntó TaeYong.

— No. — negó Johnny.

— Johnny, una pregunta. ¿Crees que una embarazada pueda meserear aquí? — Preguntó Lisa.

La seriedad de Johnny poco a poco regresó. — Depende, ¿cuántos meses tiene? —

— Casi cumple los 6, pero ella hace de todo, yo creo que si te sería de gran ayuda. —

— Mañana tráela con todo y sus papeles. Saliendo de la escuela es la hora buena, así veremos si es de gran ayuda. —

¿Eres real? « TaeYong & Lisa. » [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora