Hasta me siento mejor sin ni siquiera saber muy bien cómo. Puede que aquello de lo que tantas veces rehuí haya vuelto a mí, provocando esa sensación de poder, de energía e ilusión.
Ahora es una de esas veces que me concentro mis esfuerzos en escuchar todo lo que sale de tu boca y mente. Parece idiota pensar que puedes haber vivido engañado toda tu vida y sin haber dado cuenta de lo que mereces: ser feliz.
Ahora eres igual, pero sin ser lo mismo antes visto, con tu modo único de burlarte de lo cotidiano, el parecer idiota, sin serlo. El aparentar lo contrario a lo que se es, pero al revés. El ser feliz, sin tenerte a mi lado, aunque quiero decir de momento; si, hasta que toda esa distancia habida y poder haber se rompa con una caricia y un beso.
YOU ARE READING
El patito que nunca llegó a ser cisne
RandomEs te libro no es prosa. no es normal ni pretende serlo. No es ficción ni llegará jamás a ser poesía. Porque no quiero llevar el peso de ser poeta a mis espaldas, si no puedo a veces siquiera llevar el de ser un referente para algunos, ya que en oca...
