Siénteme [JINKOOK]

Siénteme: parte L

Ese fin de semana YoonGi se presentó en su casa de la mano de su omega.

Tal y como le había pedido su padre tenía que estar a tiempo para conocer a la omega que este le presentaría.

Claro estaba que iba con su novio para mostrarle a su padre que había marcado al amor de su vida y que jamás podría separarlo de su pequeño.

Su madre abrió la puerta, sorprendiéndose al detectar al instante la marca de JiMin, mas no dijo nada y simplemente dejó que ambos pasaran hacia el comedor donde el señor Min junto a un matrimonio y su omega esperaban hablando amenamente.

Cuando su padre lo miró rápidamente se molestó al detectar que su pequeño lo acompañaba.

-Creí haberte dicho que sólo quería verte a ti, YoonGi.

-Y yo recuerdo haberte dicho que no me casaría con ninguna omega porque amo a JiMin.-con seguridad sostuvo de la cintura al pequeño.

El alfa mayor se levantó de su asiento y caminó hacia su hijo mirándolo molesto, dispuesto a desafiarlo para que lo obedeciera. Pero en cuanto estuvo cerca notó la marca en el hombro del omega y entonces su enojo aumentó.

-¿Qué hiciste, Min YoonGi?-preguntó entre dientes.

-Marqué a mi omega, eso hice-respondió con seguridad haciendo que su niño se ocultara tras él.

-No lo puedo creer, Min YoonGi, no puedo creer que hayas elegido estar con ese omega fallado antes que con una omega que puede darte más de lo que ese pequeño engendro podrá.

YoonGi, gracias a la marca, detectó la tristeza del menor lo que generó que su alfa se molestara al instante.

-El único engendro aquí eres tú, maldito alfa descerebrado. A mi omega no le hablas así a menos que te guste quedarte sin dientes.

-YoonGi, ten más respeto a tu padre-intervino su madre.

-¡Pero hace sentir mal a Minnie, mamá!

-Tu padre sólo dice la verdad.

La decepción que reflejaron los ojos de YoonGi y JiYong fue claramente notable. JiMin bajó la cabeza sintiéndose triste ante la traición de su noona, la mujer que antes rogaba para que su hijo estuviera con él.

Haciéndose notar JiYong salió y encaró al desgraciado de su cuñado.

-Haz estado ausente durante catorce años de la vida de tu hijo y ahora que vuelves lo haces para manejar su vida a tu antojo cuando no tienes el derecho de hacerlo después de irte con la primera puta que se te cruzó dejando a tu omega marcada con tu hijo de un año. Eres una vergüenza para los alfas.