Papelitos

Tiempo que vuela

El lunes tuve la misma rutina de siempre.
Y por muy raro que suene, las clases fueron divertidas al igual que las horas de descanso, y el día se fue en un abrir y cerrar de ojos.

Todo iba normal, lo único que faltaba era el típico papel de parte de Kirishima, pero eso no me preocupaba.

— Bien, chicos es todo por hoy —. Dijo Aizawa-sensei dando por finalizadas las horas de clase. — ¿Quienes serán los voluntarios para la limpieza de hoy? —.

Siempre hacía esa pregunta al terminar el día. Y nadie - incluido Iida - levantaba la mano, porque a nadie le gustaba quedarse después de clases y limpiar, así que él los elegía al azar.

— Yo lo are —. Dijo de repente Kirishima dejando a todos con cara de asombro. Me apareció una tontería de su parte ¿quién se ofrecía para limpiar la clase?, estaba loco. — Kaminari y Bakugou me ayudaran —.

— ¡¡¡MUERETE BASTARDO!!! —. La cara de Bakugou era de total enfado, parecía que en cualquier momento saltaría al cuello de Kirishima.

No pude evitar reirme. — Espera... —. Pero todo perdió la gracia muy rápido cuando me di cuenta que también había pronunciado mi nombre. — ¡¿QUEEEÉ?¡ ¡¿YOOO?! —.

Vi la cara de un Kirishima muy feliz, demasiado feliz para mi gusto.

Las risas de los demás no tardaron en llegar.

— Vamos chico, será divertido —. Dijo Kirishima emocionado. Como si limpiar fuera lo mejor del mundo.

 —  A mi no me metas en tus mierdas —. Gruñó Bakugou con su ceño aun más fruncido de lo normal . — Es tu jodido problema si quieres barrer y pasar más tiempo aquí junto al otro idiota —.

Los demás seguían riendo, Mineta y Sero eran los que más disfrutaban esa situación.

No reclame nada, solo veía las caras de los demás. ¿Qué iba a decir?, por mi cabeza solo pasaba la palabra "TRAICIÓN", así, en grande.

— Entonces esta decidido, Kirishima y Kaminari aran la limpieza hoy —. Dijo Aizawa-sensei con voz contundente y todos pararon de reír.  — Los demás ya se pueden ir a sus casas —.

Todos empezaron a recoger sus cosas y me dedicaban palabras de apoyo.

— Kaminari-Kun, te ayudaría pero los chicos me están esperando —. Dijo Midoriya mirando a sus dos inseparables amigos que lo esperaban en la puerta.

— No te preocupes, y otra vez gracias por lo del sábado-... —. De repente sentí que alguien colocaba su brazo al rededor de mi cuello y me atraía hacia su cuerpo. 

— Kaminari ¿comenzamos a limpiar? —. Esa voz era inconfundible, miré hacia un lado y tal como pensaba era Kirishima quien me tenía abrazado. — ¡Midoriya! —. Dijo como si se acabara de dar cuenta de que estaba delante de nosotros. — Creo que te están esperando tus amigos, deberías ir con ellos —.

 — Sí, es verdad, hasta mañana chicos —. Se despidió.

Midoriya fue el ultimo en salir y Kirishima no se había separado de mi, estaba notoriamente contento.

— Bien, todos se han ido —. Dije quitando su brazo de mi cuello. — Hagamos esto rápido —.

— ¿Estas molesto conmigo? —. Dijo quitando su sonrisa.

— Claro que lo estoy ¿cómo se te ocurre arrastrarme a esto?. Hoy comenzaba la segunda temporada de mi serie favorita Kirishima —. Dije disgustado.

— Mira el lado bueno... —. Me guiñó un ojo. — Estas conmigo —. No pude evitar reír por lo que dijo. Era un completo idiota soltando comentarios como si nada.  — ¿Por cierto que hiciste el sábado con Midoriya? —.