Imagination I: La Caída de los Dioses

Capítulo 12: Kairi Hushida.

Kairi Hushida, una solidaria y bella mujer, de cabello marrón oscuro, rostro hermoso, cuerpo suave y delicado, Kairi vivía con su amado esposo en la aldea Twong, aquella aldea queda al sur de Ponam, prácticamente por las costas de éstas, la aldea era muy humilde, pero su gente se destacaba por la calidez y respeto en como se trataban entre sí. Los beneficios que tenía esta aldea era su pesca, pescaban variedad de peces y crustáceos. Las casas estaban hechas de madera, y el techo de hojas de palma, para que pudiesen resistir al viento se les ataban cuerdas, aquellas casas tienden a tener un ambiente muy acogedor. El clima de la zona en la que se situaba la aldea era cálido, en las noches hacía una brisa refrescante. Kairi vivía cerca al océano, este océano tenía más de diez tonos diferentes de azul, era realmente espléndido. Su casa era normal y humilde como el de cualquier otro, pero ella sentía que lo tenía todo porque estaba con su querido esposo, lo amaba tanto que desea morir por él. Para ella tener una familia era importante, porque creía que eso crearía un lazo de amor eterno hacia su esposo.

Así que un día como cualquier otro decidieron ser uno, se demostraron todo el amor que sentían, fluyeron todos los sentimientos buenos en esos momentos. Pasaron los meses y no veían éxito de un embarazo, intentaron varias veces, pero no veían resultados. El esposo comenzó a ponerse frustrado, así que le pidió a Kairi que fuera al hospital para que pudiesen revisarla y decirle cuál era el problema que tenía ella. Después de la consulta al médico, pasaron un par de meses, cuando Kairi y su esposo regresaron, les contaron una desgarradora noticia; Kairi no era fértil. Así que bajo la depresión e impotencia que sentía el esposo la abandonó, Kairi dejó de hacer algunas labores, sólo para lamentarse sobre ello. Tiempo después su ex marido regresó, sólo para reclamarle la casa, ya que esta era de él, la obligó a que guardara su ropa y finalmente se fuera.

Kairi cae en decadencia, se volvió una indigente que rondaba por la aldea, vivía de muy pocos recursos, vivía de todo aquello que las personas le daban ya que pedía limosna.
Un día estaba sentada en un pedazo de cartón, cubierta con los pocos arapos que llevaba puesto, se le acercó un misterioso hombre, se quedó mirándola.

-Parece ser que no está acostumbrado a ver indigentes por esta calle.- le habló Kairi algo incómoda.

-No, sólo que...- hace una pequeña pausa y prosigue. -...Tienes cara de querer una familia.- respondió el misterioso hombre.

La tristeza rodeó a Kairi y no aguantó las lágrimas, Suminoe la levantó y comenzó a explicarle sobre el Proyecto Norte, a través de lo que le iba contando el Maestro, a Kairi se le tornó un brillo impresionante en los ojos, estaba demasiado feliz, lloró de la emoción y la felicidad tras saber que tendría unos hijos a pesar de que no fuera de su sangre, ella los criaría como si en realidad lo fuesen. Después de un largo viaje, llegan al Templo Chon-Ji, el Maestro le da hospedaje a Kairi y le explica que va haber una ceremonia donde a las madres sustitutas les darán sus tres hijos.

(Retomando en el anterior capítulo...)

Era el día especial, finalmente Kairi tendría en brazos a sus tres hijos. Se reunió en el gran salón del templo donde habían trescientas mujeres listas para ser madres, se les veía ese brillo en los ojos y esa emoción en sus rostros. Pasaron minutos que para Kairi fueron horas, pues ya quería tener a sus hijastros, en eso llega Suminoe y comienza con su discurso. Ya terminado el discurso comienza a llamar a las madres con sus respectivos hijos. Pasaron horas cuando finalmente un ninja exclama...
-Fraternidad #65 la conformarán; la madre sustituta: Kairi Hushida y los tres niños: Zenjhi Tatsumakghi, Finn Lake y Pall Negal.
En eso dos ninjas se le acercan, eran dos hermosos niños envueltos en sábanas y al lado de ellos está un adorable niño con mejillas rojas de la mano de un ninja.

Los ninjas ubicaron a la fraternidad de Kairi hacia un grupo de fraternidades, después uno de los ninjas del templo llega a dirigir a este grupo de fraternidades, el ninja lleva al grupo afuera del gran salón, hasta llegar a un gran bloque, el bloque de dormitorios o de fraternidades, aquí el ninja les explica a las mujeres que deben acomodar a los niños de 2 años en adelante en sus respectivos camarotes, y quedarse con los bebés. Kairi lleva al pequeño Pall hacia su camarote, Pall le da la mano a Kairi y le dice con una tierna voz...
-¿Me protegerás de esos señores de negro?- pregunta mirando a Kairi.

-Te protegeré de todos, mi niño.- responde ella como una fiel madre.

Kairi acompaña un tiempo a Pall y lo hace dormir, Kairi estaba acompañada de dos ninjas que se encargaban de cargar a los dos bebés, éstos Ninjas llevaron a Kairi a su dormitorio, Kairi puso a los bebés en unas cunas de paja justo al lado de su cama, y cayó rendida, la noche se hizo muy eterna, y ahora, es momento de vivir, una nueva aventura, una nueva vida.