Karen había terminado de preparar las pocas pertenencias que tenían, era tiempo de regresar a casa. No podían seguir recluidos en la estancia, tenían que regresar a su vida normal, o al menos intentar que lo fuera para Ámbar. Ella debía regresar a sus estudios, e intentarían convencer a Elena de que se quedara a vivir con ellos, porque aunque en el pueblo tendría mucha compañía, y personas que estarían atentas a ella, no querían dejarla partir sola.
Hacía unos cuantos minutos que había golpeado en la habitación de su hija sin obtener respuesta, no le gustaba entrometerse sin que ella la invitara a entrar, pero se hacía tarde, y deseaba llegar temprano a la casa para poner las cosas en orden. Al no recibir respuesta por tercera vez, abrió la puerta despacio. La habitación se hallaba vacía, sobre la cama un sobre. Karen lo abrió temiendo lo peor, conocía demasiado bien a su hija, sabía que llevaba su herencia en la sangre. No bajaría los brazos sin haber luchado antes.
Abrió el sobre, y antes de leer, comenzó a llorar.
"Mi querida madre:
Temo que sabrás que me he ido aun antes de leer, pero sé que aunque te sientas triste y temerosa por lo que pueda sucederme, entenderás que necesito hacerlo.
No te preocupes, intentaré tener cuidado y estar siempre atenta, llevo conmigo la cruz bendecida que perteneció a la bisabuela.
Por favor, no te enojes con Elena, pero ella viene conmigo, descubrió mis intenciones hace dos días atrás, quizás porque también esa era su idea.
Iremos a Irlanda, creemos que el pueblo donde ella nació será un buen punto de partida para nuestra búsqueda. Ninguna de las dos es capaz de quedarse sentada a esperar.
Necesitamos hallarlos y si es necesario pelear junto a ellos, esta también es nuestra guerra. Esteban no es sólo mi mejor amigo, él es más que eso. Mi corazón vibra con el sonido de su voz, mi alma abandona mi cuerpo cuando no está a mi lado, sólo con él me siento en armonía conmigo misma.
Dile a mi padre que me perdone, pero he aprendido de ustedes a luchar por aquello en lo que creo y a proteger a la familia.
Ruega a Dios por nosotras querida madre. Te escribiré si hallo el modo de hacerlo. Esperamos llegar a tiempo. Dios nos proteja.
Con todo mi amor, Ámbar Calmet.
1 de noviembre, 1933. Jacksonville. Florida.
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Angeles y Vampiros. La profecía
VampireNadhel Vlad Daimon, el ancestral, poderoso y maligno vampiro ha engendrado un hijo, desconociendo que la mortal elegida para ello, es la heredera del secreto que puede destruirlo. El niño se ha hecho hombre. El amor de una mujer podrá ser la salvaci...