La retorcida mente de Bakugou - KatsuDeku

9. ¡Sorpresa!

Al día siguiente, mientras Midoriya ve las nuevas noticias y vídeos sobre héroes en su ordenador tranquilamente, un mensaje le llega al móvil: es Bakugou. Se sorprende gratamente. Hace tiempo que se intercambiaron los números, pero no esperaba recibir un mensaje suyo.

"¿Podemos vernos hoy?", dice el mensaje de texto.

Midoriya ni siquiera tiene tiempo a pensar y se da cuenta de que ya le está respondiendo. Se pregunta por qué querrá verlo, pero una parte de él, sea cual sea el motivo, tiene muchas ganas de que se encuentren.

"Claro"

No le pregunta la hora y el lugar, porque supone que ya se la dirá el propio Bakugou. Inquieto, sigue jugueteando con el móvil. En ese tiempo, le llega también un mensaje de su amiga Uraraka, e iconscientemente piensa en el rostro de la chica y sonríe. ¡Tan mona!
Hablan durante casi veinte minutos, hasta que Uraraka le dice que tiene que irse para ayudar a su padre en el trabajo.

Cuando ya no habla con la chica, de pronto vuelve a sentirse nervioso. ¿Por qué Katsuki no le contesta? ¿Ya no quiere que se vean? Decide enviarle otro mensaje para concretar las cosas.

"¿A qué hora y dónde?"

Sigue sin tener respuesta.

"¿Kacchan?"

En ese instante ve en la pantalla la notificación de un nuevo mensaje. Lo mira rápidamente: Bakugou.

"¡No!"

¿No? A continuación, un montón de letras y palabras sin sentido siguen a esa negación.

"¿Kacchan? ¿Qué pasa?"

"En cinco minutos, en la puerta de tu casa"

La respuesta le pilla por sorpresa de nuevo, además de que aún no comprende el por qué de ese "no" tan efusivo. No obstante, decide no dudar de Kacchan y se prepara para salir de casa. Su madre ha ido a comprar, así que nadie les molestará.

Está un poco nervioso, lo admite. No sabe por qué, pero quiere causar una buena impresión en ese chico. Se peina como puede y se mira repetidas veces en el espejo. Al final, da un suspiro y sale.

—¡¡Midoriya!!

Esa chica, esos ademanes, la forma en la que se le tira encima y le da un gran abrazo...Lleva ropa distinta a la última vez que la vio, más coqueta, pero la reconoce enseguida: Toga Himiko, de la Liga de villanos. La primera vez que se encontraron, Toga se enamoró de él al verle lleno de heridas.

Se aparta de ella como si le fuera la vida en ello. Toga no para de sonreír y de acercarse a él. Sus ojos son muy grandes, como los de Midoriya, pero el chico ve en ella algo que no le gusta en absoluto. Puede ser...

—¿Vienes a matarme?

Toga ríe y lo vuelve a abrazar con fuerza. Esta vez, Izuku no es capaz de zafarse de su agarre.

—¡Por supuesto que no! ¡Te quiero taaaaanto!—Por extraño que parezca, no vacila: lo dice en serio—Solo te haré un poco de daño. Algunos cortes por aquí —señala su mejilla—aquí...—su brazo—y...

—¿Dónde está Kacchan?—Izuku la interrumpe. La preocupación le invade por completo y se olvida de la cercanía de la chica y de lo que sea que vaya a hacerle.

—Oh, ¿Katsuki? No te preocupes, está a salvo conmigo. ¡He venido por mi cuenta solo para verte!

—¡¿Dónde está Katsuki?!—esta vez grita, y a Toga le da un escalofrío de puro placer.

—Parece que te preocupa mucho ese chico. Lo tendré a mi lado para que tú no te escapes. ¿Qué te parece?—le agarra de la mano con fuerza y comienzan a caminar.

Midoriya solo piensa en Katsuki, en llegar hasta él y salvarlo cómo sea. Sigue a Toga, esperando ponerse en acción cuanto antes...

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Aquí escribiendo en el bus. Espero que os guste, y no os olvidéis de comentar vuestras opiniones ^^