Intercambio de Casa {Completa}

Capítulo 24: Caos y Pociones

*Alice POV*

Saqué mi varita del bolsillo de la túnica y apunté a Draco. Una pizca de miedo cruzó sus ojos mientras su mano se dirigía a su propio bolsillo.

-Ni se te ocurra.

-Alice...

-¿Cómo...?-comencé la pregunta, pero no hizo falta que la terminara porque Draco ya se estaba explicando.

-Reconozco la magia negra cuando la veo. También escuché a Granger decir que el embrujo ya debería haber desaparecido. Se que fuiste a la enfermería después de que te dijera que fue Marietta quien los delató. También noté la pérdida del control de tu magia esta mañana, con el incidente en el Gran Salón y luego recordé que tu familia tiene un historial de magos capaces de utilizar la magia oscura con propiedad y eficacia.-dijo, encogiéndose de hombros- Cualquiera que supiera lo mismo que yo lo habría adivinado. 

Agarré mas fuerte mi varita. Estaba impresionada, sí, pero eso no quietaba el hecho de que sabía lo que había hecho. ¿Había valido la pena? Claro que sí, lo haría de nuevo si tuviera que hacerlo. 

-Baja la varita. No planeo delatarte Alice, no soy así. No contigo al menos.- Draco me miró, como esperando que leyera la verdad en sus ojos- Quiero ayudarte, baja la varita.

-Estoy segura de que sí- le dije, bajando la varita lentamente pero sin guardarla- Pero no necesito tu ayuda.

-Alice...

-Es mi problema Malfoy, puedo resolverlo sola.

Draco quiso decir algo más, pero una sacudida en el castillo hizo que los dos nos ocupáramos de lo que pasaba alrededor. Miles de alumnos corrían asustados, todo era un caos. La profesora Umbridge pasó corriendo junto a nosotros con la varita en alto y le gritó algo a Draco, quien de inmediato decidió que debía seguirla. Los observé desaparecer por el pasillo y me di la vuelta para retirarme, pero alguien me lo impidió.

-¡Harry!- exclamé, al chocar contra él.

-¡Alice! Lo lamento, ¿estas bien? 

-Si, si. ¿Qué está pasando?

-No tengo idea, pero creo que si seguimos el ruido lo averiguaremos. ¿Vienes?

-Me encantaría pero tengo que hacer algo importante primero. ¿Podemos hablar después? Necesito contarte algo.

-Sí, claro. ¿No tenemos Transformaciones juntos? Tengo media hora libre antes de la clase.

-Bien. Te veo en el lago.

Harry sonrió y siguió corriendo, mientras yo hacía mi camino hasta la sala común. Quería ver que estaba pasando, claro está, pero tenía una poción que preparar y gracias a esta distracción la sala estaría vacía. Me acomodé en una de las mesas con todos los ingredientes y Jules a mi lado, para comenzar juntas a preparar la solución. 

-Ama Moon, Jules debe recordarle que tiene que asistir a sus clases. Jules puede terminar la poción para su ama si ella lo necesita. Jules se encontrará complacida de ayudar, señorita.

Miré la hora en el reloj de la pared. Había usado mi hora libre antes de Botánica para preparar el brebaje y aún me faltaba la mitad.

-No, está bien Jules. Hablaré con la profesora Sprout luego.

-Jules puede llevarle una nota, excusando a su ama. Jules puede decirle a la profesora que la señorita no se siente bien y que la disculpe por perderse su clase.

Miré a mi elfina con una sonrisa. La ventaja de que Jules hubiera crecido conmigo era que me conocía demasiado bien. Sabía perfectamente, por ejemplo, que jamás rechazaría una idea como esa. Asentí, indicándole que podía escribir la nota y seguí con la poción. Otro punto a favor era que Jules podía copiar mi letra a la perfección.

Pasé las siguientes dos horas batiendo la poción, dejándola reposar, agregando ingredientes extraños, midiendo todo dos veces y finalmente la terminé a tiempo para ver a Harry. Jules, quien había regresado lo más rápido posible, se quedó en la sala para poner el brebaje en botellas. Habíamos preparado una gran cantidad, para asegurarnos de que no me faltase ni un día.  Los ingredientes sobrantes los habíamos guardado en el baúl debajo de mi cama, seguros con magia de elfo.

-Hola de nuevo- dijo Harry cuando llegué a su lado. Me abrazó y nos sentamos junto al lago, donde se podían  ver fuegos artificiales con forma de dragón o de ruedas giratorias volar por todos lados.

-¿Esto era lo que pasaba?

-Los salvajes magifuegos Weasley. Fred y George de verdad se lucieron esta vez.

-Ya veo que sí. Umbridge debe estar como loca corriendo por todo el castillo, intentando apagarlos.

-Lo está. ¿No la viste? ¿Dónde estabas?

-¿Qué? Oh, si, eso. Bueno, yo... No importa. Quería advertirte sobre Umbridge.

-¿Advertirme?

-Me interrogó hace unas horas, antes del almuerzo. Quería que le dijera dónde está Dumbledore. Creo que va a interrogar a todos los miembros del ED y debes avisarles.

-¿Qué van a ser interrogados?

-Que las bebidas que te ofrece tienen Veritaserum, el suero de la verdad. 

Harry me miró, horrorizado.

-Casi tomo el té que me ofreció hoy- susurró, sin creerlo- ¿Cómo...?

-Tiene un olor muy dulce, lo cual indica que está mal preparada. No lo notarías si es té o café, pero en el jugo de calabaza... Bueno, digamos que era obvio. No sé que efectos tenga si está mal hecha pero pensé que debías avisarle a los demás, para que estén advertidos y puedan actuar.

-Claro, sí, gracias Ali.

Sonreí y miré mi reloj. La media hora casi terminaba, por lo que nos dirigimos de vuelta al castillo a nuestra clase. Mi humor mejoró considerablemente al notar que los magifuegos eran muy difíciles de controlar y que los profesores no parecían interesados en ayudar a la nueva directora.

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Por si a alguien le interesa, estoy escribiendo una historia original y me gustaría que le dieran una oportunidad. La pueden encontrar en mi perfil o en este link: http://my.w.tt/UiNb/HA0dr971qG

Espero que les guste el capítulo, gracias por leer :)