coffe ㅡ kim mingyu ! editando

14

Ella se río, asintiendo. Solía ser la menos puntual del grupo, pero no le molestaba llegar unos diez minutos antes, ya que se vería con el moreno.

-Si, suelo ser puntual. -Le mintió riendo aún.

-Pues eso supongo que es bueno. -Dijo MinGyu. Ella pensaba en que decir, pero siempre se quedaba sin tema. Simplemente se paro al lado de el y sonrió un poco.

-Bien... ¿Qué haremos? -Solto ella curiosa de saberlo, la verdad es que Hwa Min no se había puesta a pensar que podrían hacer en el día de hoy, aunque tampoco tuvo mucho tiempo para pensar, ya que salieron de improvisto.

MinGyu se encogió de hombros y la miro, sonriendo levemente.

-Pensaba ir a un café y luego por algún parque, aunque luego me di cuenta de que trabajas en un café al lado de un parque, y que seria algo monótono. -Dijo llevándose su mano a la nuca, suspirando.- Podemos hacer lo que tu quieras.

La chica pensó un poco y comenzó a caminar, sintiendo como era seguida por el chico, el cual caminaba detrás de ella.

-Podriamos ir a un cafe, no tengo problema, MinGyu.~ -Dijo riendo levemente, entrelazando sus manos en su espalda, para luego darse vuelta.

Miro a el chico y le hizo una seña para que caminara al lado de ella.

El acelero solo un poco el paso hasta estar a su lado y comenzó a caminar con ella, todavía era de día, pero seguramente atardeceria en cualquier momento.

Comenzaron a caminar hacia un café cercano mientras hablaban.

En determinado momento, MinGyu rozo su mano con la de la chica, y ella, sorprendida ante el tacto, se sonrojo un poco. Lo cual creo que era entendible, que el chico que te gusta te propusiera salir y que luego roze su mano con la tuy puede hacerte sonrojar.

HwaMin deslizó un poco su mano y tomo la del contrario, comenzando a caminar ahora en silencio, pero no era un silencio incomodo, para nada. Era uno bonito y bastante calmado, no necesitaban decir nada en ese preciso momento.

Una vez llegaron a la cafetería, se sentaron y esperaron a que vengan a tomar su pedido.

Un café doble y un frappuccino fueron entregados en esa mesa después de unos cuantos minutos, en los cuales los chicos conversaban entre si con grandes sonrisas en las caras, viéndose como una pareja.

Fueron unas bonitas dos horas en las cuales ambos disfrutaban de la compañía del otro, sin mucho que decir, hablando de temas personales y triviales. Discutiendo el típico "¿Qué fue primero? ¿El huevo o la gallina?", y otras cosas.

Aunque esas dos terminaron algo rápido para los dos, era hora de que MinGyu lleve a Hwa Min a su casa, a pedido del mayor, ya que la quería acompañar.