Siénteme: parte XVI

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-¿Puedes distinguir las letras?


-Mmm...sólo unas pocas...aquí esta la A...la E...y la L. ¿Son letras al azar?


Escuchó la risa del mayor.


-No, es una pequeña palabra. Confundiste la A con la D. Ahí dice  del.


-Ah...es difícil.


Llevaban cuatro clases particulares para que Kook aprendiera  a leer en braille. Solamente pasaban una hora juntos para que el omega aprendiera, aunque el 70% del tiempo solían hablar de diversas cosas.


En ese tiempo el chico había conocido más de Seok Jin que de las letras que debía aprender a reconocer. El mayor le había contado que amaba leer todo tipo de historias, pero que las historias de Stephen King eran sus favoritas. También amaba pasar tiempo en parques o cualquier lugar donde la naturaleza predominaba, a pesar de no verla le gustaba la tranquilidad que brindaba y el aroma agradable del aire puro. El aroma de las flores eran sus favoritas. También era fan de los días lluviosos y las canciones viejas. Eran cosas que compartían, cosas agradables que los hacían perder en conversaciones largas que los hacía olvidar de la razón por la que estaban ahí.


JungKook agradecía que al menos NamJoon tardaba más de una hora en sus clases particulares.


-JungKook ¿estás prestando atención?


-Oh, lo siento hyung, me quedé pensando.


-Está bien, solamente necesito que intentes reconocer que dice aquí.


El menor observó la hoja punteada, sus yemas jugando superficialmente, como si dudara en descifrar lo que tenía frente a sus ojos.


-No lo sé, Jin hyung. Mis yemas están cansadas, no puedo seguir leyendo.


El alfa rió enternecido.


-Pareces un niño pequeño haciendo berrinche-suspiró con una sonrisa y sacó la hoja-bien, descansa tus dedos unos minutos.-con suavidad pasó su mano por el dorso de la contraria.


JungKook no pudo evitar sonrojarse ante la muestra de cariño. Aun así no quitó su mano y dejó que la palma de Jin descansara sobre su dorso.


-Tienes las manos muy suaves-murmuró inconscientemente.


Al darse cuenta su sonrojo aumentó y terminó por quitar su mano avergonzado. Seok Jin sólo pudo reír entre divertido y enternecido.

Siénteme [JINKOOK]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora