• CUARENTA Y NUEVE •

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Las cosas pasan por qué si.

Volviendo la mirada hacia atrás, veo un camino lleno de piedras y pozos que yo solita hice. Y que yo sola tuve que esquivar.

Ese es el camino que decidí elegir.

¿Hubiese elegido otro camino? Pues claro que si.

Pero gracias a que elegí el camino fácil, me conoci.

Toque fondo muchas veces. Muchas veces Martín fue mi pañuelo de consuelo, yo solo le escribía y él dejaba todo lo que hacía para consolarme.

Muchas veces intente suicidarme, pero nunca tuve el valor suficiente para también terminar con mi vida.

Hubo un día que por cosas de la vida empecé a necesitar estar bien. Conseguí un trabajo, borre su numero y evite a toda costa transitar los mismos lugares que el suele concurrir.

Viaje.

Me nutrí de nuevas culturas.

Empecé a conocerme y ser INDEPENDIENTE.

Así dure dos años.

Hasta que un día, borracha, encontré su numero en mi WhatsApp. Y le escribí.

Al mes nos volvimos a ver. Salíamos como dos grandes amigos.

Recorríamos bares, mirábamos obras teatrales, escuchábamos bandas. Caminábamos por ahi.

Hasta que un día...

Hasta siempre. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora