Seguía aun en la preparatoria, todas mis actitudes seguían tal como cuando inicie. Poco a poco comenzaron los problemas para mi, dado que una bola de resentidos que no podían superarme decidieron buscarme pleito, aun recuerdo sus nombres porque siempre solían pasar lista todos mis profesores, ellos eran: Jesús, Oswaldo, Erwin y Gerson, todos ellos se dedicaban a molestarme solo por llevar las mejores calificaciones y además por ser un tanto cuanto codiciado por las chicas de la prepa, de alguna forma todas sabían de mi, sabían que yo era el mejor de toda la escuela no solo en clase, sino también me volví excelente en los deportes tal como dije que lo haría.
Un día como todos, regresaba de la escuela cuando mis abusadores salieron de la nada y me acorralaron en un callejón por donde vive una de mis tías, venían a manipularme para que hiciera la tarea de ellos, yo solo les dije: "Si muy machitos son, los reto a que me enfrenten". Al momento que dije eso, Oswaldo me golpeo en el pecho, dolió un poco porque aunque no era un chico musculoso de alguna forma me había vuelto muy resistente. Me amenazaron con que me golpearían entre todos y estaba a punto de enfrentarme a ellos cuando de repente un compañero de mi salón les dijo que me dejaran en paz, entonces se fueron todos contra el, sabía que no debía involucrarme pero tenía el miedo de que le hicieran daño a mi compañero, así que por eso me animé a dar pelea junto con el, entre el y yo les acomodamos una buena golpiza, simplemente se limitaron a decir "esto no se quedará así" y posteriormente se fueron.
Tome mi mochila; la cual se había quedado en el suelo, entonces mi compañero se me acerco.
-¿Estas bien? -preguntó mientras levantaba mi mochila-.
No le vi la cara y me limité a decirle:
- Si, estoy bien.
-Me alegro - prosiguió para hacerme una plática- me alegro de haberte ayudado, por cierto me llamo Ulises.
-Entonces gracias Ulises - le dije sinceramente agradecido-.
-¿Cómo te llamas?
-Lawrence, mi nombre es Lawrence.
-Empecemos a juntarnos amigo, quizás nos llevemos bien.
-Quizás, o quizás ni siquiera podamos llevarnos bien- le dije y posteriormente me aleje de el.
Los días comenzaron a pasar y Ulises cumplió su palabra de juntarse conmigo, intenté hacer lo mismo de siempre pero no pude hacerlo, decidí no contenerme y poco a poco comencé a hablarle y a juntarme con el. Pronto descubrí que no fue mala idea comenzar a ser mas sociable con el, dado que compartíamos gustos musicales y también preferencia por distintas cosas como la lectura y las series de televisión; en pocas palabras hice mi primer amigo.
Con el tiempo llegaron las fiestas a la escuela, el día de la independencia, el día de muertos y navidad. Todo eso iba progresando poco a poco y mi amistad con Ulises también, se podría decir que por diversas razones comenzó a volverse mi mejor amigo dado que era la única persona con la que solía hablar mucho mas y era a el a quién le decía mucha cosas de mi.
Con la llegada de las posadas en navidad, tuve que convivir y ayudar. Hubo una posada en particular, una posada a la que me invitaron a la iglesia, me animé a ir y me la pase muy bien, entre tanta gente una chica llamada Areli Yaquelin decidió acercarse a mi, porque de alguna forma me vio como alguien muy especial, yo la vi y aunque no quería ni siquiera acercarme o decirle algo no pude evitar tener esas ganas de querer hablarle, pero por lo mismo de que yo no solía ni hablar con nadie pues decidí no acercarme, al final ella se acercó a mi y decidió hablarme y de una forma un tanto cuanto nerviosa le hablé (primera vez que decidí hablarle a una chica), fue un tanto cuanto raro, porque que no sabía responderle ni nada pero aun así nuestra conversación se hizo interesante y poco a poco comenzamos a volvernos amigos. Ella también parecía dañada al igual que lo estaba yo, pero ella estaba dañada porque su anterior pareja la engaño con otra chica y fue eso lo que le sucedía, así que de alguna forma le ayude a que lo superará pero no esperaba algo a cambio o que nuestra pequeña amistad creciera o fuese algo mas, pero entonces lo que no esperaba sucedió, ella se enamoró de mi y de alguna forma yo también sentía algo similar, de alguna forma quería estar con ella era inevitable y de alguna forma yo también me enamoré de ella y decidí hacerla mi novia, pasamos tanto tiempo juntos, idas al cine, salidas al parque o sino a pasear por ahí. Un día decidí invitarla a casa a que viéramos películas, así fue, pero mientras veíamos una de mis favoritas, ella me hizo una confesión.
-Oye Lawrence.
-Amm ¿qué sucede? -dije muy dudoso porque no sabía qué quería-.
-Llevamos bastante tiempo saliendo, y pensaba que tal vez tu y yo podríamos...
-¿Si?
-¿Podríamos tener tu y yo nuestra primera vez?Esas palabras me hicieron entrar en conflicto, jamás me habían pedido algo así a mi edad (15 años), aunque por mis principios solo respondí lo que creía correcto:
-Creo que aún no es tiempo, no es que no quiera, es solo que no siento que sea el momento para hacerlo, te agradecería si entendieras.
Ella parece que no lo tomo muy bien, porque puso en parte una mirada un tanto cuanto decepcionada, pero di por hecho que entendió.
Sin embargo, no tome en cuenta si reacción.
Un día me invitó a que fuera a su casa a conocer a sus padres y accedí a ir.
Todo el viaje ella iba muy pegada a mi y decía lo mucho que me amaba. Llegamos a su casa y todo estaba increíble, ella me invitó a pasar a su cuarto y así lo hice, pase y ella me sentó en su cama, me vendó los ojos y dijo que sus padres querían estar frente a mi, me dio un vaso de agua, supuestamente como un momento de espera, lo bebí casi todo y comencé a sentirme mareado y sin darme cuenta caí dormido en su cama. Desperté y de la nada no podía moverme, pero sentía como el aire pasaba por todo mi cuerpo, como si estuviese desnudo, intente moverme pero estaba amarrado de pies y manos a una cama.
-Valla, parece que ya despertaste -dijo una voz, sin duda alguna era Yaquelin-.
Quería salir corriendo porque no tenía un buen presentimiento, pero antes de hacer o decir algo ella se acerco a mi y puso su cuerpo sobre el mío, comprobé que ambos estábamos desnudos y eso solo significaba una cosa (íbamos a tener nuestra primera vez), ella tocó todo mi cuerpo y sin darme cuenta ella unió nuestros cuerpos con el acto sexual, tuvimos sexo y ella lo disfrutaba, yo estaba sufriendo por dentro, solo me decía a mi mismo: "¿Por qué a mí? ¿qué hice yo para que me hagan esto?, alguien por favor, ayúdeme".
Después de que lo hicimos, ella simplemente me volvió a dormir y cuando desperté estaba en un sofá igual en su casa, ella me dijo que lo disfruto mucho y que quizás debíamos hacerlo mas veces, yo solo no respondí ni dije nada.
Paso el tiempo y de alguna forma pensaba: "Ella ya hizo lo que quería, supongo que es suficiente para que podamos estar juntos", sin embargo me equivoqué, al cabo de unos días de nuestra primera vez ella se alejó de mi mi, y nunca más volví a saber algo de ella, lo lamentable fue que tuve mi primera vez y todos mis sueños de casarme y demás habían terminado, me los habían robado y sentí que desde ese momento nada volvería a ser igual.
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P.S Te Amo
Teen FictionYo era de una forma hasta que te conocí. Acompañemos a Lawrence en su historia que comenzó de una forma, prosiguió de forma diferente y terminó igual que en el principio. Reiras, recordarás, llorarás y sin duda alguna vas a querer más. Espero que...